Las noches blancas de San Petersburgo

Durante las noches blancas de San Petersburgo el sol nunca llega a ponerse por completo. Por eso, la ciudad rusa no duerme y celebra un sinfín de eventos culturales.

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 27 enero, 2021

Situada en una latitud extremadamente norte del continente europeo, la ciudad de San Petersburgo tiene en su calendario unos días en los que el sol apenas se pone, de manera que el día nunca acaba. Es lo que se llaman noches blancas, todo un acontecimiento que se vive con la intensidad que se merece, con eventos interesantes a cualquier hora del día o de la noche.

¿Cuándo ocurren las noches blancas de San Petersburgo?

San Petersburgo se encuentra muy cerca del paralelo 60 N. Es decir, que allí, al igual que hay días de invierno en los que el sol apenas se intuye, también hay un periodo del año en que el astro rey no deja de verse. Son las noches blancas y comienzan sentirse a finales del mes de mayo y perduran hasta mediados de julio.

Es decir, el cielo está iluminado durante las 24 horas, si bien en lo que sería la noche, el cielo luce con la luz de un largo atardecer que se funde con el amanecer. No es algo exclusivo de San Petersburgo, se da en muchos otros lugares y, por supuesto, en todo su entorno del Báltico. Pero en la antigua capital de los zares se vive de un modo especial.

Solo por experimentar ese sensacional efecto atmosférico ya merece la pena planear un viaje a San Petersburgo en esas fechas. Pero además, una vez que se está allí se descubre que la ciudad rusa aprovecha al máximo esas horas de luz, de manera que siempre hay algo que hacer.

Noches blancas: estrategia cultural y turística

Para comprender semejante frenesí de actividades, hay que tener en cuenta la otra cara de la moneda. Los largos inviernos hacen que la primavera y el verano se vivan con especial vitalidad en San Petersburgo.

Y todo, sin olvidar la gran tradición cultural de esta ciudad que posee un patrimonio único, tanto en forma de viejos palacios de la época de los zares como en forma de museos, en especial el Ermitage, uno de los mejores museos del mundo. Por todo ello, sin duda, se ha convertido en la gran capital turística de Rusia.

Es cierto que mucha gente viaja a Moscú para conocer lugares como el Kremlin y su histórica Plaza Roja. Pero la verdad es que son más los que prepararan una escapada a San Petersburgo, especialmente en el periodo de las noches blancas, cuando la ciudad nos puede sorprender con propuestas como estas:

1. Cruceros ‘nocturnos’ por los canales de San Petersburgo

Una de las actividades más demandadas durante las noches blancas son los recorridos en horarios nocturnos por los canales de San Petersburgo. La razón es que a partir de la una de la madrugada se levantan los puentes levadizos de la ciudad para el paso de grandes embarcaciones que van del Volga al Báltico, cruzando el río Neva que atraviesa la ciudad.

2. Festival Estrellas de las Noches Blancas

Un clásico desde mayo a julio en la ciudad es el Festival Estrellas de las Noches Blancas. Se trata de una cita ineludible para los amantes del ballet, la ópera y la música. Y la cita es el teatro Mariinsky, que ofrece una programación fantástica.

3. Festival de las Velas Escarlatas

La noche más corta del año es el solsticio de verano, y aquí la oscuridad es inexistente. Pues bien, el sábado más cercano a ese momento del calendario solar se celebra este festival, en el que los graduados de Secundaria celebran el final del curso.

Su nombre se debe a que un gran barco de velas escarlatas navega por el río, protagonizando un gran espectáculo al aire libre. Mientras, la música no cesa en la plaza de Palacio.

4. Más festivales y eventos

Durante este periodo hay muchos más eventos, como un festival del jazz o el Festival Internacional de Música en el Palacio de Hielo, donde actúan estrellas de todo el mundo. También la música clásica suena en multitud de conciertos en diferentes palacios históricos. Y tiene lugar el Festival de Sonidos y Colores de las Noches Blancas, donde los protagonistas son los niños más talentosos.

Además, hay actos espectaculares como la apertura de maravillosas fuentes, entre ellas las de los jardines de Peterhof. E incluso desde hace 30 años se aprovechan los largos días de finales de junio para convocar un multitudinario maratón al que acuden corredores de toda Rusia y de Europa. Así que ya sabes, si estás bien preparado, podrás hacer deporte y turismo en un único viaje.