El hermoso festival en Nepal en honor a los perros

¿Conoces el festival en Nepal en honor a los perros? Pues, si eres de esas personas que adora a su mascota, esta es una de las celebraciones más impresionantes, bonitas y curiosas que existen en todo planeta. Descubramos a continuación un poco más sobre este singular día.

Festival en Nepal en honor a los perros, ¿qué se celebra?

¿Qué se celebra en este festival en Nepal en honor a los perros? Durante lo que se conoce como el Festival de las Luces, traducción del origianal, “Diwali”, hay un día en el que se adora a los perros, también conocido como “Kukur Tihar”.

El “Diwali” tiene lugar a lo largo de la estación de otoño, siempre coincidiendo con la luna nueva. Se prolonga durante 5 días durante el mes que se conoce como “Kartika” y es una festividad que también tiene presencia en otros países de la zona como Birmania, India o Malasia.

Sin embargo, la peculiaridad de esta celebración en Nepal es que durante el segundo día del “Diwali” se produce esta singular adoración a los perros, que sirve como forma de reconocer lo mucho que estos animales suponen en la vida de las personas. Es más, según su religión, estos son los guardianes de puerta a la vida eterna, por ello es muy necesario tenerlos contentos y felices.

Orígenes del festival en honor a los perros

Los orígenes de este festival en Nepal en honor a los perros se remonta a miles de años. Mucho tiempo atrás, el príncipe Yudhisthira ascendió junto con su perro a los cielos, sin embargo, el dios allí gobernante, Indra, no le dejó pasar con su acompañante.

Como es de esperar, Yudhisthira, muy unido a su mascota, se negó a entrar en el Reino de los Cielos sin su fiel acompañante, puesto que este jamás le abandonó, ni siquiera en los tiempos más oscuros y aciagos. Esta actitud del joven príncipe sorprendió y convenció a Indra, que les dejó entrar e incluso convirtió al animal en un dios. De ahí que hoy en día sean merecedores de su propia festividad.

Cómo es el festival en honor a los perros

Durante la celebración del “Kukur Tihar”, los perros reciben galletas en recompensa, por lo que se les puede ver muy felices. Además, son pintados con los colores sagrados para los hinduistas, que son el rojo y el amarillo. Es más, se les adorna con guirnaldas, ofreciendo una simpática imagen de los animales.

También en los días del “Diwali” en general, y el “Kukur Tihar” en particular, se realizan ofrendas, se cuentan historias actuales y pasadas y se agradece todo cuanto la gente tiene. Son fechas de dar gracias por la vida y lo obtenido a lo largo de ella.

Además, cabe añadir que no solo los animales con dueño son venerados durante el festival en honor a los perros. También los callejeros y abandonados son pintados, adornados con guirnaldas, alimentados con galletas y honrados durante el día.

La relación del perro y los humanos

Hay que destacar que la relación entre los perros y humanos ha sido muy íntima a lo largo de la historia. No es de extrañar por tanto que otras culturas y religiones les adoren de esta forma. Es más, estos animales son en realidad una especie creada por el hombre para que nos acompañe y proteja.

El ancestro conocido de los perros son los lobos. Algunos de ellos, en lugar de atacar a los humanos, decidieron que era más práctico buscar en su basura para alimentarse. De esta peculiar decisión de los animales, llegó la domesticación por parte del hombre.

Con el tiempo, generaciones de lobos amigables con los humanos se fueron cruzando y mezclando, desechando a aquellos más agresivos. De ahí que el hombre finalmente acabase creando todo tipo de razas de perros según sus necesidades.

A día de hoy podemos encontrar centenares de razas para todo tipo de usos, desde la caza hasta la protección o la compañía. Es decir, que la vida de los humanos y los perros ha estado unida a lo largo de miles de años hasta nuestros días.

No es extraño por tanto que exista este festival en Nepal en honor a los perros, puesto que han sido muy importantes a lo largo de la historia humana y son animales fieles y cariñosos que se merecen cualquier afecto que les podamos dar.