Visitamos 3 maravillosos castillos de Segovia

Visitamos 3 maravillosos castillos de Segovia

Escrito por Juan Luis Minarro

Última actualización: 31 enero, 2017

La provincia de Segovia, en Castilla y León, cuenta con una historia rica. Estas tierras han sufrido invasiones y han sido testigos de batallas y contiendas por doquier. Y de la época medieval nos quedan magníficos castillos castellanos. Edificaciones maravillosas, testigos mudos de acontecimientos de siglos pasados que siguen impresionando a quien las visita. Vamos a conocer 3 de los castillos de Segovia más destacados.

La ruta segoviana de los castillos

La geografía segoviana está plagada de fortalezas que sirven de muestra de su valioso pasado. Son tantas y tan valiosas que hasta se ha elaborado una ruta turística en torno a ellas. De esta manera, aquellos turistas interesados en conocer y recorrer dichos alcázares podrán hacerlo sin problemas.

Castillo de Turégano en Segovia
Castillo de Turégano – Matt Trommer

Este itinerario por los castillos de Segovia incluye también la visita a antiguos templos y palacios que harán las delicias de los forasteros. Muchas de las edificaciones con las que nos toparemos han sido restauradas con mimo. Recuperadas para la exhibición de lo que fueran sus antiguas funciones.

Entre esas funciones hubo de todo: desde cárceles a colegios o cuarteles. La ruta nos interna en las raíces celtíberas y mudéjares. Nos guía por castillos tan llamativos como los de Turégano, Castilnovo y Pedraza.

“Viajar hace a uno modesto. Ves el lugar pequeño que ocupas en el mundo.”

– Gustave Flaubert –

Un paseo entre los castillos de Segovia

1. El Alcázar de Segovia

Junto con el popular acueducto romano, es uno de los monumentos segovianos más populares. El Alcázar de Segovia conforma uno de los puntos de mayor interés turístico de la región. Es, además, uno de los castillos más famosos de Europa por su particular belleza.

Vista del Alcázar de Segovia
Alcázar de Segovia – LianeM

Su valor cultural se remonta a su construcción. Y es que fue levantado por un importante rey bereber en plena Edad Media. Más concretamente en el siglo XII. No obstante, las investigaciones allí acometidas sugieren que previamente ya existía algún tipo de edificación en esta localización. Se cree que ésta probablemente sería de origen romano.

Tras la reconquista de este territorio, los reyes de Castilla solían pasar etapas extensas en dicho castillo. Puede que fuera debido a su espectacularidad y también a su proximidad con cualquier parte de la península.

2. Castillo de Coca

El castillo de Coca se ubica en la población homónima. Sus construcción data del siglo XV. Destaca por su decoración y arquitectura de estilo gótico-mudéjar. Es más, se le considera como el más claro exponente de este estilo. Puede considerarse como un ejemplo de la belleza que supone el mestizaje y la convivencia de diferentes culturas.

Castillo de Coca en Segovia
Castillo de Coca – Marques

El valor artístico de este edificio es tal que hasta cuenta con una réplica en Minimundus. Hablamos del famoso parque de miniaturas alojado en Austria. Junto a él se hallan copias de ejemplos arquitectónicos tan reconocidos como la Estatua de la Libertad. Pero también de la Ópera de Sydney, el Atomium o el Taj Mahal.

Este fortín cuenta con su propio foso y, por supuesto, con una esbelta torre del homenaje. Su decoración interior se basa en los mosaicos. La exterior, por otra parte, depende de la piedra caliza. Como curiosidad, alberga diversas plantas unidas únicamente por una estrecha escalera de caracol.

3. Castillo de los duques de Alburquerque

Este anciano edificio también puede recibir el nombre de castillo de Cuéllar. Es el orgullo de la población homónima que lo alberga. Su belleza y su buena conservación es tal que está considerado como un Bien de Interés Cultural. Un título que se le concedió en el año 1931.

Castillo de Cuéllar en Segovia
Castillo de Cuéllar – KarSol

Lo que en un principio se alzase como un edificio militar acabó por trasformarse en un elegante palacio. Los duques de Alburquerque se alojaron en él durante años, hasta que se mudaron a la capital. Sin embargo, no se ausentaron demasiado, convirtiéndolo en su destino vacacional favorito.

Más tarde cumplió labores de penitenciaría e incluso de centro hospitalario para la atención de tuberculosos. A día de hoy, sus salas están dedicadas simplemente a la enseñanza. La razón es que se ha transformado en un Instituto de Educación Secundaria Obligatoria para los jóvenes del municipio.