¿Qué comer en Córdoba (España)? Una gastronomía por descubrir
La gastronomía de España es muy variada, ya que ofrece muchas posibilidades a quien busca probarla. Una muestra de aquella riqueza la podemos encontrar en Córdoba. Es por ello que hoy queremos mostrarte cinco platos que puedes comer ahí.
Acompáñanos y conoce el salmorejo, una comida tradicional contundente, pero deliciosa. También otras alternativas más sencillas, pero imperdibles, como el flamenquín o las berenjenas fritas. Un universo de sabores nos espera, ¿estás preparado?
La gastronomía cordobesa
Córdoba cuenta con uno de los patrimonios culturales más reconocidos del mundo. Posee muchos sitios considerados como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Pero su comida no se queda atrás, ya que es una de las más ricas que podemos encontrar en España. En pocas palabras, es sencilla, variada y muy atractiva para cualquier viajero.
Además, está marcada por la influencia de distintas civilizaciones, especialmente de las que provienen del norte africano. Por ello, no es para nada extraño encontrarse con comidas que recuerdan a las que podemos encontrar en la cocina del Mediterráneo.
En sus recetas existen una gran cantidad de ingredientes. Sin embargo, los más comunes son el aceite de oliva, las carnes y los vegetales.
Así que no hay excusas. Probar la gastronomía local es una de las actividades imprescindibles, cuando viajes a estas tierras. ¿No sabes por donde empezar? Nosotros te lo contamos.
Con este tour gastronómico, podrás aprovechar mejor tus vacaciones. Tendrás la oportunidad de degustar sus principales manjares.
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Qué comer en Córdoba
En la siguiente lista te mostramos cinco opciones para comer en Córdoba. Son las más populares y representan una pequeña parte de la esencia local. Y, lo mejor de todo, hay oferta para todos los gustos.
1. Salmorejo Cordobés
Empezamos la lista con una de las comidas emblemáticas de la zona, el Salmorejo cordobés. Es una sopa fría que se come, principalmente, en los días de más calor. Se lo prepara de muchas formas, pero la más tradicional incluye tomate, pan de telera, aceite de oliva y sal.
Quizá su fama en Córdoba se deba a sus orígenes, que datan, por lo menos, del siglo XII o XVII. En aquella época, fue uno de los primeros platos que adoptó el tomate en la dieta local.
Tanto por su consistencia, sabor y precio económico, es una de las comidas que no se pueden dejar de lado. ¿Quieres conocer más? Con el siguiente taller de salmorejo lo podrás hacer.
2. Rabo de toro
En sus inicios, fue considerado como un plato para «pobres». ¿Por qué? Todo inicia con las corridas de toros. Después del espectáculo, los nobles y grandes mercaderes se quedaban con las partes más codiciadas del animal. El resto se repartía entre la gente del pueblo; la mayoría, de bajos recursos.
Fue así como nació. Pero que su historia no te engañe: es uno de los manjares más demandados de la localidad. Tanto, que es casi imposible encontrar algún restaurante que no lo ofrezca.
Es sí: no es común encontrarlo en su preparación original, así que lo más probable es que lo consumas en su variante, elaborada con carne de res.
3. Flamenquín
El Flamenquín es una comida sencilla, pero deliciosa. Se prepara con lomo de cerdo, jamón serrano y pan rallado. Puedes encontrarlo en cualquier comedor de la localidad, como un aperitivo — tapa, como suelen llamarlo — o plato principal.
No solo es una receta tradicional de la zona, sino de toda España. De hecho, hay varios sectores del país que se disputan su origen. A pesar de ello, de lo que sí estamos seguros es que no querrás dejar de probarlos.
Para disfrutarlo al máximo, basta con acompañarlo de papas fritas y un poco de ensalada.
4. Mazamorra
Se puede decir que es un predecesor del Salmorejo. Al igual que él, tiene un pasado que se vincula con las poblaciones más humildes.
Su fácil preparación y versatilidad — hay una gran cantidad de ingredientes que se pueden añadir — lo convirtió en un preferido de muchas cocinas locales. Sin embargo, de todos los sabores posibles que tiene, uno resalta: el ajo, que le otorga su característico color blanco.
Aunque es común comerlo junto con huevos cocidos y aceitunas, la verdad es que su guarnición ofrece muchas alternativas.
5. Berenjenas fritas
Para finalizar, nada mejor que otro clásico local. Las berenjenas fritas son un platillo sencillo, pero en extremo delicioso. El secreto de su sabor está en la calidad de sus ingredientes — y en Córdoba abundan —.
De todos ellos, que no son muchos, quizá el más importante es la miel. Ella es la que reboza el plato y le otorga su particular sabor dulce y salado a la vez.
No puede faltar en la carta de ningún comedor o bar de la ciudad, por lo que es una opción imperdible para cualquier amante de la comida.
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Descubre las maravillas de comer en Córdoba
Como pudiste apreciar, la gastronomía de Córdoba ofrece una gran cantidad de opciones. Cada una de ellas tiene su particularidad, pero no descuidan su sabor.
Sencillos o complicados, contundentes o ligeros, estos platos forman parte de la identidad local, rica en patrimonio cultural.
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