Qué ver en Bratislava en 3 días: una escapada perfecta
Europa ofrece una variedad de destinos para el viajero. Muchos son populares, pero existen otros que, a pesar de su poca fama, también son atractivos. En esta ocasión, nos situamos en Bratislava, capital de Eslovaquia, en el corazón del viejo continente. Te contaremos qué puedes ver ahí durante una escapada de 3 días.
Hay varias opciones: sus castillos especiales, variados museos y edificios con vistas espectaculares. Cada sitio es una muestra de la combinación de historia y modernidad que tiene la ciudad. ¡Acompáñanos a descubrir los rincones especiales de la capital eslovaca!
Bratislava, un lugar con historia pero moderno
Si hubiese una palabra para caracterizar a esta ciudad, sería histórica: desde sus inicios en el siglo V, hasta su consagración como capital de Eslovenia en 1993. Cada rincón es un relato que cautiva al viajero. Pero su atractivo va más allá. También se muestra como una metrópoli moderna ante el mundo. Si quieres conocerla más, te recomendamos un reservar un tour, así aprovecharás al máximo tu visita.
Primer día
Una opción es empezar por conocer casco histórico. Como ya mencionamos, guarda mucha de su historia imperial. Los siguientes sitios te acercarán a ese rico pasado.
Castillo de Bratislava
Es la fortaleza más representativa del país. Además de ser un mueso que preserva la memoria de Eslovaquia, también ofrece una vista privilegiada del río Danubio—uno de los más importantes de la región—. Se pueden encontrar varios documentos, obras de orfebrería y una colección de monedas que refleja la evolución de la política local.
¿Te interesa visitar esta bella fortaleza? Aquí te dejamos un recorrido gratuito que seguro te interesará.
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Iglesia Azul
Su nombre oficial es «Iglesia de Santa Isabel de Hungría», pero los residentes la conocen como «Iglesia Azul», porque cada uno de sus rincones, desde sus paredes hasta el techo, están teñidos de ese color. Es tan popular que tiene una copia pequeña en el parque Mini Europe, espacio en Bruselas donde están los maquetas de edificios que representan a cada país de la Unión Europea, en representación de Eslovaquia.
Torre de San Miguel
Es una torre que ofrece una vista privilegiada del centro histórico. En la punta se encuentra una estatua del arcángel Miguel luchando contra un dragón (de ahí su nombre). Pero no es lo único que se puede conocer ahí. A sus pies están los restos de una fortaleza medieval, donde llama la atención su puerta, que lleva el mismo nombre de la torre, y un museo que guarda varios objetos de valor de aquella época.
Segundo día
Bratislava también ofrece puntos modernos que no se pueden dejar de lado. Estos destacan, sobre todo, por su arquitectura basada en la renovación de edificios antiguos.
Palacio de Grassalkovich
Fue una mansión del siglo XVIII donde se alojaba la aristocracia local de aquella época. Sin embargo, tuvo una reconstrucción en 1996 y ahora es la residencia del presidente de Eslovaquia. Además de su facha blanca con techos grises y decoraciones en oro, posee un jardín con esculturas antiguas—que recuerdan su época imperial—y obras de artistas contemporáneos.
Galería Nacional Eslovaca
Es la galería más grande del país. Está abierta desde 1948, en un antiguo cuartel militar cerca del río Danubio, y tiene el objetivo de preservar el arte local y promoverlo al mundo. La colección abarca más de 60.000 obras de diverso tipo, entre nacionales y extranjeras, que se muestran diferentes eventos. Además, cuenta con librerías y cafeterías, ideales para pasar el rato.
Most SNP
Una de las construcciones modernas de la ciudad que se encuentra sobre el río Danubio. Llama atención, además de su arquitectura, por el restaurante giratorio en forma de ovni que se encuentra en la cima. También hay un mirador que ofrece una vista completa de la zona. Se puede acceder a cualquiera de ellos por medio de un ascensor o tomando las escaleras.
Para saber más: Visita el río Danubio, el segundo más largo de Europa
Tercer día
En los alrededores la Bratislava también hay alternativas que vale pena conocer. Hay edificios en ruinas y lugares que, además de tener una rica cultura, ofrecen la posibilidad de practicar deporte.
Slavín
Es un monumento, que fue levantado en la segunda mitad del siglo XX, como un homenaje a los soldados soviéticos que pelearon en la Segunda Guerra Mundial. En la parte superior se encuentra la estatua de un combatiente levantando una bandera como símbolo de victoria. Por su tamaño, que supera los 39 metros de alto, es un gran atractivo para los amantes de la arquitectura monumental.
Ruinas del castillo Devín
Hasta 1809, este castillo era una importante zona militar. Pero en aquel año fue destruido casi en su totalidad por el ejército de Napoleón. En la actualidad, las ruinas son un atractivo para los visitantes locales y extranjeros. Además, ofrece la posibilidad de practicar deportes al aire libre, como senderismo o ciclismo, en los caminos que rodean la fortaleza.
Castillo de Červený Kameň
Esta fortaleza se ubica en una loma rica en piedras de cuarzo. De ahí viene su nombre, que en español se entendería como «piedra roja». Durante el renacimiento, fue un lugar que alojaba a las familias nobles de la zona. Ahora es un sitio dedicado al turismo, muy llamativo entre los viajeros. Además, cuenta con las bodegas más grande de Europa central, que se encuentra bajo el castillo.
Descubre esta joya eslovaca
Como se puede ver, esta ciudad encierra mucha cultura e historia. Los sitos que mostramos son solo una muestra de aquella diversidad y cuenta un poco del pasado y presente de Bratislava. Así que, ¡anímate a descubrir todo lo que la capital de Eslovaquia tiene para ofrecer! Es una experiencia que seguramente no te querrás perder.
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