Los mejores destinos para una luna de miel
Es uno de esos viajes que recordaréis para toda la vida porque estaréis viviendo un momento especial en vuestras vidas. La decisión de elegir entre los miles de destinos para una luna de miel no es nada fácil. Queremos darte solo algunas ideas para disfrutar de unos días inolvidables.
Para tomar esta decisión, primero debéis tener en cuenta el tipo de viaje que queréis realizar. Hay quien busca playas paradisíacas para desconectar y descansar y hay quien prefiere un viaje cultural para visitar monumentos o recorrer ciudades. Y cabe otra posibilidad: combinar ambas opciones.
París, un clásico en los destinos para una luna de miel
Como dice el título de un libro escrito por el autor Nicolas Barreau, “París es siempre una buena idea”. La ciudad cuenta con todos los ingredientes para poder visitarla con cualquier excusa.
Siendo la ciudad del amor por excelencia, te aseguramos que no tendrás un viaje más romántico que este. Caminar por los Campos Elíseos, subir a la Torre Eiffel o comer una crepe mientras visitas el Arco del Triunfo, son cosas que no olvidarás.
Por supuesto, también podéis disfrutar de las maravillosas obras de arte del Museo del Louvre. O podréis sentaros para, simplemente, disfrutar de sus maravillosas terrazas tomando un café. Si queréis tener una luna de miel llena de experiencias, la capital francesa es buena elección.
Tailandia, una luna de miel exótica
El segundo de los destinos para una luna de miel maravillosa se encuentra fuera de Europa, en el continente asiático. Tailandia ofrece un tándem perfecto para el descanso y la visita de lugares increíbles. Aquí encontraréis rincones que no os dejarán indiferentes por el contraste cultural que ofrecen.
En la capital de Tailandia, Bangkok, os esperan impresionantes palacios y templos antiguos. Y también podréis perderos en mercados muy singulares donde podréis conocer la bondad de sus gentes.
Una vez que hayáis recorrido la ciudad y conocido todas sus costumbres, podréis cambiar totalmente de paisaje. En Tailandia también encontraréis maravillosas playas de aguas cristalinas y colores celestes. Y, si sois más aventureros, en el interior del país podréis visitar paisajes espectaculares.
Islas Maldivas, el paraíso del descanso
Si el primero de nuestros destinos era urbano y el segundo era una mezcla entre la ciudad y las playas, el tercero solo podemos definirlo con una palabra: relax. En una casita levantada sobre el mar viviréis unos días “como peces en el agua”. Y es que una de las actividades más destacadas de las islas es el buceo.
¿Quién no ha soñado alguna vez con despertarse, salir de la cama y poder meterse directamente en el mar? Las Maldivas te ofrecen esta posibilidad. En este paraíso podréis disfrutar de playas de arena blanca y aguas de color celeste totalmente transparentes. Todo un lujo.
Nueva York y Riviera Maya
Si la opción de elegir París como destino para una luna de miel no os parece suficiente, actualmente existe una combinación que hace las delicias de muchas parejas recién casadas. La propuesta es visitar en un mismo viaje una gran ciudad y un lugar de playas maravillosas.
Sin duda, la combinación de Nueva York y la Riviera Maya es muy atractiva. Conoceréis los edificios y el bullicio de de una de las ciudades más famosas del planeta. Y, a continuación, nada como relajarse en las paradisíacas playas mexicanas.
Si además queréis conocer la cultura maya, podéis visitar Chichen Itzá, considerada una de las siete maravillas del mundo moderno. En Cobá podréis escalar una antigua pirámide y en Tulum descubriréis uno de los yacimientos mayas más famosos ysingulares, ya que está junto a la costa.
¿Destinos para una luna de miel low cost?
Si por cualquier circunstancia en vuestra luna de miel no podéis visitar ninguno los lugares de los que os hemos hablado, también hay opciones más económicas, pero igual de fabulosas. No olvidéis que lo importante no es tanto el destino como disfrutar del viaje en pareja.
Sin salir de España hay infinidad de destinos perfectos para una luna de miel. Tendréis la opción de descansar en las maravillosas playas de las islas. O podréis visitar ciudades llenas de historia y atractivos. Por no hablar de los increíbles espacios naturales que podréis disfrutar en uno de esos alojamientos rurales llenos de encanto.