Descubre los rincones imprescindibles de Stirling

Entre frondosa vegetación y junto al río Forth se encuentra esta preciosa ciudad escocesa, estrechamente relacionada con la figura de uno de los héroes de la historia escocesa: William Wallace.
Descubre los rincones imprescindibles de Stirling
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 21 octubre, 2019

Stirling es una de las ciudades más bonitas de la mágica Escocia. Es un lugar de leyenda en el que castillos, abadías, cementerios románticos y casas estilo Tudor sobresalen entre una frondosa vegetación. Se ubica en la ladera de una colina y es una población que no te puedes perder si visitas la zona central de Escocia. ¿Nos acompañas a conocerla?

El castillo de Stirling

Castillo de Stirling

Situado en lo alto de la colina de Stirling, este impresionante castillo domina la ciudad y, por tanto, es el mejor mirador al que puedes subir. Por tres de sus lados está rodeado de acantilados hechos a mano por el hombre y cuenta con unos muros de extraordinaria fortaleza, por lo que era casi inexpugnable.

Su construcción data de los siglos XIV al XVIII y ha sido testigo de los grandes acontecimientos de la historia de Escocia, como la lucha de William Wallace o de Robert the Bruce contra los ingleses. Y en su capilla fue coronada María Estuardo, reina de Escocia.

Cerca del castillo se puede visitar Argyll’s Lodging. Es un palacio señorial en el que se puede ver cómo era la vida de los nobles en Escocia. Su acceso está incluido en la entrada del castillo. También verás las ruinas de Mar’s Wark, otra mansión de la que solo se conservan la fachada y los sótanos.

La iglesia de Holy Rude

Abadía de Holy Rude
Abadía de Holy Rude

Levantada junto al castillo, es quizás el monumento más importante de la ciudad. Dedicada a la Santa Cruz, esta iglesia de finales del siglo XV es la única iglesia de Escocia en la que se ha llevado a cabo una coronación y una de las pocas del Reino Unido, aparte de la abadía de Westminster.

En ella se coronó al rey Jaime VI de Escocia, hijo de la reina María Estuardo, cuando contaba solo con un año. Fue así porque en 1567 Stirling era la capital del Reino de Escocia.

Su visita es gratuita y cuenta con un precioso cementerio a su alrededor en el que podemos encontrar tumbas que van desde la Edad Media hasta el siglo XX.

El centro histórico

Centro de la ciudad
Centro de Stirling

Es un espacio pequeño y encantador en el que las pequeñas plazas y las casas estilo Tudor te acompañarán en tu recorrido. Allí no te puedes perder la antigua plaza del Mercado y el edificio del Tolboothm, hoy sala de conciertos, pero que antiguamente sirvió de cárcel, ayuntamiento, parlamento, etc.

Paseando por el centro también podrás encontrar restos de su antigua muralla, cañones y un monumento al unicornio que se ubica en la antigua plaza del Mercado.

El puente de Stirling y el monumento a William Wallace

Monumento a William Wallace
Monumento a William Wallace

Otro de los iconos de Stirling es su puente medieval. Construido en piedra, es uno de los rincones más visitados en esta ciudad porque se sitúa en el lugar en el que William Wallace derrotó a los ingleses en 1297. Y no es el de época de Wallace porque, precisamente, el puente jugó un papel importantísimo en la derrota de las tropas inglesas al partirse.

Mirando al río, sobre una colina, se encuentra el monumento a este héroe de la historia escocesa. Para llegar a él hay que ir por Causewayhead Road y ascender. Aunque si compras la entrada, un microbús te subirá hasta allí. El monumento en sí es una torre de estilo victoriano.

En su interior se custodia la que se dice es la espada de William Wallace y numerosos escalones te llevarán hasta su cima, donde se encuentra un mirador. Desde allí tendrás una de las vistas más espectaculares de toda Stirling. En verano es una zona muy animada, pues se hacen conciertos, hay charlas históricas y recreaciones con actores.

Las ruinas de la abadía de Cambuskenneth

A medio camino entre el río y el monumento a William Wallace se encuentra esta abadía de la que solo queda en pie su torre. Allí se encuentran las tumbas del rey James III y su esposa la reina Margarita de Dinamarca. El entorno en el que se ubica es un espacio verde y tranquilo donde se puede pasear y contemplar la naturaleza y su entrada es gratuita.