Qué ver en Vientiane, la capital de Laos

Vientiane es una de las capitales más pequeñas y tranquilas del Sudeste Asiático. A pesar de ello, esconde rincones muy interesantes.
Qué ver en Vientiane, la capital de Laos
María Belén Acosta

Escrito y verificado por la especialista en Asia Oriental María Belén Acosta.

Última actualización: 01 noviembre, 2019

Aunque la capital de Laos, Vientiane o Vientián en español, no necesita más de dos días para verse al completo, sí esconde rincones únicos. La ciudad cuenta con multitud de templos espectaculares y otros lugares de tanto interés como la orilla del río Mekong.

Vientiane, la capital de Laos

Vientiane se encuentra situada en el valle del río Mekong, entre Luang Prabang y Pakse. Fundada en 1354, es una de las capitales asiáticas más relajadas, lo que permite recorrer sus calles y disfrutar de sus monumentos con tranquilidad. Destacan sus templos y la rica cultura en torno al río Mekong.

Puerta de Patuxai en Vientiane
Puerta de Patuxai

Vientiane cuenta con una riqueza cultural debido no solo a estar pegada a la frontera de Tailandia, sino por la influencia francesa a principios del siglo XX. Reconstruida por los franceses tras el saqueo siamés de 1828, la ciudad aún presenta muchos edificios de aires coloniales. En el centro podremos ver obras de inspiración francesa, como la fuente del Nam Phu.

Con una población total de 800 000 habitantes, en toda su área metropolitana se respira un ambiente mucho más apacible, a pesar de ser la capital. De hecho, se trata de una de las capitales menos pobladas de todo el Sudeste Asiático.

Qué ver durante la visita a Vientiane

A continuación, os ofrecemos una selección de los mejores lugares de Vientiane. Además de sus famosos templos, hemos incluido otros puntos turísticos importantes de la capital de Laos para que la visita sea lo más completa posible.

1. Pha That Luang

Vista de Wat Phra That Luang
Wat Phra That Luang

Nuestra primera parada obligatoria es Pha That Luan, el principal templo de la ciudad. Se construyó en el año 1566 sobre los restos de un templo hinduista. Dividido en tres niveles, tiene 45 metros de altura, 69 metros de ancho y está rodeado por 30 estupas pequeñas. Está recubierto de láminas de pan de oro y ha sido saqueado y reconstruido en varias ocasiones.

Durante la visita, también podremos ver otros rincones interesantes. Destacan la estatua del rey Sethathirath, los jardines Saysettha y otros templos, entre ellos el Wat Thatluang Neua, de estilo tailandés.

2. Wat Si Saket

Vista del Wat Si Saket
Interior de Wat Si Saket

Comenzó a construirse en el año 1818 y se finalizó en 1824. Este templo era el lugar preferido por el rey de Laos para sus reuniones. Además, se trata del templo más antiguo de la ciudad, ya que fue el único que sobrevivió a la invasión del Reino de Siam.

El templo conserva su aspecto original. En su interior podremos visitar lugares como la biblioteca, la torre del Tambor y la llamada Sala de Ordenación. Esta última está rodeada por un patio que expone pinturas y más de 6800 estatuas de Buda.

3. Pasear a orillas del Mekong

Río Mekong en Vientiane
Río Mekong

Caminar por la orilla del río Mekong y formar parte de la vida de los ciudadanos de la Vientiane es otra de las actividades obligadas. Además, durante las noches se abre un curioso mercado nocturno, conocido como Riverside Market, donde podremos encontrar productos típicos de la región a buen precio.

También encontraremos durante el paseo el parque Chao Anouvong, donde veremos a muchos ciudadanos paseando y haciendo deporte, así como algunos puestos callejeros. Los amantes de la fotografía disfrutarán de las mejores vistas del río.

Consejos para el viaje

Wat Xieng Khuan Buddha park.
Wat Xieng Khuan Buddha park.

También debemos aprovechar el viaje a Vientiane para disfrutar de su oferta culinaria. Aquí encontraremos desde puestos callejeros a bares junto a los mercados, pequeños establecimientos o locales de fideos y restaurantes de auténtico lujo. Además de poder probar platos de la cocina tradicional de la región, es posible degustar platos de la cocina tailandesa y china.

A la hora de buscar alojamiento, una buena opción son las guest houses, que además de ser más económicas ofrecen la oportunidad de conocer mejor la cultura de la zona. La mayoría se encuentran en el centro de la ciudad, por lo que nos harán más cómoda la visita. También hay hoteles de lujo con todo tipo de servicios.

Para desplazarnos no tendremos muchos problemas. Toda la ciudad se puede visitar a pie, ya que los puntos de interés turístico no se encuentran muy alejados. Aun así, sí es recomendable alquilar una bicicleta o un ciclomotor o, si se quiere una experiencia más típica, siempre se puede viajar en tuk-tuk, aunque su precio es algo elevado.