El Templo de todas las Religiones, un templo universal
El Templo de todas las Religiones es un complejo arquitectónico que se encuentra en la ciudad de Kazán. Un lugar de arquitectura ecléctica y singular que pretende representar a las religiones más seguidas del mundo. A continuación, te descubrimos todo lo que tienes que saber sobre esta maravillosa construcción. ¿Nos acompañas?
Conoce brevemente su origen
El Templo de todas las Religiones comenzó a construirse en 1992, por iniciativa del artista y filántropo Ildar Khanov, conocido sobre todo por sus esfuerzos en el tratamiento del alcoholismo o la drogadicción. De hecho, son sus pacientes los que ayudan al mantenimiento y desarrollo del complejo arquitectónico.
El motivo por el que Idar Khanov decidió construir el templo también es objeto de admiración. Y es que el filántropo consideraba que todas las religiones son igual de valiosas, por lo que decidió reunirlas bajo un mismo techo. Así, se puede encontrar desde una cruz cristiana a una estrella de David, pasando por la media luna musulmana.
Como curiosidad, la razón de ser de Idar Khanov se debió, según él, a que Jesucristo se le apareció y le salvó cuando estuvo a punto de morir de hambre. Según el artista, no solo le otorgó el don de ser adivino y de poder curar todos los males, sino que más adelante también le pidió que construyese un templo universal. Y así fue.
“Solo hay una religión verdadera, pero pueden haber muchas especies de fe.”
-Immanuel Kant-
El Templo de todas las Religiones: un proyecto inacabado
Ildar Khanov tenía en mente un proyecto muy ambicioso que solo se ha cumplido en parte, ya que falleció antes de que pudiera culminarlo. Este consistía en que el Templo de todas las Religiones, también conocido como Templo del Universo, constase de 16 cúpulas, una por cada religión predominante en el mundo.
A la muerte de su creador la decoración del templo tampoco estaba terminada, de ahí que continuasen las obras de colocación de los mosaicos o que los constructores tuvieran que completar el trabajo sobre los elementos básicos de los diferentes edificios que pueblan el complejo.
Ildar Khanov pretendía que el Templo de todas las Religiones fuese además, y según sus palabras, “un centro ecuménico de historia y espiritualidad, una escuela de arte para los niños, un orfanato, un centro de desintoxicación, un museo de arte pictórico”. Algo que, como veremos a continuación, solo se ha hecho realidad parcialmente.
Otros aspectos del Templo de todas las Religiones
El complejo arquitectónico alberga una iglesia ortodoxa, una mezquita, una sinagoga y una pagoda oriental. Sin embargo, no se permite que se realice ningún tipo de culto en ellas, pues el Templo de todas las Religiones fue concebido como un centro cultural que también sirvió de residencia para Ildar Khanov y sus ayudantes.
Aparte de los edificios religiosos, el complejo cuenta con una galería de arte en la que, además de poder ver exposiciones, se pueden recibir clases magistrales; o con una sala de conciertos donde se llevan a cabo tanto veladas musicales como recitales de poesía.
Información práctica para su visita
El Templo de todas las Religiones se encuentra en el pueblo Staroye Arakchino, al que se puede llegar tomando, por ejemplo, un tren eléctrico en Kazán. El transporte conlleva un coste de unos 50 rublos, pero el acceso al complejo arquitectónico es totalmente gratuito, por lo que no hay excusa para no visitarlo.
Asimismo, se necesita al menos una hora para conocer de primera mano todo lo que esconde la construcción y para comprender por qué se ha convertido en un punto de referencia y atractivo turístico para los extranjeros, pero también para los habitantes de Kazán.
Y es que precisamente la ciudad rusa presume de la buena relación existente entre todas las religiones que habitan en ella -en especial la cristiana y la musulmana-, lo que ha sido reconocido incluso por la Unesco. Esto supone que en Kazán haya una mezcla arquitectónica extraordinaria debido a la influencia de cada una de ellas.
La mezcla de culturas está igualmente presente en otro de los atractivos de Kazán: el Kremlin, una ciudadela histórica que fue construida a instancias de Iván el Terrible y que alberga diversos monumentos como la Catedral de la Anunciación o la mezquita Qol-Şärif.