5 cosas imprescindibles que ver en Cracovia
Se trata de una de las ciudades más antiguas, importantes y visitadas de Polonia, al sur del país. Situada a orillas del río Vístula, fue la capital durante siglos. Queremos llevarte a los rincones que hay que ver en Cracovia, y alguno te va a sorprender.
Pequeña reseña histórica de Cracovia
El nombre oficial es Real Ciudad Capital de Cracovia y la primera mención que se hace de ella es del año 966, a través de un viajero sefardí que la describió como un centro comercial importante.
A fines del siglo X formaba parte de la dinastía de los Piastas y fue entonces cuando se construyeron muchos edificios destacados, como el castillo Hatted o las iglesias románicas (como la de San Adalberto). Durante las invasiones tártaras fue destruida por completo y resurgió en 1364 gracias a Casimiro III de Polonia, que fundó la universidad.
Pasó al Imperio húngaro en el siglo XVIII, luego fue incorporada al Gran Ducado de Varsovia y tras el Congreso de Viena, en 1815, se convirtió en una ciudad libre, hasta que en 1846 se anexó a Austria y al Imperio austrohúngaro poco después.
Durante la Primera Guerra Mundial fue cuartel general germano y al finalizar se encontraba dentro de la Segunda República Polaca. Cracovia fue ocupada por los nazis en la Segunda Guerra Mundial, la población judía fue confinada en un gueto o enviada a campos de concentración como el de Auschwitz. En los años siguientes se anexó a la República Popular de Polonia.
Lugares imprescindibles que ver en Cracovia
A continuación te contamos cuales son los principales atractivos turísticos que hay que ver en Cracovia. Todos son interesantes, aunque alguno es realmente angustioso. Vamos a verlo:
1. Plaza del Mercado
Esta plaza medieval es la más grande de Europa, con 40.000 m² de extensión. Fue trazada en 1257 como centro cultural y social.
En esta plaza podemos encontrar hermosas terrazas para disfrutar de su arquitectura y cuatro puntos destacados: la Lonja de Paños, la basílica de Santa María, la torre del antiguo ayuntamiento y la iglesia de San Adalberto.
2. Fábrica de Oskar Schindler
Seguro conoces la historia de este hombre de negocios. Adquirió una fábrica de ollas y contrató a los judíos del campo de concentración de Plaszow para evitar que los asesinaran. Se cree que gracias a su “lista” de trabajadores logró salvar a 1200 personas. En la actualidad, la fábrica alberga un museo sobre la guerra y la ocupación nazi.
“Quien salva una vida, salva al mundo entero.”
-Oskar Schindler-
3. Castillo de Wawel
Está ubicado en lo más alto de una colina junto al río Vístula y es el símbolo más representativo no solo de la ciudad, sino también del país. Fue la primera residencia de los reyes polacos, saqueado por el ejército prusiano, ocupado por los austriacos y vivienda del gobernador durante la ocupación nazi.
En las inmediaciones del castillo podemos encontrar la catedral, el Museo Catedralicio de Juan Pablo II, la Cueva del Dragón y el Palacio Real. Este último se halla dividido en varias estancias: los sótanos, las salas de Estado, los apartamentos reales, el Museo de Arte Oriental, el tesoro de la Corona y la armería. Tesoros que también hay que ver en Cracovia.
4. Minas de Sal de Wieliczka
Son las más antiguas del mundo ya que se han explotado desde el siglo XIII. Tienen una profundidad de 327 metros y albergan nada menos que 300 kilómetros de galerías laberínticas con cámaras y capillas decoradas con figuras de sal.
En un recorrido se pueden observar 22 cámaras con lagos subterráneos, máquinas y herramientas. Lo más bonito del paseo es llegar a la capilla de St. Kinga, una sala de 54 metros de longitud.
Las minas de sal de Wielicza están a 15 kilómetros al sureste de Cracovia, pero es una excursión que no hay que perderse.
5. Campo de concentración de Auschwitz
Otra excursión imprescindible. Está ubicado a 70 km de la ciudad y fue el mayor de todo Polonia. Aquí murieron más de un millón de personas. Los primeros en llegar fueron prisioneros políticos y luego miembros de la resistencia, homosexuales, intelectuales, gitanos y judíos.
Estaba dividido en bloques, siendo el más conocido el número 11 o “de la muerte” donde las personas eran dejadas morir de hambre o eran ejecutados. A 3 kilómetros del campo principal está Birkenau, equipado con cinco cámaras de gas.