Visitamos los mejores balnearios de España
Hacer turismo de salud por los diferentes balnearios de España es una magnífica opción para recorrer casi por completo el país y, al mismo tiempo, aprovecharse de estupendos tratamientos terapéuticos. De norte a sur y de este a oeste abundan los balnearios de aguas termales en las diferentes comunidades autónomas de España.
Son muchos, algunos cargados de historia y otros muy modernos, o sea, los hay para todos los gustos y bolsillos. Para que elijáis bien, aquí os presentamos los mejores balnearios de España.
1. La Toja en Pontevedra, uno de los balnearios de España más lujosos
Este lugar gallego y su hotel de 5 estrellas Eurostars Gran Hotel La Toja ha sido considerado, ni más ni menos, que el mejor hotel de playa en España. Y para conseguir semejante galardón han ayudado, sin duda, sus espectaculares instalaciones termales, en las que no falta de nada: un jacuzzi aromático, un fitness center, baños turcos, piscina climatizada, saunas finlandesas, etc.
Y todo basado en la presencia de sus aguas minero-medicinales, excepcionales para los más variados tratamientos de salud, sobre todo en lo referente a la piel y los pulmones.
2. Balneario Solán de Cabras en Cuenca
Este balneario que nos recuerda a una famosa marca de agua mineral se halla en la Serranía de Cuenca, en el municipio de Beteta. Sus orígenes son legendarios, ya que se cuenta que un pastor vio como parte de su rebaño bebía en este paraje agua y las cabras sanaban sus enfermedades.
Un hecho que llegaría a oídos de Carlos III, que ordenó la construcción del balneario Solán de Cabras en 1755. Desde entonces por aquí han pasado miles y miles de viajeros que han aprovechado la débil mineralización de sus aguas para curarse de problemas digestivos, renales o reumáticos.
3. Termal de Burgo de Osma en Soria
Ahora nos vamos a la otra Castilla, a Castilla y León. Allí, en el monumental pueblo del Burgo de Osma, se halla este hotel balneario que ocupa un hermoso edificio renacentista. De hecho, aquí todo es saludable, ya que la atmósfera que envuelve esta arquitectura ya de por sí es reconfortante.
Pero a eso hay que sumarle las aguas que afloran del conocido como manantial de Santa Cataliana. Estas aguas son excelentes para ciertos tratamientos de prevención cardiovascular y para el reuma.
4. Termas Pallarés en Zaragoza
Este es otro de los balnearios históricos de España y se encuentra en la localidad zaragozana de Alhama de Aragón. Un topónimo este de Alhama que nos lo encontramos en otros muchos lugares de la geografía hispana, y siempre se relaciona con la presencia de termas, ya que es una palabra árabe que significa “agua caliente”.
En este caso, el balneario está en activo desde 1863 y allí los usuarios se aprovechan de unas aguas con capacidad analgésica y sedante, lo que las hace ideales para tratamientos de nervios, estrés o ansiedad.
5. La Perla del Océano de San Sebastián
Esta instalación está ubicada en la siempre hermosa playa de la Concha de San Sebastián, y ya por ello merece formar parte de los mejores balnearios de España. Pero además de eso, hay que hablar de sus propiedades termales explotadas desde 1912, año de su inauguración.
Y si bien es cierto que ha pasado épocas de esplendor y también de abandono, la verdad es que actualmente, y tras una profunda rehabilitación, ha recuperado su actividad de hidroterapia y acoge los más modernos programas de salud y estética.
“La salud es la riqueza real y no piezas de oro y plata.”
–Mahatma Gandhi-
6. El Balneario de Lanjarón en Granada
Ahora nos vamos a Andalucía, a las mismas faldas de Sierra Nevada, en la provincia de Granada. Allí se encuentra la localidad de Lanjarón, que es famosa por sus aguas minerales, que no solo se embotellan, sino que también se pueden aprovechar para distintas terapias termales.
Allí hay hasta seis manantiales y cada uno de ellos tiene diferentes cualidades, yendo de una mineralización muy alta a la muy débil. De esta manera, en el complejo termal de Lanjarón se puede encontrar el tratamiento ideal para un amplio abanico de afecciones.
7. Balneario de Caldes de Boí en Lleida
Las aguas termales de este rincón de los Pirineos ya las conocieron los romanos. Llegar hasta ese paraje ubicado a 1.500 metros de altura es todo un deleite por las vistas que se contemplan y la infinidad de paseos y excursiones que ofrece.
No puede haber mejor complemento que ese entorno natural para los numerosos tratamientos que se aplican en la estación termal de Caldes de Boí, la cual propone programas y terapias muy clásicas, pero también otras muy vanguardistas. Y es que los balnearios de España, con siglos de historia a sus espaldas, también adoptan la máxima de que hay que renovarse o morir.