El Puente Vecchio: único superviviente a la Luftwaffe alemana
Con siglos de historia, el Puente Vecchio es uno de los símbolos de Florencia. Un puente singular, hermoso y escenario de todo tipo de acontecimientos. Un puente que ha logrado sobrevivir a algunos sucesos realmente dramáticos, como el que nos centra ahora.
Puente Vecchio, un superviviente
Durante la II Guerra Mundial fueron muchas las ciudades europeas que sufrieron. La tragedia de la guerra alcanzó cotas sanguinarias que hasta entonces eran inimaginables. Las fuerzas aéreas de ambos bandos sobrevolaban y bombardeaban las ciudades más importantes de cada país.
En el caso de Italia, Florencia parecía que iba a estar a salvo en todo momento. Era como si su magnífico patrimonio histórico la protegiera de la contienda. Hasta 1943. Ese año una escuadrilla de aviones aliados atacaba estaciones de tren y líneas ferroviarias.
Desde ese momento los bombardeos se sucedieron, aunque evitando el maravilloso centro histórico. Sin embargo, todo cambió en agosto de 1944. Los aliados estaban a las puertas de la ciudad y las tropas alemanas decidieron volar los puentes para impedir su avance.
“Hay que evitar el combate en lugar de vencer en él. Hay triunfos que empobrecen al vencido, pero no enriquecen al vencedor.”
-Juan Zorrilla de San Martín-
¿Qué salvó al Puente Vecchio?
Uno a uno, los puentes de Florencia desaparecieron, pero el Puente Vecchio sobrevivió. Ni el ejército nazi de tierra ni tampoco a la Lufwaffe, es decir, la armada aérea germana, lo destruyeron.
¿Cuál fue la razón? La leyenda dice que su belleza había cautivado al mismísimo Hitler, que dio orden de respetarlo, evitando así el destino de todos los demás puentes de la ciudad. Una historia cuya veracidad no se ha podido determinar a ciencia cierta.
Pero el puente tampoco salió completamente indemne. Su estructura se salvó, pero para impedir su uso, las tropas alemanas destruyeron todas las edificaciones que había a su alrededor. De esta manera se generaron escombros suficientes como para impedir acceder al puente y, por supuesto, transitar por él.
La belleza del Puente Vecchio
Sobrevivió a la guerra y por ello el Puente Vecchio es hoy una de las construcciones más antiguas de Florencia. Un puente con orígenes lejanos, ya que parece que en el sitio que ocupa ya hubo un puente romano levantado con madera.
Se dice que es imposible saber con total certeza cuántos puentes se han levantado en el mismo lugar después de aquel. Lo importante es que, por un medio u otro, ha sido posible cruzar el río. Lo que sí se conoce es la antigüedad del que hoy admiramos: este puente se levantó en la Edad Media.
Desde entonces es un paso fundamental en la ciudad de Florencia. Y resulta más que llamativo cruzar por él, puesto que a sus lados hay diversos establecimientos. Gracias a ellos, el Puente Vecchio está siempre a rebosar de gentío y buen humor.
Curiosidades sobre uno de los puentes más bellos
La historia de este puente es muy peculiar. En sus orígenes, aquí se instalaban en mesas mercaderes que vendían todo tipo mercancías. Cuando no pagaban los impuestos, los soldados no tenía piedad y destrozaban sus “bancos”, sus mesas. De ahí el origen del término “bancarrota”.
No es la única curiosidad. Este puente tiene un pasadizo no secreto, pero sí oculto. Se construyó sobre los establecimientos uniendo dos palacios, el Palazzo Pitti y el Palazzo Vecchio. Lo mandó construir Cosme I para no tener que mezclarse con la gente para ir de uno a otro, teniendo en cuenta que uno de los palacios era su casa y el otro la sede del gobierno de la ciudad.
Florencia, maravilla arquitectónica
El Puente Vecchio es solo una de las joyas de Florencia, un verdadero paraíso para los amantes de la arquitectura clásica y el arte. Durante décadas, los Médici hicieron las veces de mecenas para las grandes actividades artísticas de la ciudad. Leonardo da Vinci, Boticelli y Miguel Ángel, entre muchos otros, trabajaron para ellos.
Escultura, arquitectura y pintura se dan la mano en cada callejón y en cada edificio. El Duomo, la Galería Ufizzi, el Palazzo Vecchio o la Piazza della Signoria son solo algunos de los rincones de Florencia de visita obligada. Por todo ello y otros muchos lugares maravillosos, Florencia fue incluida por la Unesco en su listado de Patrimonio de la Humanidad en 1982.
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