La Gran Vía, la arteria más famosa de Madrid
La capital de España tiene numerosas calles y avenidas de gran interés cultural y belleza increíble. Una de ellas es la monumental Gran Vía, una de las más reconocidas arterias de Madrid. Este enorme bulevar abarca 1306 castizos metros, naciendo en la calle Alcalá y finalizando en la Plaza de España.
La Gran Vía a grandes rasgos
Desde su construcción a principios del siglo pasado, la Gran Vía ha sufrido diversos cambios. Hoy en día es un importante hito madrileño, pues cobija comercios, hoteles, restaurantes y salas de cine y teatros.
Los más interesantes miradores se encuentran en ella, por lo que es posible disfrutarla al ras y desde las alturas. Además, forma parte del conocido como Madrid de los Austrias, un recorrido por la historia de la ciudad muy significativo.
Primer tramo: desde calle Alcalá a la red de San Luis
En esta primera parte de la Gran vía, el turista podrá disfrutar de vistas impresionantes. Subiendo desde Alcalá, a su izquierda, el viajero observará el imponente edificio Metrópolis. De fachada muy barroca e inspiración francesa, es un preludio de los que se aproxima.
A medida que se asciende por la vía se puede apreciar las suaves y clásicas líneas arquitectónicas. Con un aire neorenacentista, este primer tramo de la Gran Vía de Madrid resulta apacible y delicioso. Los balcones que se asoman impetuosos hacia la calzada asemejan palcos de una función con el viajero como protagonista. Decorados con luces navideñas o flores, resulta casi imposible no levantar la vista.
Al llegar a la plazuela de la calle Montera, conviene cruzar a la mitad de la calle y tomarse una fotografía. Eso sí, mucha atención para hacerlo con el semáforo en rojo, pues el tráfico de la vía es incesante.
Segundo tramo: de Montera a Callao
En la capital la gente siempre lleva prisa, pero en esta parte de la Gran Vía bien merece aminorar la velocidad. Desde la calle de la Montera se pasa del estilo más renacentista a una arquitectura de inspiración francesa.
Algunos de las construcciones que se encuentran a esta altura de la calle son de corte americano. Es el caso de la Casa Matesanz, o el edificio Telefónica. El más transitado quizá sea el inmueble Madrid-París, pues alberga una conocida marca de ropa de bajo precio. Su fachada es claramente afrancesada, y fue el bloque más alto del tramo hasta 1929.
En su última parte, próximo al tercer tramo de la vía, se halla el Palacio de la Prensa. Llegando a su zona baja se encuentra una sala multicine clásica para los madrileños. En frente se ubica la Plaza de Callao, importante epicentro de la vida de la urbe y punto de encuentro y referencia.
Tercer tramo: de Callao a Plaza de España
En esta última parte la caminata se hace más fácil. Si bien en los dos primeros tramos existe una leve pendiente ascendente, en este se torna cuesta abajo. Los edificios cambian a una estética mucho más moderna, primando el estilo art-decó de los años 20. Aquí el turista hallará multitud de cines y teatros con los espectáculos más vanguardistas de la escena española.
Esto ha provocado que sea conocido como el Broadway madrileño, destacando el gran éxito de las obras musicales. Algunos de los escenarios más conocidos son el teatro Rialto y el Lope de Vega, claros iconos del panorama artístico de la capital.
Ya en la bellísima Plaza de España, el viajero disfrutará de el inmueble más alto durante años de la ciudad: la Torre de Madrid. También destaca como bloque emblemático el Edificio España, de estética claramente americana. Volver la vista atrás es un placer digno de dioses.
“Madrid rebosa literatura, poesía y música por sus cuatro costados, tanto, que ella misma es un personaje literario.”
– Ernest Hemingway –
Los alrededores de la Gran Vía
La Gran Vía de Madrid es una de las principales arterias de la urbe, pero las calles adyacentes no desmerecen. La calle Alcalá, avenida que la ve nacer, es la más larga de la capital de España, con casi 10.200 metros.
Frente a la red de San Luis, al término de la calle de la Montera, se encuentra la calle Fuencarral. Esta avenida, peatonal en su extremo más cercano a la Gran Vía, forma parte de la zona más indie de la ciudad. Allí no solamente encontraremos las tiendas de marcas reconocidas, también hallaremos los estilos más underground y la moda más cool.
En el segundo tramo de la arteria protagonista, descendiendo hacia Puerta del Sol, están las calles del Carmen y Preciados. Ambas son el centro neurálgico de la vida madrileña, uniendo la Plaza de Callao con la plaza donde tradicionalmente se recibe el nuevo año.