Descubrimos la historia del Parque Nacional de Tikal
En el norte de Guatemala se encuentra el Parque Nacional de Tikal. Ocupa casi 60.000 hectáreas y en 1979 fue declarado Patrimonio de la Humanidad, tanto por su historia como por su naturaleza. ¿Sabías que en él hay restos de una antigua ciudad maya? ¿Quieres descubrir más cosas sobre este lugar tan especial? ¡Síguenos!
Este maravilloso lugar es considerado el sitio más grande que se ha excavado en las Américas. ¿La razón? Los restos de la civilización maya que se localizaron allí. Ocupan cerca de 1.600 hectáreas y se encuentran en el centro del parque nacional. La ciudad de Tikal llegó a ser tan importante en su época, que estableció relaciones con la gran metrópoli de Teotihuacán, en México.
Historia del Parque Nacional de Tikal
El Parque Nacional de Tikal es uno de los más célebres de Guatemala, y en él se encuentra la cuna de una de las civilizaciones precolombinas más importantes. El parque se fundó el 26 de mayo de 1955.
La vegetación de esta zona es totalmente selvática y, como señalábamos, aquí se encuentran los restos de la ciudad maya más grande que se ha descubierto hasta la fecha. Hasta hace poco tiempo este lugar era un misterio. Eran muchas las leyendas que hablaban sobre la existencia de una ciudad perdida.
No obstante, todas estas conjeturas terminaron en el año 1848. Ese año, Amrosio Tut visualizó las crestas de los templos en la distancia e informó de ello al gobernador de la zona. Tras esto, llegaron al sitio y encontraron algunos restos. En el año 1853 se publicó el descubrimiento por la Academia de Ciencias de Berlín.
Más tarde, la Universidad de Pensilvania comenzó con las excavaciones y poco a poco, los misterios fueron resolviéndose. El proceso tardó aproximadamente 13 años, en los se descubrieron la mayor parte de los restos de la zona arqueológica. No obstante, todavía quedan lugares por descubrir.
¿Quiénes fueron los mayas?
Los mayas fueron una de las civilizaciones precolombinas más importantes de la historia. Destacaron por su arte, arquitectura y sus sistemas de escritura basados en jeroglíficos. Y también por sus sistemas matemáticos y astronómicos.
Esta civilización habitó en la ciudad de Tikal desde el siglo VI a. C hasta el siglo X d.C. El núcleo está comprendido por templos, palacios y plazas públicas con rampas de acceso. Y alrededor de estos lugares están las viviendas.
Tikal fue la capital de la civilización maya. Vivió su mayor época de esplendor entre los siglos III y X d.C.
El nombre de esta ciudad, Tikal, en el idioma maya significaba “en el pozo del agua”. Se piensa que este nombre pudo hacer referencia a las antiguas reservas de agua que existieron en el lugar. Aunque hay quienes piensan que también puede significar “lugar de las voces” o “lugar de las lenguas”. Sin embargo, el primer nombre que recibió fue Yax Mutul, que significa “primer mutal”.
La visita al parque nacional
Si después de todo esto te has animado a conocer el Parque Nacional de Tikal, te informamos de que se encuentra a 549 kilómetros de Ciudad de Guatemala. Hay servicios de minibuses que realizan rutas hasta allí. Suelen ir muy llenos, pero hay servicios especializados para turistas.
No obstante, si decides hacerlo en coche, debes tomar la ruta del Atlántico (CA-9) hasta llegar a Morales, y tomar desde allí la ruta a Ciudad de las Flores (CA-13). Cuando llegues a Mechor de Mencos, toma el desvío a la izquierda en Aldea Ixlú, y llegarás al Remate. De allí, siguiendo la carretera llegarás al parque.
El precio de la entrada es de unos 20 dólares estadounidenses, aproximadamente. Aunque el precio se paga en quetzales. No se aceptan tarjetas de crédito, así que te recomendamos llevarlo en efectivo. El horario es de 6 a 18 h de lunes a domingo.
Una visita a este maravilloso parque nacional te permitirá hacer un recorrido por su historia y disfrutar de múltiples actividades. Primero, te recomendamos visitar los templos de la antigua ciudad maya.
Tras ello, podrás observar aves y la flora y fauna característica del parque en una interesante ruta. Para disfrutarlo al máximo, te aconsejamos llevar agua y comida, calzado y ropa cómoda y un sombrero o gorra para el sol. También crema solar y una linterna para explorar las cuevas por dentro. ¿Impresionante, verdad? ¡Anímate!