Feldkirch y alrededores: un bello rincón de Austria

Feldkirch, en la zona más occidental de Austria, tiene todo el atractivo de los lugares fronterizos y cargados de historia. Es una gran sorpresa durante un viaje por este país alpino.
Feldkirch y alrededores: un bello rincón de Austria
Armando Cerra

Escrito y verificado por el historiador del arte Armando Cerra.

Última actualización: 09 enero, 2020

Feldkirch, en el estado austriaco de Vorarlberg, nos invita a dar un paseo por la Edad Media. Es un viaje a tiempos de castillos y señores feudales gracias a la estupenda conservación de su patrimonio histórico. Pero no solo merece la pena descubrir su casco antiguo, también hay que admirar su entorno natural de bosques y montañas. Es un lugar casi de ensueño e ideal para hacer un viaje en familia.

Dónde está Feldkirch

El primer paso para descubrir los encantos de Feldkirch es localizar la población en un mapa. Así que habrá que buscar uno de Austria y mirar por su zona más occidental, en concreto, en el estado de Vorarlberg, como ya adelantábamos.

La localidad se encuentra a un paso de las fronteras con Suiza y con el pequeño país de Liechtenstein. Este es un lugar que nadie debería perderse si prepara una ruta en coche para conocer en profundidad este país de Centroeuropa.

La historia de Feldkirch

Centro urbano de Feldkirch
Centro urbano

Como ya hemos dicho, el mayor reclamo para visitar Feldkirch es sumergirse en sus calles de trazado medieval. Es así porque fue precisamente en la Edad Media cuando apareció la ciudad.

Allá por el siglo XII se iniciaría la construcción de su castillo, y después irían surgiendo la plaza del Mercado o las calles aledañas. En definitiva, que estamos hablando de un lugar que tiene esa atmósfera de cuento de la que pueden presumir los más selectos pueblos de Europa.

Pasear por este conjunto histórico es una experiencia que por sí sola merece la pena. Pero esas sensaciones todavía son más enriquecedoras si se viaja aquí en los meses de buen tiempo, cuando se celebran diversos festivales de música, entre ellos uno dedicado al compositor Schubert.

No hay que olvidar que en las ciudades austriacas la música y los festivales son muy importantes, basta con recordar a la hermosa urbe de Salzburgo y su hijo más ilustre: Wolfgang Amadeus Mozart.

Qué ver en Feldkirch

1. El castillo de Schattenburg

Castillo de Schattenburg en Feldkirch
Castillo de Schattenburg

Ya hemos nombrado que el origen de Feldkirch se encuentra en su castillo, el castillo de Schattenburg. Es de visita obligada, y no solo para admirar su puertas, murallas y torres, también porque allí se puede visitar el Museo de la Ciudad. Este es el mejor lugar para conocer los avatares de esta localidad tan hermosa como acogedora.

2. El Museo de la Radio

No obstante, ese no es el único museo de Feldkirch. Hay uno muy curioso: el Museo de la Radio. Allí se expone un conjunto de emisoras, radios y gramófonos con muchos años de antigüedad. También hay viejos televisores y hasta aparatos electrónicos que hoy son antiguallas. En definitiva, es un museo que invita a ver la evolución tecnológica que nos ha llevado a los actuales smartphones.

3. El patrimonio de Feldkirch

Churer Tor
Churer Tor

Todavía hay más lugares que visitar durante el paseo por las calles de Feldkirch. Por ejemplo, hay que visitar la iglesia de San Juan, del siglo XIII y que hoy alberga muestras de arte contemporáneo. También hay que ver la catedral de San Nicolás, una curiosa mezcla de arte románico y gótico, sin olvidar la visita a torres históricas como las de los Gatos o la del Agua.

Visitar los alrededores

Pero tal y como decíamos, el entorno de Feldkirch también invita a hacer kilómetros por la zona y descubrir sitios espectaculares. Algunos están tan cerca como el Parque Zoológico de Feldkirch, ideal si se viaja con niños.

Otros lugares de interés están un poquito más distantes, pero merece la pena descubrirlos. Hablamos, por ejemplo, de la montaña Drei Schwstein o Tres Hermanas. Es un triple pico que se convierte en el mejor mirador para ver a un lado Austria y al otro Liechtenstein.

Y una excursión estupenda es acercarse hasta la dinámica y amable ciudad de Bregenz. Es una de las más atractivas de cuantas hay en las orillas del lago Constanza que comparten Austria, Alemania y Suiza. Precisamente allí, os recomendamos la visita al Rheindelta, el lugar por el que entran las aguas del Rhin a este gran lago, un paraíso natural perfecto para los amantes de la ornitología.