Visitamos la estación de esquí de Astún, en el Pirineo aragonés
La estación de esquí de Astún, ubicada en el Pirineo aragonés, es uno de los principales centros invernales del país. Además, tiene un enclave estratégico, ya que ocupa el centro de lo que podría ser el campo de nieve más amplio de la península, si se tuvieran en cuenta las estaciones de Candanchú y Formigal. A continuación, te descubrimos todo sobre Astún. ¿Nos acompañas?
Historia de Astún
En 1970, un grupo de ingenieros realizó estudios para comprobar si en el valle de Astún se podía instalar una estación de esquí. A vista de que los resultados fueron positivos, cinco años más tarde se inició la carretera de acceso a la que sería la zona urbana de la estación. También se instalaron las pilonas de la telesilla que une la base con el punto más alto, la cima de La Raca.
En los años sucesivos, y más concretamente en 1977, comenzaron las obras de infraestructura de la estación. A esto le siguió el impulso del valle de Astún a los primeros puestos de las estaciones de nieve de España, con la implantación de más remontes mecánicos; la creación de una zona urbana dotada de todos los servicios necesarios; y la mejora y trazado de nuevas pistas.
“La maravilla de un solo copo de nieve supera la sabiduría de un millón de meteorologistas.”
-Francis Bacon-
Características de la estación de esquí de Astún
Situada en el término municipal de Jaca, el paisaje que se aprecia desde ella es de una gran belleza. Y es que está ubicada en un valle transversal al eje pirenáico. Esto también implica que está bien protegida de las corrientes de viento.
Igual de espléndida es su orografía: todas las laderas están cubiertas con praderas de hierba natural, lo que aumenta la seguridad de nieve desde el principio de la temporada.
Asimismo, Astún dispone de 50 kilómetros en pistas esquiables y una gran variedad de descensos freeride, es decir, que el esquiador puede elegir el recorrido a seguir con total libertad. Entre dichos descensos se encuentra el de Pinos, uno de los de más reputación de España.
Por tanto, la estación de esquí de Astún cuenta con pistas de todos los niveles de dificultad, así como con trazados aptos para cualquier tipo de esquiador. Queda a preferencia de cada uno desde qué cima del valle descender. Eso sí, sea cual sea la opción escogida, el destino final es la gran plataforma que constituye el núcleo de la estación.
Servicios de los que dispone
Alrededor de La Raca, de 2 300 metros de altitud y un desnivel de 650 metros, se ha creado una urbanización para atender a los clientes con hoteles, restaurantes, tiendas especializadas, alquiler de material…
Además de disfrutar de las instalaciones, los clientes pueden realizar numerosas actividades como descender en trineo, realizar excursiones, probar material o participar en alguna experiencia gastronómica.
Por si no fuera suficiente, los clientes también tienen la posibilidad de comprar un abono para disfrutar de la estación de Astún junto a la de Candanchú, lo que se traduce en 100 kilómetros de pistas esquiables. Ambas estaciones están conectadas por un autobús gratuito que realiza el trayecto en menos de diez minutos.
Por otro lado, Astún no solo tiene actividad durante el invierno, ya que en la época estival se mantienen abiertos varios telesillas como el de “Los Lagos”, que accede hasta la zona de Truchas. En la zona se ofrecen excursiones y actividades como senderismo, descenso de barrancos, ráfting o escalada.
Circuito de conducción
Desde hace unos años, Astún dispone de un circuito cerrado y acondicionado en el que se imparte un curso de conducción sobre nieve. El objetivo del mismo es que los participantes aprendan cómo afrontar una situación inusual para la que no estamos preparados de serie. Y es que la conducción sobre nieve es divertida, pero también peligrosa.
La actividad tiene una duración de sesenta minutos. Incluye una explicación teórica de las técnicas de conducción en nieve y la posibilidad de conducir un Ford Kuga en diversas pruebas: slalom, derrapaje controlado en curva, frenado y esquiva… Por lo que es un incentivo más para dejarnos caer por la estación de esquí de Astún.