El fantástico bosque de bambú de Arashiyama
Imagina un escenario, donde todo es bambú con miles de tallos ordenados casi a la misma distancia, donde todo es verde con sus distintas tonalidades. Lo único que te distrae de tal realidad es un sonido que hipnotiza y tranquiliza. Son los tallos de bambú golpeándose unos con otros al vaivén del viento. No es una escena de una película de ficción. Al contrario, estamos hablando del bosque de bambú de Arashiyama, un lugar mágico que te dejará sin aliento.
Uno de los destinos turísticos más visitados de Japón
El bosque de bambú de Arashiyama no podía estar en otro lugar, está en Japón, un país que sorprende a cada paso. Lo encontramos en Kamakura, en las afueras de la ciudad de Kyoto, a los pies del Monte Arashiyama.
Este bosque es uno de los lugares turísticos más visitados de Japón. Las personas llegan atraídas primero por su espectacular belleza, y segundo por la increíble sensación que te invade al perderse en estos caminos custodiados de lado a lado por largos tallos de bambú.
“¿Qué es el ser ante el color del mundo? El color del mundo es mayor que el sentimiento del hombre.”
– Juan Ramón Jiménez –
El bosque de bambú
El bambú es una exótica planta gramínea en forma de caña que forma parte de la cultura japonesa y oriental. Actualmente es un gran recurso verde de la nación nipona. Esta especie es muy invasora, por lo que se controla la expansión del bosque para que no invada áreas cercanas.
El bosque Arashiyama cuenta con más de 50 variedades de bambú. Algunos de ellos tienen más de 20 metros de altura e incluso pueden llegar a tener 30 metros. Estas especies de bambú tienen la particularidad de que crece muy poco los primeros siete años. Pero cumplida esta edad, alcanzan su tamaño máximo en muy pocas semanas.
Antiguamente este bosque era reservado para la alta aristocracia japonesa y se convirtió en un destino muy popular desde el siglo IX al siglo XII. Afortunadamente, hoy en día cualquiera puede visitarlo. Vale la pena perderse en medio de los inmensos tallos de bambú para deleitarse, dependiendo de la incidencia del sol y la hora del día, con el juego de luces y colores que regala el lugar.
Senderismo y algo más
Este increíble lugar es atravesado por diferentes rutas de senderismo que regalan al visitante una experiencia agradable y fascinante. Se cree que la tranquilidad y belleza de este lugar ha sido inspiración para muchos artesanos japoneses desde hace siglos.
En los alrededores del bosque existen talleres y tiendas de artistas japoneses que realizan objetos artesanales con el bambú como materia prima. Estos objetos son vasos, palillos, cestas y muchos otros que los habitantes de la zona usan en su vida diaria.
Un poco más allá del bosque de bambú se pueden visitar algunos templos. Uno de los más populares es el de Tebryu-ji. Además, en la zona te encontrarás con pintorescos cafés donde vale la pena pasar el rato.
Cuándo visitar el bosque de bambú
Visitarlo cualquier época del año es una experiencia increíble, pero durante la primavera y el otoño el paisaje es casi irreal. La culpa la tienen los bellos colores que traen estas estaciones y que le dan al bosque mucho más encanto.
Cualquier hora del día es buena para perderse en esta maravilla natural. Incluso si vas de noche tampoco te decepcionará, ya que los senderos están iluminados. Además, el sonido del viento nocturno moviendo los bambús te transportará a un ambiente irreal que te dejará pasmado.
Aprovecha y visita Kyoto
Kyoto se encuentra a pocos kilómetros del bosque de bambú de Arashiyama, lo que constituye una buena oportunidad para visitar una ciudad que fue capital del país.
Aquí puedes encontrar buenos alojamientos, restaurantes para todos los gustos y muchos lugares turísticos. Además, al ser una ciudad cultural tiene un gran número de centros culturales y museos. Además, cuenta con preciosos jardines, palacios y templos.
Déjate sorprender por el bosque de bambú de Arashiyama. Entrégate a la extraña sensación que te invade al visitar este increíble y tranquilizador lugar. Un lugar que te brinda imágenes de sutil belleza al propio estilo japonés.