Historia y recuerdos de la Segunda Guerra Mundial en Francia

La costa de Normandía fue uno de los escenarios decisivos en el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. Pero hay otros muchos lugares en los que permanece el recuerdo del conflicto bélico.
Historia y recuerdos de la Segunda Guerra Mundial en Francia
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 06 enero, 2020

Posiblemente, la Segunda Guerra Mundial fue el episodio del pasado siglo XX que más ha marcado la historia reciente de Europa. E incluso se puede decir que marcó a todo el planeta, aunque bien es cierto que los principales contendientes en el conflicto fueron europeos.

De esta forma, en diversos países de este continente se encuentran algunos de los campos de batalla más trágicos y recordados de la contienda. Pero hoy, de forma más concreta, os vamos a hablar de sitios franceses vinculados con aquella guerra.

El permanente recuerdo de la Segunda Guerra Mundial en Francia

Lo cierto es que casi en cualquier pueblo o valle de Francia podemos encontrar un lugar o un monumento conmemorativo que evoque a los caídos en la Segunda Guerra Mundial. De igual modo, en muchos casos se han guardado vestigios de búnkeres, sendas que usaba la resistencia o restos de viejas trincheras.

Sería inacabable el listado de este tipo de elementos en territorio galo. Por esa razón, hemos hecho una selección con tres zonas donde las huellas del conflicto son bien visibles. Escenarios que incluso se han convertido en un reclamo que atrae a los viajeros más apasionados por el turismo bélico.

Normandía y el famoso desembarco

Búnker en Normandía
Búnker en Normandía

Comenzamos por el lugar más vinculado con la Segunda Guerra Mundial de Francia. Hablamos de la costa de Normandía, al norte del país. Este fue el espacio donde en el día D, o sea, el 6 de junio de 1944, iba a tener lugar el masivo desembarco de tropas aliadas que supondría el principio del fin de la guerra.

Allí hay que visitar las diferentes playas normandas a las que llegaron las barcazas cargadas con soldados estadounidenses, canadienses y británicos. Playas que en la actualidad siguen teniendo sus nombres en inglés como Omaha Beach o la playa de Utah.

Y cerca de esas playas se visitan las baterías defensivas, por ejemplo, en Longues sur Mer. Además, a lo largo de toda esa costa hay un sinfín de refugios, viejos tanques, cráteres de los bombardeos, polvorines, etc… Y también hay distintos cementerios con los restos y recuerdos de los caídos en la batalla.

No solo eso, en el camino encontraréis monumentos que recuerdan aquellos días. Uno de los más curiosos es un maniquí que cuelga en el campanario del pueblo de Sainte-Mere- Èglise. Ese maniquí recuerda un paracaidista que por error cayó aquí y fue capturado por las tropas alemanas.

Oradour sur Glane, una masacre en la Segunda Guerra Mundial

Casa destruida en Oradour sur Glane
Oradour sur Glane

Los amantes del turismo bélico saben que Normandía es uno de los lugares clave para conocer esa guerra, tanto como Hiroshima en Japón o Pearl Harbour en Hawáii. Pero a los que realmente son apasionados de esta temática les gusta encontrar sitios menos conocidos, pero igualmente sobrecogedores por su historia.

Uno ellos es el pueblo de Oradour sur Glane, en el corazón de Francia y muy cerca de la atractiva ciudad de Limoges. Aquí, unos días después del desembarco de Normandía, los soldados de las SS nazis asesinaron a más de 600 de sus habitantes. Un crimen de guerra que se sigue recordando y estremece a todo el que visita el lugar.

Pese a que el pueblo fue prácticamente destruido, esas ruinas están consolidadas para todo aquel que lo desee pueda caminar por este espacio desolado. Un sitio para reflexionar sobre la crueldad humana y desear que la humanidad aprenda de sus propios errores para no repetirlos.

Las Ardenas

Memorial de la Segunda Guerra Mundial en Bastogne
Memorial de la guerra en Bastogne

Retornamos al norte de Francia, pero ahora a la zona de Las Ardenas, un amplio territorio geográfico que el país comparte con sus vecinos de Bélgica y Luxemburgo. Pero en aquellas mismas semanas de 1944 posteriores al Día D, toda esta zona estaba bajo el dominio del ejército de Hitler.

Y, de hecho, lo consideraron clave para hacerse fuertes e intentar recuperar la iniciativa. Todos sabemos que, por fortuna, no consiguieron su objetivo, pero a las tropas aliadas no les fue fácil vencer al enemigo.

Como testigo de la fuerza del oponente, todavía podemos ver por esta zona diversos campos de batalla, así como numerosos cementerios y monumentos en forma de memorial.

Algunos de los lugares que no se pueden perder los apasionados en el tema son las ciudades belgas de La Roche-en-Ardenenne y Bastogne, cerca de la frontera con Francia. Es el final de un travesía que comenzó en Normandía y cuyo itinerario se puede seguir por toda esta parte de Europa. Es una buena ruta en coche o en autocaravana para tus próximas vacaciones.