Castillos de Inglaterra, historia y naturaleza
Nada más pisar tierras inglesas el viajero se da cuenta de la belleza de sus paisajes, y aún más porque están adornados con hermosas fortalezas. De hecho, los castillos de Inglaterra representan uno de su mayores atractivos. Recorramos la naturaleza e historia de estas interesantes edificaciones, estamos seguros que te maravillará su belleza.
En Inglaterra hay unos 1400 castillos. Los hay en islotes, en promontorios rocosos, otros que parecen ciudadelas medievales situadas en el corazón de ciudades históricas, o alejados en las zonas de campiña.
Los castillos de Inglaterra se han mantenido al paso de los siglos y nos cuentan esos pedazos de historia, en los mismos lugares donde sucedieron. Algunos tienen hermosos jardines o se han convertido en fantásticos hoteles, de otros se dice están embrujados y los hay que parecen ser escenarios de cuentos.
Castillos de Inglaterra, naturaleza e historia
1. Castillo de Windsor
Situado en Windsor, en el condado de Berkshire, este es uno de los castillos más famosos de Inglaterra. Es una enorme construcción palaciega de origen medieval que ha sido el hogar de la Familia Real Británica desde hace casi 1.000 años y es famoso porque fue la residencia oficial preferida de Enrique VIII.
En su interior se conservan pinturas de Rembrandt, Rubens, Canaletto y Gainsborough; los apartamentos privados de Jorge IV; la capilla de St George, donde se encuentran las tumbas de 10 soberanos, incluyendo la de Enrique VIII, y la Casa de Muñecas de la reina María.
2. La Torre de Londres
Construida en 1078 por Guillermo el Conquistador, la Torre de Londres representa la arquitectura militar normanda de la Edad Media. En sus inicios fue fortaleza, prisión y un poderoso arsenal. Actualmente se ha convertido en una de las principales atracciones de Londres y una de las fortificaciones más famosas del mundo.
La Torre de Londres conserva las leyendas de las personas que han vivido en ella desde hace casi diez siglos. Una de sus leyendas más curiosas es la de los seis cuervos. Desde el siglo XVIII se cree que la Torre Blanca se mantiene en pie gracias a estas aves. Si los cuervos desaparecieran, el edificio caería junto con la monarquía británica.
De acuerdo a esta leyenda se estableció por decreto real el minucioso cuidado y mantenimiento de los cuervos, que reemplazan a Munin, Branwen, Thor, Hugine, Baldrick y Gwyllum cada 25 años, vida promedio de estas aves.
3. El castillo de Warwick
Ubicado a orillas de río Avon, este castillo data del siglo XI y fue originalmente diseñado por Guillermo el Conquistador. En sus inicios fue construido en madera, luego fue reconstruido en piedra en el siglo XII y su fachada restaurada en el siglo XIV.
Entre sus usos se cuenta que fue fortaleza hasta principios del siglo XVII, y luego casa de campo, cuando fue concedida a Sir Fulke Greville en 1604. Cuenta una leyenda que su fantasma aún habita en el castillo y que fue el responsable de la muerte de uno de los pintores en una de sus torres.
4. El castillo de Dover
Está situado en Dover, condado de Kent y fue fundado por el rey Enrique II en el siglo XII. Está considerado como el más importante en la historia militar por su importancia defensiva.
Durante la dinastía Tudor la estructura del castillo fue mejorada para enfrentarse a los ataques. En el siglo XVII el castillo tuvo gran importancia durante la Guerra Civil Inglesa. También lo fue durante las guerras contra Napoleón Bonaparte y en la Segunda Guerra Mundial.
“Fueron hombres de otro cuño los que han hecho de Inglaterra lo que ha sido; y hombres de otro cuño serán necesarios para prevenir su decadencia.”
-John Stuart Mill-
5. Castillo de Leeds
El castillo de Leeds está ubicado en Kent. Fue construido en dos pequeñas islas del río Len en 1119 y a lo largo de su historia ha sido usado como residencia real por personajes tan importantes como Eduardo II.
Actualmente es un lugar muy visitado, entre sus atracciones se incluyen recorridos del parque y los jardines, un aviario, el parque de juegos de aventura Knights Realm, el centro de manualidades del castillo, una gruta, un laberinto de césped, un campo de golf y hasta un museo de collares de perro.
6. Castillo de Oxford
Situado en la ciudad de Oxford, fue construido por el barón normando Robert D’Oyly, en 1066. En sus inicios funcionó como residencia, luego fue abandonado y convertido más tarde en la sede del gobierno y de los juzgados del condado, para después funcionar como prisión.
Actualmente es un atractivo turístico y comercial, donde sus patios son usados para mercados y representaciones teatrales. También ofrece a sus visitantes un hotel que transformó las antiguas celdas en lujosas habitaciones.
Los castillos de Inglaterra, además de estar emplazados en impresionantes paisajes cuentan parte apasionante de la historia de ese país. Entre tantos otros, esta pequeña selección representa lo más importante de Inglaterra. ¡Anímate a conocerlos!