Los 7 mejores sitios de Dubái que no puedes dejar de conocer
La ingente riqueza de Dubái, y en general de los Emiratos Árabes, ha transformado lo que fueron pequeñas poblaciones a orillas del Golfo Pérsico en grandiosas ciudades. Ciudades donde todo tiende a la ostentación, y ese es su valor turístico. Hay sitios de Dubái, edificios y atracciones únicas por su tamaño, por su peso o por su presupuesto. ¿Cuáles? A continuación lo contamos.
El origen del actual Dubái
Pero antes de dar un repaso a los sitios de Dubái que no puedes dejar de conocer, deberíamos entender el porqué de tal cantidad de lujo y derroche. La razón no es otra que la caprichosa presencia de gas y petróleo en esta zona del mundo.
Ese es el origen de todo, y a partir de ahí los jeques de estos emiratos han entrado en una competición por poseer las cosas más espectaculares del planeta. Gastarse lo que haga falta en su construcción y que eso atraiga visitante, a poder ser con una economía muy, muy saneada. Y así ocurre en Dubái.
Los sitios de Dubái más asombrosos
Este es un lugar que siempre sorprende y a nadie deja indiferente. Lo es, entre otras cosas gracias a estos sitios de Dubái, sencillamente espectaculares.
1. El Burj Khalifa
Posiblemente, el gran emblema de las construcciones fastuosas sea la torre Burj Khalifa, la cual se ha convertido en el gran referente del futurista skyline de Dubái.
¿Qué altura alcanza el Burj Khalifa de Dubái? Tiene, ni más ni menos, que 828 metros. Da vértigo de pensarlo. No obstante, si no te asusta, puedes acceder hasta su mirador superior y contemplar la urbe a tus pies.
2. El Palmera Jumeirah
La otra gran imagen del turismo en Dubái es una construcción en horizontal. Sí, porque el Palmera Jumeirah es un archipiélago artificial de islas que si se observa desde el cielo ofrece la visión de una gigantesca palmera en el mar.
En esta palmera hay un sinfín de alojamientos, playas artificiales y puertos privados. En fin, todo lo que un turista con mucho dinero puede desear. Y si no lo hay, basta con pedirlo y por supuesto pagarlo.
3. El hotel Burj Al Arab
Muy cerca del Palmera Jumeirah hay otro alojamiento. Pero no es para cualquiera, es el bello hotel Burj Al Arab. Su arquitectura exterior en forma de vela merece una tranquila contemplación.
Si bien, en cuanto a su interior no todo el mundo la podrá disfrutar. Solo un dato. Es el único hotel de siete estrellas que hay en el mundo. Una categoría inventada para él.
“El lujo es una necesidad que empieza cuando acaba la necesidad.”
-Coco Chanel-
4. Madinat Jumeirah
Junto a ese hotel también hay que ver la Madinat Jumeirah. Una porción de la ciudad que pretende evocar el aspecto de una vieja medina árabe, aunque difícilmente podríamos pensar que por sus calles corrieran anchos canales. Pues los hay.
En realidad, se trata de un moderno zoco que adquiere su mejor color de noche por su mucha animación en bares y restaurantes.
5. Dubai Creek
Este otro de los sitios de Dubái que nos remite a su pasado, cuando era un pequeño puerto que unía el desierto y el mar. Es una zona que se puede recorrer navegando en barcos tradicionales. Y el contraste no puede ser mayor, entre lo que fue esa zona y el repertorio de moderna arquitectura que ofrece hoy en día.
6. Dubai Mall
El concepto de turismo en Dubái es bastante particular. La idea de los promotores es provocar el asombro en sus visitantes, pero también incitarles a las compras. Un muestra es el Dubai Mall, sencillamente, el centro comercial más grande del planeta.
Sin duda, dada la climatología de Dubái, la estancia durante el día hay que pasarla a cubierto. Y uno de los lugares predilectos es el Dubai Mall, donde no solo se pueden hacer compras. Aquí hay todo tipo de shows y actividades.
Un ejemplo, en su planta baja está el Dubai Aquarium, que, por supuesto, con su volumen de 10 millones de litros es el mayor del mundo.
7. Dubai Fountain
Y vamos a acabar con otro de los sitios que no te puedes perder durante un viaje a Dubái: sus increíbles fuentes entre el citado Dubai Mall y el Burj Khalifa. Por supuesto, la Dubai Fountain es la fuente danzante más grande del globo, y ofrece sus espectáculos audiovisuales cada día, al atardecer.
Una cita obligada que, como todos los sitios de Dubái que se contemplan, provoca admiración, pero también alguna que otra reflexión.