Alkmaar, la ciudad del queso en Holanda
Siempre que se habla de hacer turismo en Alkmaar se menciona su mercado tradicional del queso. Lógicamente aquí también lo vamos a hacer, ya que se trata de todo un espectáculo y una importante manifestación cultural holandesa. Pero también vamos a hablar de otros motivos para visitar esta ciudad de Holanda. Seguid leyendo y los descubriréis.
El mercado del queso de Alkmaar
Como hemos indicado, lo más característico y llamativo de Alkmaar es su mercado quesero. Pero, ¿por qué? Todo tiene lugar en la plaza que domina el edificio Waag o balanza pública, que se originó en la Edad Media. En ese emplazamiento al aire libre se celebra todos los viernes entre abril y octubre este acontecimiento al que cualquiera puede asistir.
En la plaza están expuestos infinidad de quesos de las variedades gouda y edam. Cada uno de ellos se pesa y los asistentes pujan por ellos. En realidad, solo pueden comprar los profesionales del ramo, no los turistas, ya que esa subasta contiene una serie de gestos y rituales la mar de pintorescos y que hay que cumplir escrupulosamente.
A cambio de no poder comprar, se contempla una especie de show tradicional, cuyas formas han evolucionado muy poco a lo largo de la historia. Y además, en la tiendas cercanas, por supuesto que se puede comprar esos mismos quesos, obviamente a otros precios.
“No hay amor más sincero que el que sentimos hacia la comida.”
– George Bernard Shaw –
La balanza o Waag
El Waag ya hemos dicho que es el telón de fondo de ese mercado de Alkmaar. Pero además cumple una función, ya que en su torre está el reloj que marca el comienzo de las pujas. Es un reloj que incluso se puede visitar en su interior, para así admirar su mecanismo y las figurillas que marcan el paso del tiempo.
Y además de eso, en el Waag o Cámara del Peso, como os podéis imaginar hay un museo. ¿De qué? Pues evidentemente es un museo del queso.
El centro histórico
Tanto si se visita Alkmaar en viernes como en cualquier otro día de la semana, no hay que quedarse únicamente el tiempo que dura el mercado de queso, entre hora y media y dos horas aproximadamente. Hay que aprovechar para pasear por su hermoso casco histórico.
Un conjunto urbano en el que, como es habitual en muchos sitios de Holanda con su capital Ámsterdam a la cabeza, se alternan las calles y los canales. Y en ese entorno se atesora un rico patrimonio arquitectónico originado entre los siglos XVI y XVII, o lo que es lo mismo, en el floreciente periodo del Barroco holandés.
La iglesia de San Lorenzo
De esa misma época es el templo más atractivo de Alkmaar: la iglesia protestante de San Lorenzo. Un edificio levantado en el siglo XVI y cuyo interior alberga uno de los órganos más antiguos de todo el país. Si queréis visitarla tendréis que dirigiros a la plaza de Casandra y buscar el nombre de Grotekerk es la señalización local.
Otros museos de Alkmaar
Ya hemos citado que hay un Museo del Queso en Alkmaar, pero no es el único en la ciudad. Hay otros como el de Historia, cercano a la iglesia de San Lorenzo. Aunque dependiendo de vuestros intereses, tal os parezca más recomendable el Museo Nacional de la Cerveza.
Y como gran sorpresa, en Alkmaar se puede visitar un curioso museo de los Beatles. ¿Por qué en Alkmaar? Es muy sencillo. Se trata de un museo privado donde se reúne la colección de dos fanáticos del grupo de Liverpool, que decidieron instalar este museo aquí, en la misma ciudad donde se fabricó la primera guitarra de John Lennon.