Lago y la aldea de Uzungol en Turquía

Aunque parece característico de otros países, Uzungol es un valle alpino en el medio de los montes de Turquía que nos envuelve con su encanto y tranquilidad. Te invitamos a conocerlo.
Lago y la aldea de Uzungol en Turquía
Samanta Ruiz

Escrito y verificado por la geógrafa Samanta Ruiz.

Última actualización: 27 mayo, 2021

Turquía invita a propios y a extraños a conocer lugares increíbles. Uno de ellos es el lago y la aldea de Uzungol, en la provincia de Trabzon, a 99 kilómetros de la ciudad homónima. Se trata de una zona turística que ha tomado mucha relevancia en los últimos años y que se encuentra ubicada en lo que se conoce como el distrito de Caykara.

El lugar tiene el encanto de un paisaje alpino, un valle profundo con un lago interior y montañas empinadas recubiertas de bosques densos de verde intenso. De hecho, se trata de la cadena de los Montes Pónticos, también llamados Alpes Pónticos, ubicados hacia el interior de la región del Mar Negro.

El lago de Uzungol: como se formó esta maravilla natural

Situado a 1100 metros sobre el nivel del mar, en el fondo del valle del arroyo Haldizen, el lago de Uzungol se formó por un deslizamiento de tierra que obstruyó el cauce del curso de agua y originó una presa natural.

El espejo resultante tiene un tamaño variable que depende del aporte de agua que recibe de las montañas. Como promedio tiene 1000 metros de largo, 500 metros de ancho y 15 metros de profundidad.

El entorno natural de Uzungol

La zona del lago es parte de un área natural protegida conformada por 1625 hectáreas que se constituyeron en parque natural en el año 1989. En ella habitan especies típicas del clima templado húmedo de las montañas, como las siguientes especies:

  • Fauna: en el lago hay presencia de truchas. En las montañas y los bosques viven osos pardos, lobos, chacales, jabalíes, zorros, linces, nutrias, martas, gallos lira caucasiano y cabras salvajes. Además, se contabilizan más de 250 tipos de aves.
  • Flora: bosques de abetos, coníferas, avellanos, olmos, castaños, hayas y más de 70 especies autóctonas de plantas cubren las laderas. Se destacan las azaleas blancas y púrpuras que perfuman el aire de las montañas y que forman un manto colorido de gran belleza.
El lago Uzungol es además una reserva natural importante en Turquía.

Origen de la aldea

A orillas del lago se encuentra la bellísima aldea de Uzungol, cuyo origen se remonta al año 1585, cuando nació el asentamiento griego de Sahora. Más tarde, con el dominio turco, el pueblo pasó a llamarse Serah. Sus típicas casas de madera aún se conservan en la parte alta, mientras Uzungol se desarrolló hacia las orillas del lago.

La aldea, el lago y el valle forman un conjunto único cuya insistente niebla nocturna le da un toque de misterio que encanta a sus visitantes. ¡Si no fuera por la mezquita, parecería un paisaje de Suiza!

Un dato interesante es que el sitio oficial de la aldea ofrece una cámara en vivo del lugar, para que veas en tiempo real lo que allí ocurre.

Caminatas, naturaleza y buena comida

Para los amantes del contacto con los ambientes naturales, la zona del lago de Uzungol ofrece rutas de senderismo con vistas espectaculares. Otro modo de disfrutar el paisaje son los viajes en parapente y en helicóptero, ¡solo para audaces!

También se pueden programar recorridos a lugares cercanos como las montañas Soganli  y las mesetas de Demirkapi, Karaster y Sekersu, todas a apenas una hora de Uzongol. Toda el área se encuentra abierta al turismo todo el año, aunque en invierno hay algunas restricciones porque todo se cubre de nieve.

El lago Uzungol se cubre de nieve durante el invierno.

En cuanto a la comida, la gastronomía de la zona ofrece sabores locales únicos como el pide, la anchoa kusi y el mulhama. Una típica combinación es el pan de maíz con la mantequilla producida en la zona de las mesetas.

Si prefieres el pescado, las truchas son las protagonistas de exquisitos platos en los restaurantes de Uzungol, en donde también podrás degustar una intensa sopa de repollo acompañada del pan de anchoas.

El desafío de Uzungol

La zona del lago y la aldea de Uzungol están en una encrucijada. Este tranquilo pueblo turco se está debatiendo entre las inversiones turísticas y la conservación de la naturaleza.

Muchos pobladores y visitantes opinan que deben dejar de construirse en el área hoteles y complejos turísticos, ya que se está produciendo un grave daño ambiental. Además, la saturación de construcciones haría perder el encanto de ofrecer un paisaje en donde la naturaleza es protagonista.

Esta ambigüedad es una impronta característica de Turquía, un país haciendo equilibrio entre Oriente y Occidente. Aunque de ello también se rescata un aspecto positivo: en este bello país, todos los visitantes se sienten como en casa.