Ballenas en Islandia: una increíble visita natural

Las ballenas son unos animales enormes, y también fascinantes. Estos mamíferos recorren libres los mares del mundo aprovechando las corrientes oceánicas, las cuales les llevan a pasar muy cerca de Islandia.
Ballenas en Islandia: una increíble visita natural
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 15 mayo, 2020

Islandia es en la actualidad uno de los destinos preferidos para los amantes de los paisajes más extraordinarios y las manifestaciones más poderosas de la naturaleza. Parece mentira que esta pequeña isla guarde tantas joyas naturales increíbles: glaciares, fiordos, volcanes, géiseres, cascadas, y también varias zonas de paso habitual de los cetáceos más grandes del planeta. Unas ballenas que puedes ver con tus propios ojos desde diversos lugares de Islandia.

Prepárate para ver ballenas en Islandia

Dadas las condiciones climáticas de Islandia, el turismo principalmente se produce durante la época veraniega. Precisamente, esos son los meses en los que más fácil es avistar ballenas en el entorno de la isla.

Eso sí, tened en cuenta que, aunque sea verano, aquí el calor nunca es demasiado. De hecho, puede hacer frío, y más aún navegando. Así que una primera recomendación importante es ir bien abrigado a estas excursiones para evitar un molesto resfriado que arruine tus vacaciones.

Lugares para el avistamiento de cetáceos

A lo largo del litoral de Islandia, hay diversos lugares que ofrecen las excursiones para ver ballenas. Uno de ellos es la propia capital Reikiavik. De su puerto zarpan numerosos barcos hasta las zonas por las que pasan estos grandiosos animales en la bahía de Faxafloi. También podrás ver ballenas zarpando desde el puerto de la segunda ciudad de la isla, Akureyri.

Personas en un barco para ver ballenas en Islandia.

De igual modo, hay puertos al oeste, en la península de Snaefelssnes, desde los que también se ofrecen este tipo de excursiones. Se trata de los puertos de Hólmavík, Ólafsvík y Grundarfjordur. Es una zona que combina estos avistamientos con algunos de los bellos paisajes de Islandia, donde sus fiordos, distintos a los de Noruega, son igualmente fascinantes.

No obstante, el sitio por antonomasia para ver distintos tipos de ballenas es Husavik, al norte de Islandia. Este es un lugar perfecto para ir en verano, embarcar y salir a navegar, con el añadido de ir más allá del Círculo Polar Ártico a ver a los mamíferos más grandes del planeta.

Más recomendaciones para ver ballenas en Islandia

Veréis que muchas de las excursiones que zarpan desde Reikiavik, Akureyri o Husavik ofrecen diferentes tipos de barcos. De hecho, hay algunas que ofertan una combinación.

El primer tramo se hace en barcos más confortables y grandes para llegar hasta las zonas de avistamiento habituales. Una vez allí, se puede embarcar en lanchas zodiacs rápidas y ligeras que os permitirán aproximaros increíblemente cerca hasta las grandes ballenas.

Turistas haciendo avistamiento de ballenas en Islandia.

Obviamente, esta opción es mucho más cara, y sin duda quien se lo pueda permitir tal vez no quiera renunciar a comprobar tan cerca las dimensiones de estos animales míticos. No obstante, hemos de decir que no es necesario.

Indudablemente, tanta proximidad puede molestar a estos animales, por lo que la recomendación siempre será afectar lo menos posible a la vida salvaje. Ese el mejor modo de que otros que lleguen después de nosotros puedan disfrutar de esas maravillas también.

Un museo de las ballenas

Las ballenas en la cultura islandesa son muy importantes y siempre fueron una fuente de riqueza. Ahora se han convertido en uno más de sus muchos recursos turísticos. El avistamiento de ballenas jorobadas, minkes y hasta azules, las más impresionantes de todas, es una de las actividades turísticas más demandadas.

Ballena en península Valdés

Si alguien ha visto estos animales en otras latitudes, como por ejemplo República Dominicana, le puede parecer que hasta es un hábitat más adecuado cuando las ve en Islandia. Evidentemente, el hábitat es igual de idóneo en ambas latitudes, pero el entorno de esta isla entre el Atlántico Norte y Ártico es mucho más salvaje e inhóspito y se antoja más propicio.

Lo cierto es que estos animales son tan importantes para Islandia que hasta en Reikiavik se puede visitar un museo exclusivamente dedicado a las ballenas. El mejor lugar para aprender todo sobre estas maravillas gigantescas que todavía navegan libres por el mar, sin importarles fronteras.