Te explicamos cómo llegar a la Ópera de Sídney
La Ópera de Sídney es uno de los edificios más simbólicos de Australia, así como uno de los más famosos y distintivos del siglo XX. En él se realizan obras de teatro, ballet u ópera, por lo que si quieres asistir a alguno de estos espectáculos, o simplemente observar la construcción de cerca, te descubrimos las distintas formas de hacerlo.
Llegar a la Ópera de Sídney en transporte público
El emblemático edificio se encuentra a tan solo seis minutos andando de Circular Quay, el principal centro de transporte, tanto para autobuses como para trenes o ferrys. Saber qué línea tomar dependerá del lugar desde el que partamos, pero la app Moovit nos da instrucciones detalladas de cómo llegar a la Ópera de Sídney. Eso sí, la parada final siempre será Circular Quay.
También podemos encontrar toda la información en la web de transportes de Sídney. Sea cual sea nuestra decisión, y si tenemos previsto viajar mucho dentro de la ciudad, es recomendable comprar la tarjeta Opal, ya que sale más económica y permite usar cualquier tipo de transporte público. Asimismo, la red Opal cubre de norte a sur y de este a oeste la ciudad.
Taxi acuático, una forma diferente de llegar a la Ópera de Sídney
Es una de las opciones más atractivas, ya que permite recorrer la bahía de Sídney antes de llegar al edificio que nos interesa. También ofrece la oportunidad de verlo junto a otro de los símbolos de la ciudad: el puente. Y es que ambos forman una de las vistas más bonitas y fotografiadas de todo el mundo.
Este servicio de transporte opera desde el muelle Circular Quay East, el muelle Circular Quay West, el muelle próximo al Park Hyatt Sydney y desde el embarcadero Man O’ War.
Los turistas pueden decantarse además por otros medios acuáticos que ofrecen varias compañías en dichos lugares. Por ejemplo, puedes alquilar un yate privado. ¿Se te ocurre forma más increíble de llegar a la Ópera de Sídney?
Por otro lado, y aunque sea más corriente, existe la posibilidad de coger un taxi terrestre en cualquier parada destinada a ello o bien llamando al siguiente número de teléfono: +1 250-656-6666. Escojamos el método que escojamos, lo más probable es que nos dejen al final de Macquaire Street, a solo un minuto andando de la Ópera de Sídney.
Mediante un tour turístico
Una buena forma de llegar a la Ópera de Sídney, así como de conocer la ciudad, es contratando un tour turístico, el cual se puede hacer en autobús o en una embarcación. Si nos decantamos por la primera posibilidad, solo tenemos que buscar la parada que más nos interesa. Después de montarnos en el transporte, disfrutaremos de los distintos puntos de interés de Sídney.
La posibilidad de hacerlo en embarcación nos traslada a Darling Harbour o a Circular Quay para comenzar un recorrido de cuarenta y cinco minutos que nos descubrirá las joyas que alberga el puerto de Sídney.
De nuevo nos encontramos con la Ópera y con el puente de la bahía de Sídney, pero también con el parque de atracciones Luna Park, con el Museo Marítimo, e, incluso, con las casas de los famosos.
Andando hasta la Ópera de Sídney
Es un modo perfecto de llegar a la Ópera de Sídney. ¿La razón? Que durante el paseo podremos parar para visitar lugares recomendables que se encuentran en las cercanías de la Ópera, como el Real Jardín Botánico de Sídney. Tiene treinta hectáreas de extensión y que alberga una gran variedad de plantas, pero también algunos animales (cacatúas, murciélagos…).
Otras opción interesante es entrar en el Museo de Arte Contemporáneo, que, como su nombre indica, interpreta y colecciona arte contemporáneo de Australia y del mundo. Y, si el paseo te ha abierto el apetito, puedes reponer fuerzas en alguno de los mejores restaurantes de la ciudad que se encuentran en la zona, como Aria, Quay o Café Sidney.
“No vaciles nunca en irte lejos, más allá de todos los mares, de todas las fronteras, de todos los países, de todas las creencias.”
-Amin Maalouf-
Como ves, llegar a la Ópera de Sídney es muy sencillo y lo puedes hacer de muchas formas diferentes. Pero lo importante es disfrutar del viaje y, sobre todo, de uno de los edificios más singulares construidos en el pasado siglo XX.
Fotografía de portada: ANNE LOTTE / Flickr.com