Maravíllate en el lago Khovsgol, al norte de Mongolia

Se le atribuye un origen legendario. Cierto o no, lo que es innegable es que se trata de uno de los espacios naturales de Mongolia más bellos.
Maravíllate en el lago Khovsgol, al norte de Mongolia
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 16 febrero, 2019

Mongolia, en Asia Central, es un país cada vez más visitado. Y entre lo que ofrece ese inmenso territorio aparece la magia del lago Khovsgol. Allí, como en cualquier otro rincón de Mongolia, la naturaleza es la reina absoluta. Es indomable por su dureza y su inmensidad, y eso se respira en los bellos paisajes que rodean al lago Khovsgol.

Cómo llegar al lago Khovsgol

Vista del lago Khovsgol
Lago Khovsgol – Synn Wang / Flickr.com

No es fácil llegar hasta el lago Khovsgol. Está en la parte norte de Mongolia, muy cerca ya de la frontera con Rusia, más concretamente con Siberia.

Desde la capital del país, Ulan Bator, se hace necesario tomar un bus durante casi todo un día, y algún que otro transporte añadido para llegar hasta la ciudad de Xatgal, la puerta turística del lago.

Y aun así solo hemos llegado al extremo sur del lago Khovsgol. Luego ya nos quedaría recorrer la zona. Algo que en realidad solo es viable en los meses más calientes del año. Como hemos dicho, esta zona es vecina a Siberia, así que solo es aconsejable la visita en verano, y siempre llevando un buen abrigo.

La leyenda del lago Khovsgol

Estamos hablando de una superficie de agua considerable, ya que el lago Khovsgol tiene hasta 136 kilómetros de largo. Y no solo eso, además es muy profundo, ya que supera los 260 metros de fondo. En fin, que estamos hablando de una de las grandes reservas de agua dulce de todo el planeta.

Jinete en el lago Khosvsgol
Jinete en el lago Khosvsgol

Un lugar único y rodeado de un entorno montañoso y boscoso mágico. No es de extrañar, por ello, que a semejante lugar se le adjudique un origen mágico por parte de la población local.

Se cuenta que antaño la zona era un desierto, como tantos otros territorios de Mongolia. Solo había un pequeño pozo de agua para una cabrera y su corto rebaño. Pero un día ese pozo se secó. Por suerte para la pastora, por ahí pasaba un guerrero que decidió ayudarla.

De manera que clavó su espada en el agujero del pozo hasta que empezó a salir agua. Pero no paró de manar agua, tanta, que aquello se convirtió en un auténtico lago. Para parar aquel manantial, el soldado se tuvo que subir a una montaña y de un tajo cortar la cumbre para que cayera al fondo del lago y sirviera de tapón.

Qué hacer en el lago Khovsgol

Más allá de las leyendas, lo que es innegable es la belleza de este lugar. Repetimos, con el buen tiempo, ya que en invierno se pueden alcanzar -30 o 40 ºC. Unas temperaturas que hacen que el lago Khovsgol se congele íntegramente.

Desde luego, en los meses fríos también tendrá una estampa preciosa, pero el lugar adquiere unas condiciones inhumanas para la vida. En cambio, con el buen tiempo, la zona se está convirtiendo en un referente para el turismo en Mongolia. Y cada vez se cuenta con más infraestructura para los viajeros.

Alojarse en el lago Khovsgol

Yurta típica en el lado Khovsgol
Yurta típica – Synn Wang / Flickr.com

Por ejemplo, en la citada ciudad de Xatgal, al sur del lago Khovsgol, hay distintos lugares para alojarse. Tanto en bungalows como en las típicas yurtas mongolas, si se quiere vivir una experiencia diferente.

Son muchos los grupos que llegan ya con sus reservas hechas, pero aunque uno viaje por libre, siempre encontrará un lugar para dormir. Eso sí puede que sea compartiendo techo, fuego y cena con alguna familia local.

Recorridos a orillas del lago

Vista del lago Khovsgol
Vista del lago Khovsgol

Una de las actividades preferentes en el lago Khovsgol es hacer alguna ruta senderista por el entorno y, por supuesto, hacer cientos de fotos. Si uno es aficionado a este arte, estos paisajes proporcionan vistas fantásticas.

Si bien no todos hacen estas excursiones a pie, cada vez hay más posibilidad de hacer estos recorridos cabalgando. Se hace a lomos de los resistentes y pequeños caballos mongoles. Una especie inherente a estas tierras.

Y si los caballos forman parte de la vida la región, también lo son los yaks. Los veremos pastando por cualquier lugar, y hay que probar su agria leche, básica en la gastronomía de la zona.

Y todavía se puede hacer una última actividad en el lago Khovsgol. Se trata de subir al barco que surca estas aguas. Obviamente, esta actividad solo es posible en verano. En realidad, como casi todo en esta zona del mundo.