El Parque Nacional Corbett y su rica fauna
El extenso Parque Nacional Corbett es el más antiguo de la India y uno de los mejores lugares de este inmenso país para ver fauna en estado salvaje.
Son muchas las especies que se avistan en el parque, desde cientos de aves hasta cocodrilos. Lógicamente también se contemplan los majestuosos elefantes asiáticos. Pero sin duda la gran estrella del parque de Corbett es el tigre de Bengala.
Dónde está el Parque Nacional Corbett
Los más de 500 kilómetros cuadrados de espacio protegido del parque se encuentran al norte de la India, ya en las estribaciones de la impresionante cordillera del Himalaya. Concretamente en Kumaon, entre los distritos de Pauri Garhwal y Nainital de Uttarakhand.
A pesar de que el parque está a unos 300 kilómetros de la capital del país, el desplazamiento desde Delhi puede durar unas ocho horas.
Para visitar el Parque Nacional Corbett se hace necesario visitar la ciudad de Ramnagar. Allí están las oficinas centrales y es el mejor lugar para informarse sobre las múltiples posibilidades de alojamiento.
También puedes reservar algún recorrido guiado por el parque. Unos safaris fotográficos que se pueden hacer tanto en todoterreno como a lomos de gigantescos elefantes.
La fauna del Parque Nacional Corbett
Los itinerarios por el interior del parque siempre se hacen acompañados de guías perfectos conocedores del territorio. Siguiendo sus consejos y respetando todas las medidas de seguridad es posible maravillarse con los animales que aquí habitan. Contemplar los diversos tipos de ciervos que pastan por la zona o los monos y macacos son algunos de los muchos atractivos que nos ofrecen estos itinerarios.
No obstante, es importante dejarse guiar y aconsejar por el personal del parque, porque hay animales fascinantes pero muy peligrosos. Por ejemplo, las cobras o los cocodrilos unicornio en las aguas del río Ramganga.
Incluso los elefantes salvajes son poderosísimas fuerzas de la naturaleza de carácter apacible, pero muy celosos de su territorio Ten cuidado porque si un elefante se siente acosado puede atacar.
Y claro, mención especial merece el tigre de Bengala. Un felino solitario al que de vez en cuando se le avista descansando entre la maleza. Pero siempre está preparado para una nueva captura de algún apetitoso ciervo sambar, una de sus presas preferidas.
Aquí encuentra este incomparable animal su alimento y su refugio, tras años de haber sido acosado por el hombre y formar parte de la lista de animales en peligro de extinción.
El Proyecto Tigre en Corbett
De hecho, el Parque Nacional Corbett fue el lugar idóneo para poner en marcha el programa de protección de este gran mamífero. Hace unas décadas no llegaban a los 2.000 ejemplares en todo el país, y paulatinamente este número se ha ido incrementando gracias al Proyecto Tigre. Aunque en la actualidad su número está muy lejano a los primeros años del siglo XX, cuando había hasta 50.000 en la India.
Jim Corbett da nombre al Parque
En esa época en la que abundaban los tigres y otros felinos como los leopardos era habitual que hubiera cazadores especializados en su captura.
Uno de ellos fue Jim Corbett, un personaje nacido en la India, pero de padres ingleses e irlandeses. Durante años se dedicó a matar a estos felinos, que suponían una amenaza para el hombre.
Sin embargo, siempre fue un apasionado de los paisajes, la flora y fauna de su tierra, hasta que un día decidió dejar de ser cazador y dedicarse a conservar la naturaleza. Pese a sus orígenes, jamás tuvo una actitud colonialista ante sus conciudadanos, por ello en 1957, con una India ya independiente se rebautizó el parque y desde entonces lleva su nombre.
“Cuando un hombre quiere matar a un tigre,lo llama deporte cuando es el tigre quien quiere matarlo a él, lo llama ferocidad.”
-George Bernard Shaw-
Si se decide viajar hasta esta reserva protegida hindú es sumamente interesante leer algo sobre Jim Corbett. Dejó muchos escritos en los que se descubre una vida de intensas aventuras y sobre todo sentimiento de amor a su tierra y sus habitantes.
Tras esas lecturas los safaris por el Parque Nacional Corbett tienen un sabor diferente. Se hace inevitable apasionarse ante la naturaleza salvaje de esos paisajes y sentir un profundo respeto hacia esa fauna, muchísimo más poderosa que cualquier hombre y tan débil frente a él.