El Palacio da Pena en Sintra y su belleza
Hoy te traemos uno de los palacios más espectaculares del mundo, el Palacio da Pena, en la villa de Sintra. Un precioso regalo que el rey Fernando II obsequió a su esposa, María II de Portugal, para que fuera su residencia de verano.
El Palacio da Pena es producto de una bella historia de amor, será por eso que su belleza es tan sobrecogedora e impresionante. Su arquitectura, su colorido, sus jardines, su entorno natural y sus impresionantes vistas no dejan indiferente a ninguno de sus visitantes.
Elevado sobre una colina a 500 metros de altura se encuentra el Palacio da Pena, en la localidad portuguesa de Sintra, a unos 20 kilómetros de Lisboa. De su ubicación deriva su nombre (Pena significa “peña” en portugués) que se refiere a su situación en lo más alto de un risco.
Es el más destacado de los palacios y fincas señoriales de la zona histórica de Sintra y es también el más visitado, por lo que en temporada alta se registran largas colas de turistas ávidos de conocer este impresionante lugar, pero que igual merece la pena.
” [Sintra] sería un buen paraíso si Dios hiciese otra tentativa.”
-Fragmento de Memorial do convento, de José Saramago-
Una arquitectura ecléctica
Una de las características de este bello palacio es su eclecticismo, y es que fue diseñado con una mezcla de estilos y corrientes estéticas que resulta única en el mundo en una sola edificación.
Se pueden observar elementos clásicos portugueses, como los bellos azulejos que recubren las paredes del palacio, así como también atributos propios del romanticismo como numerosas referencias mitológicas y religiosas.
En la reconstrucción del palacio, que data del siglo XIX, se incluyeron motivos mudéjares y manuelinos que se integran perfectamente con torres góticas y un mobiliario barroco que se combina en su interior para mostrar una imagen espectacular y extravagante.
El parque
Dicen que lo mejor del palacio está en su exterior, y es que razones sobran, las impresionantes vistas y sus bellísimos jardines no dejan lugar a dudas de su magnífica belleza.
Los Jardines da Pena tienen su entrada en el primer parking que se encuentra cuando se asciende al Monte da Lua. Son de una belleza inigualable contenidos en 85 hectáreas donde se pueden encontrar desde plantas tropicales hasta helechos, pasando por secuoyas.
Fernando II también diseñó caminos sinuosos que llegan a hermosos lugares y vistas increíbles tales como la Cruz Alta, el Alto de San Antonio, el Alto de Santa Catarina, La Gruta del Monje o la fuente de los Pajaritos.
No hay que perderse la zona del Valle de los Lagos, donde hay cinco pequeños estanques. Allí se puede disfrutar del antiguo mirador de la reina doña Amélia, la estatua del Guerrero o el jardín de la condesa d’Edla.
El interior del Palacio da Pena
Al entrar al palacio nos encontramos con numerosos elementos relevantes como la figura del Tritón, el medio pez medio hombre que se encuentra debajo del pórtico del Tritón, sus hermosos vitrales y los azulejos barrocos.
En las estancias interiores, la mayoría de las salas tienen personalidad y estilo propio, influenciadas por las corrientes artísticas de su exterior. Entre los espacios interiores que pueden visitarse destacan las habitaciones, la cocina con todos sus utensilios, el patio interior y el comedor, con la vajilla que era cambiada de acuerdo al color del vestido de la reina.
En todas las estancias se encuentra el mobiliario y los enseres de la época, todo cuidado al detalle para replicar los espacios tal cual como estaban en su momento de máximo esplendor.
Cómo llegar al Palacio da Pena
El Palacio da Pena está abierto todo el año y se puede llegar a él mediante paseos libres o visitas guiadas. Si quieres llegar a pie debes tener en cuenta que son bastantes kilómetros en una subida en pendiente, algo que puede ser bastante trabajoso.
Si vas en coche, tienes los aparcamientos situados en la entrada, otra opción es tomar el autobús que te dejará directamente en las taquillas. Desde la entrada al parque hasta el palacio, hay una pequeña subida de unos 10 minutos que la puedes realizar a pie o bien en los minibuses destinados para ello.
El precioso Palacio da Pena es, sin duda, uno de los más impresionantes. Su belleza ecléctica, cuidados interiores, vistas magníficas y unos exteriores que parecen de cuento, harán de tu visita una experiencia que no olvidarás.