Los cañones del Ebro, un paisaje sorprendente
Los cañones del Ebro forman un paraje natural que sorprende por su belleza. Si no lo conoces, presta atención, te descubrimos todo sobre este maravilloso lugar. En él podrás hacer diversas actividades, como senderismo o bicicleta de montaña. ¿Nos acompañas?
Los cañones del Ebro, una maravilla natural
Los cañones del Ebro son consecuencia de la acción erosiva de este río a su paso por tierras de Burgos. Aquí, el curso del agua abrió una brecha que en algunos puntos alcanza los 200 metros de profundidad en los páramos calcáreos de Las Loras.
El paisaje es una sucesión de hoces, de cañones, riberas escarpadas y de meandros que serpentean por los valles.
Pero su valor va más allá de lo paisajístico. La riqueza vegetal es enorme, con nogales, hayas, robles gigantescos o una gran variedad de plantas aromáticas. Una vegetación que hace de este lugar el rincón más verde de la provincia de Burgos.
Para disfrutar de las mejores vistas, lo mejor es dirigirse al mirador que se encuentra en el recorrido que lleva a Pesquera de Ebro. Un lugar que es de fácil acceso por carretera y desde donde se observa un panorama que corta la respiración.
Rutas en los cañones del Ebro
Los cañones del Ebro son un lugar ideal para hacer senderismo. La ruta más famosa es la que discurre entre Pesquera del Ebro y Orbaneja del Castillo, pues ofrece unas espectaculares perspectivas de la disección del río.
La ruta cubre una distancia de unos 15 kilómetros, lo que se traduce en una duración de seis horas y media, aproximadamente. Pero el tiempo pasará volando mientras se admira un paisaje de enorme belleza que sobrevuelan buitres, águilas o halcones.
Más sencillo, pero igual de interesante, es recorrer parte del cañón del Rudrón. La senda transcurre a lo largo de tres kilómetros. Discurre paralela al curso del Ebro, por el fondo del desfiladero, y atraviesa el pueblo de Covanera hasta llegar al Pozo Azul, una laguna de un intenso color turquesa.
Y existe una tercera ruta, que incluye los enclaves rurales de Tudanca o Cidad. Se trata de un recorrido circular que comienza y termina en el mismo punto: la localidad de Villarcayo. Es perfecto para realizarlo en bicicleta de montaña.
Sea cual sea el recorrido que elijamos, hay que seguir unos consejos, como llevar agua o bebidas isotónicas para hidratarnos, así como algo ligero para comer y recobrar fuerzas. También hay que llevar ropa y calzado adecuados, y debemos informarnos previamente de las condiciones de la ruta y del tiempo.
Pueblos que se visitan en los cañones del Ebro
Además de sorprendernos con la impresionante naturaleza de los cañones del Ebro, hay pueblos que se asoman a las rutas y cuya belleza es innegable. Uno de ellos es Cortiguera, donde el escritor Miguel Delibes se inspiró para escribir su novela El disputado voto del señor Cayo.
De Cortiguera pasamos a Valdelateja, que, hundido en el fondo del valle, acoge la unión del Ebro y el Rudrón. Alberga diversos monumentos de interés, como Castrosiero, el antiguo yacimiento arqueológico visigodo; la ermita de Santa Centola y Santa Elena; la ermita de San Antonio o la iglesia parroquial de Santa Eulalia.
No obstante, el más destacado puede que sea uno que ya hemos nombrado: Orbaneja del Castillo, declarado Conjunto Histórico-Artístico. Aquí se pueden conocer la cueva del Azar y la cueva del Agua, de la que parte un arroyo que atraviesa la población hasta caer en cascada hacia el Ebro.
También de gran importancia es Pesquera del Ebro, una villa con casas blasonadas y antiguos palacios. Allí hay que ver la iglesia parroquial San Sebastián, sus innumerables escudos nobiliarios; o el puente sobre el Ebro, que luce toda la belleza de su primitiva estructura medieval.
Como habrás podido comprobar, los cañones del Ebro dan forma a un lugar único por su hermoso paisaje. Un lugar para disfrutar de la naturaleza y recorrer pueblos llenos de encanto. ¿A qué esperas para visitar este paraje?