Vancouver, una de las ciudades con mayor calidad de vida
Año tras año, la ciudad Vancouver aparece en el “top 5” de las urbes con mayor calidad de vida de todo el planeta. Solo por eso ya merece la pena plantearse viajar hasta este lugar de la costa canadiense del Pacífico. Pero además de ser una ciudad muy acogedora, también tiene infinidad de atractivos. De todo ello te vamos a hablar a continuación.
Vancouver y la naturaleza
Si algo distingue a esta gran ciudad, la tercera de todo el territorio de Canadá, es que se trata de una concentración urbana perfectamente integrada en la naturaleza circundante. Eso, sin duda, es un factor que ayuda a su calidad de vida.
Esa relación con lo natural hay que buscarla en los mismos orígenes de Vancouver, ya que la población india originaria de esta zona siempre ha respetado el medio donde vivía. Y hoy en día, los vecinos de Vancouver mantienen esa misma filosofía de salvaguardar el entorno natural que les rodea.
Museo de Antropología de Vancouver
Tal vez el mejor lugar de la ciudad para comprender esos vínculos culturales con el medio ambiente sea el Museo de Antropología de Vancouver. Allí se descubre toda esa cultura de las naciones indias y los muchos restos materiales que se conservan. Restos que van desde los objetos cotidianos hasta los famosos tótems rituales.
Stanley Park
La pureza del aire de Vancouver es otro de los motivos para que su calidad de vida sea altísima. Pues bien, esa pureza se debe al entorno, pero también a los parques de la ciudad. Stanley Park es el parque más grande toda Norteamérica.
En este parque es posible disfrutar de rutas senderistas en el corazón de la ciudad. Sin olvidar que acoge el famoso Acuario de Vancouver.
No obstante, no es el único parque importante. También recomendamos la visita al Jardín Botánico van Dusen, que salvaguarda flora procedente de todo el mundo. E igualmente, merece la pena darse una vuelta por el Parque Vanier, en el mismo centro de Vancouver y con varios museos de interés, entre ellos el Marítimo.
La costa de Vancouver
Ya que hablamos del Museo Marítimo, también os invitamos a acercaros al puerto de Vancouver y embarcar en las excursiones que durante el buen tiempo primaveral y veraniego se adentran en el océano.
Esas excursiones permiten ver muy cerca de la costa a ballenas de diferentes especies, como orcas o ballenas jorobadas. O si lo prefieres, alquila un kayak y remando hasta sitios como Deep Cove o False Creek.
Gastown
Pero no todo son actividades en la naturaleza. Esta es una ciudad muy vital y basta con visitar su zona más antigua: Gastown. Pasear por allí es un verdadero deleite que te recomendamos.
Además de ver la encantadora arquitectura, aquí se disfruta de los restaurantes más actuales, las tiendas de diseño más vanguardista y abundantes galerías de arte. Una oferta que ayuda a la calidad de vida de sus ciudadanos.
Isla Granville
Ese paseo luego se debe extender por la Isla Granville. Aquí también hay galerías, teatros y todo tipo de propuestas culturales. Pero sobre todo, hay que adentrarse en sus mercados, especializados en productos de lo más saludables y delicatessen.
La gastronomía en Vancouver
Vancouver es una ciudad muy cosmopolita. Lo es por su cercanía a Estados Unidos, apenas 50 kilómetros, y por su puerto marítimo, muy conectado con Asia. Por ello, aquí se puede comer casi cualquier comida del mundo. No obstante, lo oriental tiene mucha presencia. Sobre todo en el gran barrio chino, el mayor del país.
Visitas imprescindibles
Para acabar con este rápido recorrido, queremos hablaros de dos de los lugares que no os podéis perder en vuestra visita a esta ciudad. Por un lado, hay que atreverse a cruzar el puente colgante Capilano, que os dará la sensación de sobrevolar un gigantesco bosque.
Por otra parte, no debéis perderos la torre del Muelle Central. Un mirador sobre toda la ciudad, los alrededores y el océano. Un lugar ideal para quedarse admirado por la calidad de vida de Vancouver.
Esta es una ciudad que seguro que os sorprenderá por su limpieza, las actividades turísticas y deportivas que se ofrecen, su intensa vida cultural y su sabrosa oferta gastronómica. O sea, que comprenderéis por qué aparece siempre entre las ciudades del mundo donde mejor se vive.