Ciudad Prohibida de Beijing: todo lo que debes saber antes de ir
Durante siglos, los ciudadanos chinos conocieron la existencia de la Ciudad Prohibida de Beijing (Pekín), pero muy pocos tuvieron el privilegio de entrar. Actualmente, es uno de los monumentos más relevantes de China, pues en su interior se esconden más de 500 años de historia. ¿Te gustaría visitar este inmenso palacio? ¡Acompáñanos!
La Ciudad Prohibida de Beijing fue el centro de gobierno de China. Desde ella gobernaron un total de 24 emperadores de las dinastías Quing y Ming desde el siglo XVI hasta el año 1924, cuando el último emperador fue expulsado.
¿Qué es la Ciudad Prohibida y por qué es tan misteriosa?
La Ciudad Prohibida de Beijing es un complejo arquitectónico con forma de palacio que se construyó entre los años 1406 y 1420 por orden del emperador Yongle, el gobernador de China en aquel momento. Cuenta con 980 edificios y ocupa una extensión de 72 hectáreas, unas cifras más que abrumadoras.
Así, la Ciudad Prohibida de Beijing se convirtió en la residencia oficial de los emperadores. En el interior del palacio hay un total de 9999 habitaciones y está diseñada en el estilo tradicional chino. Al ser un lugar tan importante, estaba protegido por una muralla de diez metros y un foso para evitar ataques.
La importancia de este palacio se debe principalmente a que fue durante casi 500 años el lugar desde el que se gobernaba China. Además, estuvo cerrado a la ciudadanía durante todo este tiempo, muy pocos conocían qué había más allá del foso y las murallas.
Nadie podía entrar en el palacio salvo permiso expreso del emperador, mientras que los que estaban allí salían solo con su consentimiento. Esa es la razón de que se llame Ciudad Prohibida.
No obstante, desde que las puertas se abrieron a todo el mundo, no hay misterios escondidos en la Ciudad Prohibida. Actualmente, es uno de los monumentos más visitados del país por viajeros de todo el mundo. De hecho, se le considera como un museo de la historia del país.
Información útil para visitar la Ciudad Prohibida de Beijing
Seguramente estés deseando conocer este lugar tan misterioso y, sobre todo, de unas dimensiones tan grandes y con unas leyendas y curiosidades tan interesantes. Pero antes debes conocer alguna información básica.
Horarios y tarifas de la Ciudad Prohibida
Podrás visitar la Ciudad Prohibida de Beijing todos los días, aunque el horario varía en función de la época del año. De noviembre a marzo abre a las 8:30, pero cierra a las 16:30. Entre abril y octubre, en cambio, abre a la misma hora pero cierra a las 18 horas.
Los precios también varían en función del momento del año. Entre abril y octubre, la temporada alta, el precio es de 7,5 euros (60 yuanes chinos) y en temporada baja son 5 euros (40 yuanes). Los niños que miden menos de 120 cm entrarán gratis.
La visita dura varias horas, ya que el recorrido por la Cuidad Prohibida es bastante largo, con muchas habitaciones, salas y pasillos que recorrer. Además, durante las pasadas celebraciones del año nuevo chino el palacio abrió sus puertas durante la noche, algo que no había ocurrido desde hace 94 años.
¿Cómo llegar hasta allí?
La Ciudad Prohibida se encuentra en el centro de Pekín, por lo que no te será difícil llegar. En concreto, está a 1,5 kilómetros de la plaza de Tiananmen, un importante punto de transporte tanto de metro como de autobús.
Desde allí hay muchas líneas de autobús que te llevan hasta la Ciudad Prohibida. Algunas de ellas son la 1, 2, 5, 10, 20, 22, 37, 52, 59 y 82. Para ir en metro basta con coger la línea 1 y puedes bajarte en dos estaciones: Tian’an men dong o Tian’an men xi.
¿Cuáles son los imprescindibles de la visita?
A lo largo de tu recorrido por la Ciudad Prohibida hay una serie de lugares a los que debes prestar atención. Nada más entrar te encontrarás con la gran escalinata de mármol. Por este lugar descendía el antiguo carruaje del emperador.
Desde allí accederás al interior del palacio. Pero antes, presta atención al muro de los dragones, te sorprenderá. Además, en los tejados del palacio hay esculturas de leones chinos. Este animal, según la tradición, protegía tanto al emperador como a los habitantes de la ciudad.
Una vez dentro, fíjate bien en sus salas y en su gran decoración. Destacan la Sala de la Longevidad o las salas de la Armonía Central, Armonía Suprema y Armonía Conservada. Además, en el interior del palacio hay una gran colección de obras de arte que pertenecieron a los emperadores.
Desde el año 1987 la Ciudad Prohibida de Beijing es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Todo lo que describe a este monumento son cifras de récord, destacando su belleza abrumadora, con un estilo único. ¡Descúbrelo ahora!