Un paseo por Urbino, la ciudad natal de Rafael

Urbino es una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por su excepcional conjunto de arquitectura y arte del Renacimiento.
Un paseo por Urbino, la ciudad natal de Rafael
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 07 diciembre, 2019

Urbino tal vez no sea la ciudad más famosa de Italia. Sin embargo, reúne todas las cualidades que buscan los viajeros en las ciudades trasalpinas, es decir, tiene una larga historia y un patrimonio deslumbrante plagado de obras de arte. Además, posee una gastronomía deliciosa y un clima muy agradable. ¿No habías oído hablar de Urbino? Pues cuando acabes de leer esto, querrás conocerla en persona.

Donde está Urbino

La ciudad de Urbino se encuentra en la mitad norte de Italia, más o menos, a la altura de la célebre Toscana. Sin embargo, la ciudad está orientada hacia la costa adriática.

Casco histórico de Urbino
Casco histórico de Urbino

Por su situación, puede ser una parada ideal para todos aquellos que hagan una ruta en coche por esta zona visitando ciudades de costa como Ancona o Rimini. Si bien, Urbino está en el interior, como otro de los referentes de esta zona: la república independiente de San Marino.

Y, como ocurre con tantas y tantas ciudades de Italia, también Urbino remonta sus orígenes a tiempos de los romanos. Así queda acreditado por los distintos restos arqueológicos hallados. Sin embargo, aquella población original no era de gran importancia ni se desarrolló en exceso. Eso iba a ocurrir en un momento clave de su historia: el siglo XV.

Urbino, Patrimonio de la Humanidad

La ciudad de Urbino no tiene la fama de Florencia, sin embargo, está considerada una de las grandes cunas del Renacimiento. Es una ciudad cuyo patrimonio más espectacular data de esa época, cuando por aquí hubo importantes mecenas y también trabajaron destacados artistas.

Y no solo eso, Urbino fue la cuna de uno de los más grandes pintores de todos los tiempos: Rafael Sanzio. Por eso, no es extraño que estemos hablando de un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

La casa-museo de Rafael

Casa natal de Rafael
Casa natal de Rafael – Sailko / Wikimedia Commons

Dentro de la visita a Urbino hay un lugar que nadie se puede perder. Y ese es, precisamente, el lugar donde vino al mundo en 1483 el gran pintor. Se trata de una casa museo que os espera al final de la calle de Via Bramante. Así, tras ver sitios como el palacio Albani, el Huerto Botánico o la iglesia del Espíritu Santo, llegamos a la Via Raffaello, y en esa esquina nació el genio.

Allí se mantiene en pie la casa familiar y se guardan algunos recuerdos de la época, incluida alguna obra de su juventud. Y esta no es más que una de las muestras del arte de Rafael que hay en Urbino. Hay más en su ciudad, y son importantes para descubrir los orígenes del pintor que más tarde deleitaría a todo el mundo con sus grandes obras del Vaticano.

Seguimos el recorrido por Urbino

Catedral de Urbino
Catedral de Urbino

Tras esta primera visita, aún nos queda un buen repertorio de arte en Urbino. Están la iglesia de San Francisco, una de las más antiguas, y palacios como el de los Escolapios en la plaza de la República, una de las más animadas de todo el núcleo urbano.

Tras tomar allí algo, podemos proseguir por el Corso Garibaldi y la Via Vittorio Veneto. En ella se van sucediendo joyas como el Teatro Sanzio, el Ayuntamiento o el Palacio Corboli.

Casi sin querer, iremos llegando a otro de los monumentos más significativos de Urbino: su catedral. Es un templo originado en la Edad Media, si bien ahora su apariencia es puramente neoclásica, ya que fue gravemente dañado durante un terremoto en el siglo XVIII y por eso se reconstruyó casi de manera íntegra.

El Palacio Ducal

Palacio Ducal de Urbino
Palacio Ducal

Otro gran tesoro de Urbino está frente a la catedral: el Palacio Ducal. Lo mandó construir a mediados del siglo XV un personaje clave en la historia de la ciudad: el duque Federico de Montefeltro. Fue uno de los mecenas más importantes del Renacimiento, cuyo rostro inmortalizó el pintor Piero della Francesca, del cual podemos ver algunas de sus obras maestras en el palacio.

Y es que el Palacio Ducal hoy en día es la Galería Nacional de las Marcas. Hablamos de un museo fascinante donde, además de Piero della Francesca y alguna obra de Rafael, hay un magnífico muestrario del arte del Renacimiento donde no faltan grandes firmas como Tiziano.

En definitiva, que cualquier amante del arte debe viajar a Urbino. Como has visto, es una ciudad a veces injustamente desconocida, ya que tiene muchísimo que ofrecer a sus visitantes.