Consejos para controlar el miedo a volar
Si eres de los que siente pánico ante la sola idea de tener que subir a un avión, puedes superarlo. Es necesario que afrontes este temor y practiques algunas técnicas de relajación antes de viajar. Para ello, te daremos a conocer algunos consejos para controlar el miedo a volar.
Muchas personas sufren de aerofobia, que es el miedo a volar. Pero está comprobado que con voluntad y empeño, se puede vencer esta limitación. Piensa en las oportunidades que puedes perder solo por no atreverte a subir a un avión. No eres justo contigo mismo si dejas que eso pase.
Para perder el miedo a volar, hay que volar. Sin embargo, para dejar la ansiedad existen métodos de apoyo que funcionan. El primero es mentalizarte de que lo vas a lograr y que para conseguirlo harás el esfuerzo necesario.
Por qué el miedo a volar
Sentimos miedo a lo desconocido, y pensar que estamos volando a gran altura genera una sensación de vacío y vértigo. Es extraño darte cuenta de que estás suspendido en el aire. Es raro porque siempre estamos con los pies en la tierra. Así, solo pensar en ello te lleva a sentir nerviosismo y quizás un deseo incontenible de escapar.
Aparecen pensamientos trágicos, como que una fallo técnico hará caer el avión. Los estudios demuestran que la probabilidad es muy baja. Estadísticamente, es igual a la que tendrías al estar en una tormenta y que te cayera un rayo.
Cosas normales que parecen extrañas al volar
Si sientes miedo, seguro es porque no estás acostumbrado a volar, ni conoces la mecánica del avión. Cuando este despega, necesita fuerza y velocidad. Es entonces los motores emiten unos sonidos que parecen rugidos.
A la vez, tu cuerpo tiene una resistencia debida a la gravedad, es decir, una tendencia a permanecer en el estado inicial de equilibrio o quietud. Por eso el despegue genera una sensación física un poco incómoda.
Por su parte, las turbulencias no son otra cosa que corrientes de aire que sacuden el avión. Pero descuida, tú solo verás nubes. Es igual que estar conduciendo en carretera por un terreno rocoso. También es normal que las alas del avión suenen fuerte. Y si uno de los motores del avión falla, puede sostenerse con los demás.
Para tu tranquilidad, antes de viajar los pilotos reciben información sobre las turbulencias. Y al volar, tienen radares meteorológicos que las monitorean. Esto permite que tomen las medidas preventivas y tengan todo bajo control.
Volar sin miedo en un transporte seguro
Los aviones se someten a revisiones técnicas rigurosas. Después de cada vuelo pasan por una revisión de mantenimiento. Y la tripulación es un equipo de profesionales altamente cualificados. Ellos serían los primeros en tener miedo a volar si no contaran con todas las medidas de seguridad.
Las aerolíneas ofrecen cursos, de gran utilidad, para brindar orientación aeronáutica. Estos ayudan a despejar todas las dudas técnicas y operativas para controlar el miedo a volar. Aprenderás que los aviones son el medio de transporte más seguro de todos cuantos existen.
Planea bien tu vuelo
Debes pensar en el origen de tu miedo y revisar si se debe a un mito o temor imaginario. De cualquier forma, planear tu viaje ayudará a programarte mentalmente para volar. Es importante organizarlo todo y diseñar un mapa mental. Apuntar todo con tiempo evita mayor ansiedad. Repasa hasta el último detalle en una lista.
Puedes leer y buscar toda la información sobre tu viaje. También es recomendable visitar el aeropuerto antes. Esto sirve para que te familiarices con los aviones, los vuelos y aterrizajes. Y también sirve para repasar el proceso administrativo que debes seguir con la aerolínea.
Realiza un viaje mental
Realiza un ejercicio mental de visualización del viaje en el que imagines cada paso a seguir. En el momento de empezar a volar mentalmente, piensa serenamente que lograrás un final feliz. Puedes ayudarte con ejercicios relajación y respiración profunda.
Debes consultar y practicar previamente técnicas de relajación. Y siempre debes poner en tu mente ideas positivas sobre viaje. Lo recomendable es hacer estas prácticas varias horas antes de tu vuelo.
No es aconsejable ver películas o leer documentos sobre accidentes aéreos. Estos son casos excepcionales o de ficción que no ayudan en nada y, en cambio, pueden incrementar tu ansiedad.
Otras recomendaciones para controlar el miedo a volar
Reserva tu vuelo con tiempo y escoge el horario de tu preferencia. Intenta tomar un vuelo directo. También, elige un asiento que sea paralelo a las alas del avión, en el pasillo o la salida de emergencia. Y evita los últimos asientos de la cola, pues en las turbulencias tienen mayor movimiento.
Busca mantener la mente ocupada. Puedes leer, ver una película, escuchar música o realizar actividades de trabajo. Otra opción es recibir una clase virtual, activar juegos en tu app o trabajar en tu ordenador. También podrías sostener una buena conversación con tu acompañante.
Tomar una siesta durante el vuelo te viene bien. Y evita el consumo de licores o tranquilizantes. En cambio, trata de consumir alguna golosina o algo que te guste comer. Si consideras que el miedo a volar es extremo, busca apoyo profesional para superar esta limitación.