Cataratas Jog en la India durante la temporada de lluvias
Para todos aquellos amantes del turismo ecológico y los paisajes naturales, queremos ofrecer, aquí en Mi Viaje, toda la información que necesitas para viajar hasta la India, un país que esconde rincones únicos como las famosas e impresionares cataratas Jog.
Las cataratas Jog forman una de las cataratas más verticales del país. Sus aguas se precipitan a más de 250 metros de altura creando una de las atracciones turísticas más valoradas y visitadas en los últimos años.
Las Cataratas Jog
Situadas en el estado de Karnataka, en la región de Sagara, se encuentran unas de las cataratas más impresionantes de la India: las cataratas Jog. También conocidas como las cataratas Gerusoppe, son conocidas por ser las caídas de agua más famosas del país. Este tipo de saltos acuáticos se diferencian del resto porque el agua no se desliza sobre las rocas sino que cae directamente al vacío.
Las aguas de las cataratas Jog provienen del río Sharavati. Este fluye sobre una superficie rocosa de más de 200 metros de ancho. Las cataratas surgen de la creación de una amplia grieta de 290 metros de profundidad que, por la fuerza y la presión del agua, se divide en cuatro caídas distintas.
La primera de ellas es la bautizada como Raja, que es la más grande de las cuatro y de toda el país, y que deja caer el agua del río Sharavati a más de 250 metros de altitud. La siguiente es la conocida como Roarer, que deja caer el agua en un curioso ángulo de 45º. De hecho, su nombre viene del sonido que produce el agua al caer a causa de este desnivel.
La tercera caída es Rocket, desde donde el agua cae a gran velocidad a través de una pequeña abertura. Finalmente, podremos ver la cuarta y última caída, de nombre Rani. Esta, que se encuentra un poco más apartada, crea un manto de rocío y espuma que acaba por darle a las cataratas Jog ese aspecto tan sumamente mágico.
Visitando las cataratas Jog
Cuando lleguemos al lugar nos sorprenderá ver el buen trabajo realizado por gobierno del país. Gracias a la afluencia turística y a los esfuerzos por conservar este mágico lugar, se han construido nuevos pasos y senderos para facilitar el acceso a las cascadas y así admirarlas desde varios puntos.
Aún así, es necesario contar con cierta forma física para que la subida y la bajada por los más de 1.500 escalones no nos estropee la visita. Al final del recorrido nos espera como recompensa la posibilidad de darnos un baño refrescante en una piscina natural.
También se han construido, a lo largo del recorrido, varios miradores como la plataforma Watkins y el Bombay Bungalow. Desde aquí podremos tomar unas fotos realmente impresionantes de esta maravilla natural.
Por esto último, hacemos especial hincapié en visitar las cataratas durante la época de lluvias, ya que antes del monzón la corriente de agua es muy baja y corre despacio por el acantilado. Para disfrutarlas de verdad debemos viajar en la época de lluvias, que es cuando brota un impresionante torrente gracias al excedente de agua liberado desde el depósito la presa Lingamakki.
Consejos útiles durante la visita
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que, sin duda, la mejor época para disfrutar de las cataratas Jog es durante el monzón. Este periodo comprende desde finales de agosto a principios de diciembre. La temporada de lluvias se extiende hasta principios de marzo, coincidiendo con la temporada alta, por lo que el precio del viaje será más caro.
La cascada está situada a unos 50 kilómetros de la presa de Lingamakki, que se encarga de generar electricidad de la región de Karnataka. Por ello, aunque el lugar pertenece a las denominadas zonas de ecoturismo de la India, sí cuenta con servicios mínimos para los turistas. De hecho, es posible reservar un pequeño bungalow para pasar la noche; eso sí, reservando con antelación.
Además, llegar hasta nuestro destino no será complicado porque está bien comunicado por carretera. La ruta más fácil es aterrizar en el aeropuerto de Hubli y viajar a ellas desde la ciudad de Bangalore. Desde aquí, sólo tendremos que recorrer poco más de 100 kilómetros para llegar a las cataratas.
Como último aliciente, podremos optar por hacer varias rutas de senderismo por la zona e incluso visitar las cataras Dabbe Falls, también muy hermosas. Como colofón, recomendamos acercarnos hasta Thyvare Koppa, conocida como la reserva de león y tigre.