Todo lo que no te puedes perder en Nikko

Viajar a Nikko es una de las mejores decisiones que podemos tomar si buscamos conocer los orígenes de la historia y cultura del Japón feudal.
Todo lo que no te puedes perder en Nikko
María Belén Acosta

Escrito y verificado por la especialista en Asia Oriental María Belén Acosta.

Última actualización: 27 enero, 2021

Si has decidido viajar al país del sol naciente, no puedes dejar pasar la oportunidad de visitar Nikko. Aunque la ciudad es conocida por sus templos y santuarios, nombrados en el año 1999 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, también esconde paisajes y monumentos que nos transportarán a otra época.

Recorrer sus calles estrechas flanqueadas por casas tradicionales, visitar sus templos y santuarios y deleitarte con cada pequeña postal que puedan captar tus ojos, marcará una diferencia con el bullicio de las grandes ciudades como la capital del país, Tokio. Acompáñanos en este artículo para descubrir esas maravillas que no puedes perderte en Nikko.

1. Templo Taiyuin-byo, una de las joyas de Nikko

Templo Taiyuin-byo en Nikko
Templo Taiyuin-byo

El templo de Taiyuin-byo, inaugurado en el año 1653, es uno de los puntos de interés más importantes de Nikko. Se construyó como mausoleo de Tokuyawa Iemitsu, nieto de Ieyasu, el primer shogun de Japón. Rodeados de vegetación, atravesaremos una serie de puertas hasta llegar al santuario.

La primera puerta que cruzaremos es la puerta Niomom, guardada por dos impresionantes estatuas y que señala la entrada al santuario. También podremos contemplar durante el recorrido los conocidos faroles de piedra, donados al santuario por los daimio o señores feudales de la época. Junto a los faroles se encuentra una espectacular pila de granito.

Además de lo mencionado anteriormente, podremos ver el torreón y el campanario, así como el resto de puertas, entre las que destaca la puerta Yashamon, coronada con una carpa dorada y protegida por estatuas de feroces guardianes conocidos como Yasha. Y finalmente, veremos la última puerta o puerta Kokamon que, además de conducir a la tumba de Iemitsu, es de estilo chino.

2. Santuario Tosho-gu

Santuario Tosho-gu
Santuario Tosho-gu

El santuario cobija el mausoleo de Tokugawa Ieyasu, primer shogun Tokugawa y unificador de Japón. Nada más entrar podremos ver el blasón familiar con tres malvarrosas, blasón que está presente en muchas de sus construcciones. El santuario Tosho-gu es una de las visitas obligadas si nos desplazamos a Nikko.

El lugar sorprende por su ostentación y recargada decoración, así como por su mezcla de imágenes budistas y sintoístas. Nada menos que 15 000 artesanos son los responsables de esta obra de la arquitectura construida en tan solo dos años.

Destaca su pagoda, donada por un daimio en el año 1650, donde cada planta representa un elemento: tierra, agua, fuego, viento y cielo. También podremos ver, dentro del complejo, los tres almacenes sagrados, de marcado diseño tradicional. Junto a ellos se encuentra el establo sagrado, con el famoso relieve de Los tres monos sabios, guardianes simbólicos del mausoleo.

Por último, no debemos perder la oportunidad de contemplar la puerta Yomeimon, decorada con flores y bestias. Esta puerta cuenta con 12 columnas esculpidas boca abajo. Esta imperfección estaba creada a propósito para no enojar a los espíritus.

3. Los increíbles paisajes de Nikko

Cascada Kegon
Cascada Kegon

Para aquellos viajeros que buscan disfrutar de la naturaleza, visitar las montañas de Nikko es, sin duda, una actividad obligada. Aquí se encuentra el monte Nantai, con casi 2500 metros de altura y guardián de los templos y santuarios de la ciudad. Este volcán inactivo acoge una de las cascadas más hermosas de Japón, la cascada Kegon, con una caída de 97 metros.

Otra parada obligatoria durante nuestro recorrido es el lago Chunzenji, que se encuentra situado en uno de los puntos más altos de todo el país. Este lo podremos visitar tanto en barco como a pie.

Además, si continuamos la ruta, podremos hacer una parada en el lago Yunoko, también creado tras la erupción del volcán. Otro paisaje interesante es el de los llanos de Odashirogahara, encargados de separar los humedales de Oku-Nikko.

4. Otros puntos de interés

Puente Shinkyo en Nikko
Puente Shinkyo

Para aquellos curiosos que aún se hayan quedado con ganas de conocer el pasado de Nikko y del propio país, recomendamos la vista al parque temático de Nikko Edomura.

En él, los visitantes viajarán a los siglos XVII y XIX gracias a las actuaciones y la indumentaria de los empleados del recinto. Estos visten desde trajes típicos de la época hasta armaduras samuráis. También se ofrecen platos típicos y representaciones que recrean la vida del Japón feudal.

Pero Nikko no solo ofrece opciones para realizar una vista cultural, también cuenta con actividades para los más deportistas. Son muchos los que se atreven a practicar kayaking por el río Kinugawa, no solo por la adrenalina de recorrer sus rápidos, sino por disfrutar de su magnifico entorno natural.