Austria cuenta con el pueblo más impresionante: Hallstatt
Austria es sinónimo de belleza sin precedentes, de paisajes de película y de arquitectura muy especial. Pues además de generalizar, queremos hablarte de uno de sus pueblos en particular: Hallstatt, un lugar de auténtica fantasía.
Lo que no te puedes perder en Hallstatt
¿Te has quedado fascinado alguna vez por uno de esos lagos enormes a pies de unas montañas gigantescas de color gris y verde? ¿Has pensado que es como un paraíso? Pues bien, ahora está al alcance de tu mano, pues Hallstatt tiene todo eso y mucho más. ¿Te vienes con nosotros a hacer un maravilloso recorrido por este fascinante lugar? ¡Vamos!
1. Lago Hallstatt
Este lago es un espectáculo inigualable. Respirar aire puro en pleno silencio a la vez que realizas un paseo en barquito por él, te recargará las pilas para el resto del año. Podrás disfrutar de paisajes naturales sin igual, será una experiencia increíble que no querrás que nunca termine.
“El arte, la gloria, la libertad se marchitan, pero la naturaleza siempre permanece bella.”
– Lord Byron –
2. Iglesia parroquial católica
Seas o no religioso, este es un lugar que no te puedes perder en Hallstatt. Los frescos de su interior te dejarán boquiabierto.
También tiene un cementerio como el que quizá no hayas visto nunca. En vez de lápidas, se erigen sobre las tumbas una especie de buzones de madera, que de lejos parecen pequeñas casitas que forman un paisaje realmente fascinante al mezclarse con el lago.
3. Las minas de sal de Hallstatt
La única forma de llegar era a pie, aunque a día de hoy ya existe un funicular que te llevará hasta la cima para que goces de todo el esplendor que estas minas te ofrecen.
Datan de miles de años atrás y se han encontrado distintos restos arqueológicos al llevarse a cabo excavaciones de las que te hablarán por el camino.
La visita a las minas es muy emocionante, ya que te harán meterte de lleno en el papel colocándote un casco y un mono de minero junto con una linterna. Hay otras sorpresas en su interior que tendrás que descubrir por ti mismo. Si vas en una hora cercana a la de la comida, el restaurante que hay en esa zona te ofrece unas vistas asombrosas de Hallstatt.
4. Hallstatt de noche
Si este pueblo es bonito de día, de noche su encanto se triplica. Las típicas casitas austriacas iluminadas en las calles por antiguas farolas invitan a pasear sin rumbo y conocer este hermoso lugar. Si además vas en época de nevadas, te deleitarás con la visión de un pueblo que parece sacado de un cuento de hadas.
Pasear por las calles de este hermoso lugar no tiene desperdicio. Las casas están decoradas con estantes de madera llenos de flores, mesas y sillas antiguas, algunas incluso llenas de musgo y un sinfín de detalles más que no te puedes imaginar.
5. La plaza central
La plaza del centro de Hallstatt tiene una fuente en el centro que no pasa desapercibida. Un lugar en que sacar unas fotografías preciosas, como el resto del lugar.
Hallstatt es un pueblo pequeño, pero como ves, con mucho por ver y hacer. Es uno de los lugares más fotogénicos del mundo, pues en él podrás obtener esas instantáneas que ves en Internet y que no sabes de dónde salen. De hecho, esta hermosa localidad austriaca fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, con el titulo de “la ciudad más hermosa del mundo al lado de un lago”.
Si alguien aún afirma que el hombre y la naturaleza no pueden cohabitar, Hallstatt le hará cambiar de opinión. Tanto es así que es un lugar sin coches ni contaminación. De hecho, si llegas en coche, tendrás que dejarlo en la cima de una de las montañas y bajar hacia el pueblo por unas escalerillas. ¿No sientes curiosidad?