Chamberí, un distrito con mucho encanto en Madrid
Más allá de sus museos y monumentos, Madrid alberga lugares llenos de encanto, y uno de ellos es el distrito de Chamberí. Es una de las zonas más castizas y más elegantes de la capital española. Además, tiene un buen número de atractivos que te vamos a mostrar. ¿Quieres acompañarnos?
Chamberí, castizo y aristocrático
Chamberí está formado por 6 barrios: Almagro, Ríos Rosas, Vallehermoso, Gaztambide, Arapiles y Trafalgar. Durante los siglos XIX y XX esta fue una de las zonas elegidas por la aristocracia para residir. De hecho, aún conserva un cierto aire señorial.
Un distrito que aún conserva decenas de edificios de estilo modernista, neogótico y neomudéjar. Algunos están declarados Monumento Nacional, entre ellos el Hospital de Maudes, el Instituto Internacional o el Convento de las Salesas Reales.
Y queremos contarte una curiosidad sobre su nombre. Se debe a que durante la Guerra de la Independencia aquí se estableció un destacamento francés procedente de la ciudad francesa de Chambery.
“Madrid, que no hay ninguna villa, en cuanto el sol dora y el mar baña mas agradable, hermosa y oportuna.”
-Lope de Vega-
Qué ver y qué hacer en Chamberí
Sin duda, es una de las zonas más bonitas y más animadas de Madrid. Por ello merece la pena tomarse un día (o una mañana, según el tiempo que dispongamos) para recorrer Chamberí. Estos son sus algunos de sus principales atractivos:
1. Estación de metro de Chamberí
Es conocida como “la estación fantasma”, ya que los trenes pasan por ella sin hacer parada. Formaba parte de la línea 1, la primera línea de metro española. Cuando se inauguró, en 1919, conectaba Sol con Cuatro Caminos, hoy es mucho más larga.
Esta estación es en la actualidad un museo y es una buena manera de conocer cómo era una estación de metro en el pasado. La estación cerró en 1969 y ahora es un destacado lugar histórico del distrito.
2. Museo Geominero
Alberga una excelente colección de rocas, fósiles y minerales de todas las regiones de España y varios territorios coloniales. El edificio fue inaugurado por el rey Alfonso XIII en 1927. Organiza talleres educativos y en su salón principal se pueden ver las vitrinas de madera tallada y una cristalera cenital espectacular.
3. Plaza de Olavide
Está en el barrio de Trafalgar y está repleta de terrazas, un lugar por ello perfecto por ello para relajarse tomando algo fresco bien acompañado de unas tapas. Peatonal, con gran ambiente y muchos árboles, la plaza de Olavide es un pequeño oasis en el centro de Madrid.
4. Teatros del Canal
En la calle Cea Bermúdez se encuentra este complejo de 35000 m² y dedicado al arte escénico. El edificio ha ganado el Premio Nacional de Arquitectura y su sala acoge todo tipo de obras: piezas modernas, textos clásicos, circo, cabaret, zarzuela, ópera, danza y flamenco.
5. Plaza de Chamberí
Es otro de los espacios verdes que no te puedes perder por esta zona, exactamente entre la calle Santa Engracia y el Paseo de Eduardo Dato. Fue ajardinada en 1877 y unos años más tarde se inauguró en uno de los bordes el Convento de las Siervas de María. Por debajo de esta plaza pasa el metro y encontramos la vieja estación de Chamberí.
6. Calle Zurbano
Discurre paralela al Paseo de la Castellana y está repleta de preciosos palacetes y edificios con mucho encanto. Arbolada y de un solo carril, en la calle Zurbano conviven las típicas tiendas de barrio y las casas señoriales de la Belle Epoque, como el palacete de Santo Mauro, hoy un hotel de lujo.
En esta calle también podemos encontrar la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas, el Palacio de los Marqueses de Casa Riera (donde nació Fabiola de Bélgica en 1928), la Embajada de Suecia, la Iglesia de San Fermín de los Navarros y el Palacio del Marqués de la Oliva.
7. Museo Sorolla
Es la joya de la calle Zurbano, por ello se merece un apartado especial. Este museo está emplazado en la casa donde vivió el pintor con su familia desde 1910. La viuda de Sorolla donó todos los bienes del artista al Estado Español.
Aquí podrás contemplar muchos de los objetos que reunió en su vida: pinturas, dibujos, esculturas, cerámicas, fotografías antigua, joyería popular y mucho más. Además, tiene un jardín que es un oasis de paz y naturaleza.