Las cataratas de Kravice: un maravilloso tesoro escondido

Las cataratas de Kravice: un maravilloso tesoro escondido

Escrito por Juan Luis Minarro

Última actualización: 23 enero, 2016

El pasado reciente de Bosnia y Herzegovina ha mantenido a los turistas alejados de este territorio durante un largo período de tiempo. Afortunadamente, hoy en día se puede disfrutar con total libertad y seguridad de la belleza de las ciudades y la magnificencia de sus paisajes. Y una de sus mayores maravillas, que poca gente conoce aún, son las espectaculares cataratas de Kravice. 

Las cascadas de Kravice: una belleza natural

Cascadas de Kravice
Cascadas de Kravice – anderm

El caudal de las cataratas de Kravice, también denominadas Kravica, se precipita desde una altura de 25 metros. La superficie rocosa desde la que caen sus numerosos saltos de agua posee una fisionomía muy particular. Y es que se asemejan en gran medida a un anfiteatro natural con forma de letra C.

Aunque son mucho menos caudalosas y de menor altura, en lo que a belleza se refiere, su aspecto no tiene nada que envidiarle a torrentes de agua mucho más famosos, como el Salto del Ángel o las cataratas Victoria.

El baño más increíble

El baño en la laguna sobre la que ven su final estos gigantescos chorros no solo está permitido, sino que es muy recomendable, particularmente en la época veraniega, cuando las temperaturas pueden llegar a alcanzar los 40 grados centígrados.

Cascadas de Kravice
Cascadas de Kravice – dinosmichail

Al estar cobijadas por la espesura de los árboles, resulta una delicia sumergirse en sus aguas. Tanta frondosidad conforma una techo prácticamente compacto que resguarda del calor del sol y refresca el ambiente, haciendo el chapuzón mucho más agradable.

Aguas límpidas y refrescantes

Las aguas del río Trezibat son las encargadas de rellenar esa extensa poza. Nadar en ella es una experiencia inolvidable, ya que mientras se chapotea es posible percibir la preciosa tonalidad azulada que alcanzan algunas zonas.

Pero lo más increíble es que, al moverse por la laguna, se va descubriendo que ese color se azulado se va volviendo transparente, permitiendo así observar la multitud de especies de peces que que habitan en este paraíso.

Laguna en las cascadas de Kravice
Cascadas de Kravice – Tatiana Popova

Es impresionante contemplar desde el interior del lago las enredaderas, el musgo y el resto de plantas que la corriente acuática ha ayudado a concebir sobre las altas y pedregosas paredes verticales. Las cataratas dan así la impresión de haberse convertido en un verde y alargado tapiz, un auténtico jardín vertical.

Y los más atrevidos, además de darse un baño, aún pueden dedicar un tiempo a buscar y disfrutar de las cuevas que hay por esta zona y que completan un paisaje absolutamente encantador.

“Estudia la naturaleza, ama la naturaleza, acércate a la naturaleza. Nunca te fallará.”

-Frank Lloyd Wright-

Cataratas de Kravice: lejos del mundanal ruido

Este maravilloso rincón se encuentra a tan sólo unos pocos kilómetros de la ciudad de Ljubuski, con una situación muy próxima a Medjugore, el punto de peregrinación más popular del país. De este modo, los turistas de origen bosnio o croata, de gran espiritualidad y carácter religioso, suelen aprovechar el recorrido en dirección a este santuario para acercarse a contemplar la hermosura de estas cascadas.

Paisaje de Kravice
Cascadas de Kravice – nomadFra

Sin embargo, la oferta hotelera en esta zona no es precisamente abundante. A no ser que tengamos pensado acampar o alcanzar la frontera croata y llegar a Montenegro, es conveniente haber realizado una reserva con antelación en algún pueblo cercano.

Un paraíso carente de señalización

Actualmente, no existe ninguna línea de autobús cuyo trayecto haga parada en las cataratas, de hecho, ni mucho menos existe un servicio de transporte público por las inmediaciones. Las poblaciones más próximas se hallan a una distancia considerable y solo cuentan con una única camioneta diaria como unión con las grandes ciudades.

Kravice
Cascadas de Kravice – Dan Tautan

Lo más habitual es ir acompañados por un guía profesional en un tour contratado en Ljubuski. Si nos lanzamos a ir por nuestra cuenta, una vez nos encontremos en el interior del parque tampoco es facil ubicarse, y es que carece de una clara señalización. No obstante, no es necesario preocuparse, si aguzamos el oído seremos capaces de orientar la posición del río con respecto a nosotros.

Sea como sea, las cascadas de Kravice es uno de esos lugares que merece la pena visitar. Lugares en los que disfrutar de la naturaleza más hermosa y más salvaje.