Seguimos la Ruta del Románico del Norte de Portugal

El norte de Portugal es un lugar mágico poblado de castillos, monasterios e iglesias de estilo románico. ¿Te animas a conocerlos con nosotros?
Seguimos la Ruta del Románico del Norte de Portugal
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 06 enero, 2020

La Ruta del Románico del Norte de Portugal es uno más de los elementos a través de los cuales se puede conocer mejor este país. Se trata de ruta que se puede subdividir, a su vez, en otras tres rutas diferentes. Vamos a conocerla mejor.

Para empezar, diremos que esta interesante ruta se desarrolla entre las ciudades de Oporto y Guimarães y a lo largo y ancho del valle del río Duero. Es así porque en toda esa zona hubo durante ese periodo un gran número de familias nobles que ayudaron a la consolidación del reino de Portugal.

No en vano, se dice que en Guimarães es donde nace Portugal. Y por ello, a su alrededor existe toda una serie de monumentos que lo atestiguan. Estas casas nobles propiciaron la construcción de monasterios, iglesias, torres, palacios y puentes, entre otros, que han llegado hasta nuestros días.

Ruta del Románico del Norte de Portugal: valle del Sousa

Monasterio de Pombeiro

Esta es una ruta que cuenta con 21 monumentos y que incluye las localidades de Felgueiras, Lousada, Paços de Ferreira, Paredes, Penafiel y Castelo de Paiva. Entre los monumentos que se pueden visitar destaca el monasterio de Pombeiro en Felgueiras.

Es uno de los monasterios más antiguos de Portugal, pues data del año 853, aproximadamente. En él se puede ver una secuencia completa de varios estilos arquitectónicos y, aunque no ha llegado completo hasta nuestros días, su visita es una de las más bonitas de toda la ruta. Está enclavado en un entorno rural y junto a él existe un tramo de calzada romana.

En la misma localidad, se pueden visitar varias iglesias románicas cuya conservación es muy buena. Asimismo, en dicha ruta también podemos visitar la iglesia de San Pedro de Ferreira. Es una iglesia que aúna la influencias gallega, zamorana y de Coimbra.

Otras recomendaciones son el monasterio de San Pedro de Cete en Paredes y el del Salvador de Paço de Sousa en Peñafiel. Este último es un monasterio benedictino fundado en el siglo X y que sirvió de refugio al abad Radulfo de Barcelona durante la invasión de Almanzor.

Ruta del valle del Támega

Monasterio de SanSalvador de Trabanca en la Ruta del Románico del Norte de Portugal
San Salvador de Travanca

Con unos 25 monumentos, es otro de los tramos que conforma la Ruta del Románico en el Norte de Portugal. Incluye, entre otras, las ciudades de Amarante, Chaves y Modim do Basto. Así, en la bella ciudad de Amarante, podemos visitar varias iglesias románicas.

Entre ellas, destaca el monasterio del Salvador de Travanca, del siglo XIII. Está vinculado a la familia de los Gascos y, por ello, a don Afonso Henriques, primer rey de Portugal. Impresiona por su tamaño, ya que fue uno de los monasterios más poderosos de la zona. También hay que mencionar el monasterio de San Martín de Mancelos, vinculado a otra familia noble, la de los Portocarreiros.

Continuando con la ruta, en Celorico de Basto encontramos un castillo románico construido entre los siglos X y XII. Ubicado en un promontorio rocoso, cuenta con una imponente torre del homenaje. Allí también veremos la bonita iglesia de Santa María de Veade, del siglo XIII.

Para finalizar esta ruta, dos centros de interpretación esperan al visitante: el Centro de Interpretación del Románico en Lousada y el Centro de Interpretación de la Escultura Románica en Penafiel.

Ruta del Románico del Norte de Portugal en el valle del Duero

Catedral de Oporto
Catedral de Oporto

En esta ruta destacan las ciudades de Oporto y Braga, en las que sobresalen sus preciosas catedrales románicas. Así, la catedral de Oporto es uno de los monumentos más antiguos de esta ciudad y uno de los edificios románicos más antiguos de Portugal. Su construcción tuvo lugar hacia el año 1110 y es toda una fortaleza flanqueada por dos enormes torres cuadradas.

Mientras, la catedral de Braga data de los siglos XII-XIII. Es una catedral que se compone de un templo principal y varias capillas, además de un claustro. En ella se encuentran las tumbas de los padres del primer rey de Portugal, don Alfonso Henriques: don Enrique de Borgoña, de origen francés, y doña Teresa de León, española de nacimiento.

En las inmediaciones de esta ciudad se encuentra el monasterio de Tibães. Es un monasterio románico fundado en el siglo IV, pero que adquiere importancia a partir del siglo XI con la llegada de los benedictinos. Su importancia fue tal, que en el siglo XVI se convirtió en la casa madre de la Orden Benedictina en Portugal y Brasil.