Un fin de semana inolvidable en Estocolmo
Dicen quienes han estado en Estocolmo que es una de las capitales europeas más bonitas. Y cuando llegues a ella descubrirás por qué. Te espera una hermosa ciudad, moderna y colonial a la vez, rodeada por las aguas del lago Mälaren y con 14 islas a su alrededor que la forman. Toda una belleza que te retamos a descubrir en solo un fin de semana.
Una ciudad tan hermosa no podía dejar de estar en nuestras propuestas como destino imprescindible para tus próximas vacaciones. Sea que quieras huir del calor infernal del verano o que te encante la nieve y el frío, Estocolmo es para ti. ¿Estás listo para nuestro viaje?
Dos días en Estocolmo, ¿qué ver?
Cada isla de la ciudad tiene un encanto diferente, y aunque no es necesario visitar todas para conocer los secretos de la ciudad sueca, hay alguna que no puedes dejar de ver. En ellas están los monumentos más destacados, la naturaleza más sublime y las calles más encantadoras.
1. Parlamento
Construido entre 1897 y 1905, este edificio es de los más visitados en la ciudad y está situado en la isla de Helgeandsholmen. Un imponente edificio que no podrás evitar fotografiar embellecido con unos enormes jardines de color verde intenso.
2. Iglesia de Riddarholmen
Está ubicada en la isla del mismo nombre y es peculiar y necesaria de ver por ser el panteón de la realeza. La mayor parte está construida en estilo gótico y ladrillo rojo y sus capillas se pueden divisar desde cualquier punto de la isla. El mármol de Carrara utilizado las hace desprender una belleza única.
3. La Casa de los Nobles
No podrás evitar mirar la fachada de este edificio del siglo XVII. De arquitectura barroca fue sede de toda la nobleza y aún a día de hoy se reúnen cada tres años.
4. Palacio Real
Está ubicado en la isla Stadsholmen y sin duda es visita imprescindible. Es la residencia de los reyes de Suecia y su enorme extensión que te costará rodear te llamará especialmente la atención. Se acabó de construir en 1754 en estilo barroco italiano.
El cambio de guardia es un espectáculo que no te puedes perder. Para ello deberás estar allí antes de las 12 pm.
5. Academia Sueca
Otro edificio que no tiene desperdicio y que, aunque se fundó con la idea de fomentar el sueco, hoy y desde hace muchos años es escenario de la entrega del Premio Nobel de Literatura.
6. Catedral de Estocolmo
El edificio que forma esta iglesia es cuanto poco especial. En estilo gótico y barroco, era una iglesia luterana, pero en el siglo XV la convirtieron en protestante. Solo tiene una torre que destaca por su ladrillo amarillo y sus detalles pintados en blanco.
7. Västerlanggatan
En todas las vacaciones vamos de compras. No podemos negarlo. Regalos o caprichos son necesarios en cada viaje. Pues bien, para saciar ese apetito por las compras, y por qué no, tu apetito literal, esta es la calle que necesitas. Es el centro de comercios de la ciudad y está ubicado en el centro histórico.
Podrás tener souvenirs, tomar un chocolate caliente o comer un rico emparedado de salmón escandinavo. Cualquier cosa que se te ocurra típica del país, podrás tenerla aquí.
8. Ascensor Katarina
Si estás en Estocolmo, esta es una panorámica que no se te puede escapar. Y para ello, nada mejor que el ascensor Katarina, a 38 metros de altura y desde donde podrás observar la mejor vista del puerto y el caso histórico.
9. La Iglesia de Santa Catalina
El edificio es sí es espectacular, no solo por su forma, ni por su inclinación tomando la forma de la colina en la que se erige, sino por sus colores y el camino que lleva hasta ella. Parece estar adornada con oro sobre un manto de nieve blanco y puro. Con una cúpula espectacular que parece tocar el cielo.
Su camino de subida a la colina es un deleite para la vista, pues está abrazado por un majestuoso paisaje natural y unas vistas alucinantes del lago más famoso del país: el lago Mälaren.
“Una vez que viajas, el viaje nunca termina. La mente nunca puede desprenderse del viaje.”
-Pat Conroy-
Si después de nuestro recorrido aún te queda tiempo no dejes de ver la Ópera Real, la Iglesia de Santa Clara, el Ayuntamiento o el Museo de Historia. En Estocolmo descubrirás una ciudad llena de sorpresas, y seguro que querrás regresar para seguir descubriendo sus tesoros.