10 errores a evitar respecto al transporte cuando viajas
En cuanto tienes claro hacia dónde se dirigirá tu viaje, llega un momento crítico, elegir un transporte. En el mundo existen muchos tipos de personas que gozan de las escapadas, pero, por lo general, la elección de vehículos y métodos de desplazamiento se basan en lo económico. Aun así, se pueden evitar errores, aunque elijamos un vuelo barato, por ejemplo.
1. Quedarte sin dinero en metálico
Es importante a la hora de viajar llevar siempre una suma aceptable de dinero en metálico. A pesar de que hoy en día las tarjetas de crédito y débito son aceptadas en casi todos los comercios, nunca nos debemos confiar.
Piensa que al pasar por un duty free puedes encontrar gangas o al llegar a tu destino tal vez necesites coger un taxi o transporte público. Para evitar problemas, lo mejor es llevar siempre una buena suma de dinero en el bolsillo.
2. Margen de seguridad en los transbordos
Para un viajero experimentado, un transbordo nunca baja de una hora u hora y media. Así pues, cuando elijas el transporte para tu viaje, no olvides en ningún momento decidir el tiempo de seguridad suficiente para hacer el cambio. Hay que recordar que los aviones se retrasan, los aeropuertos pueden estar atestados, las condiciones meteorológicas adversas, etc.
“Un viaje es como un matrimonio. La manera correcta de equivocarte es pensar que lo controlas.”
-John Steinbeck-
3. Elegir autobús sí o sí
Es evidente que los autobuses suelen ser las opciones más baratas para viajar, pero tienen muchos inconvenientes. El tiempo de tránsito es más alto y, además, la comodidad tampoco es su fuerte. Piensa que en un traslado largo llegarás cansado, perderás tiempo para disfrutar de tu destino y hasta te puede poner de mal humor.
4. Prepara tu seguro de cancelación
Normalmente, un seguro de cancelación para el transporte no suele elevar mucho la suma total del billete. De hecho, si viajas con compañías aéreas, esta práctica es muy recomendable si el vuelo es cancelado o surgen vicisitudes. Ten por seguro que evitarás problemas y vivirás más tranquilo.
5. Transporte en carpooling
Un método que cada día tiene más adeptos es el carpooling. Este consiste en viajar en coche y compartir gastos. Un buen ejemplo de ello es la célebre compañía Bla Bla Car.
Sin embargo, no debemos olvidar que nos montamos en el vehículo de otras personas, y puede estar sucio, con el maletero muy lleno o que sea un conductor poco exigente con las normas. Piénsalo antes de decantarte por esta opción.
6. Subestimar distancias
Otro error que suele perjudicar mucho al viajero es el subestimar las distancias y las ubicaciones. Este hecho puede hacer que los trayectos de transporte sean más caros y lentos. Así pues, asegúrate de que tu hotel se encuentra en una buena zona si después no quieres dejarte el presupuesto del viaje en varios taxis diarios.
7. Imprime tu check in online
Aunque hoy en día todo se hace a través de internet, el check in online impreso sigue siendo una buena práctica para evitar colas excesivamente largas en el aeropuerto. Así pues, recuerda llevar toda tu documentación comprobada, en regla y renovada si hace falta para que los problemas no surjan en el peor momento.
8. El transporte barato puede salir caro
No debemos olvidar mirar los chollos con lupa. Por ejemplo, si pensamos en un vuelo barato. En muchas ocasiones, aterrizarás en aeropuertos muy alejados de tu destino real y con combinaciones de transporte público deficientes. Este hecho encarecerá finalmente tu viaje, haciendo que el ahorro sea mínimo o inexistente y alargando los tiempos de espera y desplazamiento.
9. Cuida tu equipaje
Otro buen consejo es el de cuidar siempre tu equipaje y no dejarlo al alcance de otras personas. Recuerda que en ciertos países, esto puede ser una golosina para gente con pocos escrúpulos y perder todas tus cosas en un viaje es una experiencia horrible. Así pues, sobre todo en tren, cuida de tus maletas con mimo.
10. Elije bien tu método de transporte
Es horrible el hecho de hacer un viaje ilusionado y, una vez en tu medio de transporte todo sea incómodo. No puedes estirar las piernas, los asientos son viejos y pequeños, el vehículo está destartalado, no hay sitio para las maletas o tienes niños cerca que no dejan de llorar.
Así pues, elije bien la forma de desplazamiento que más se adecue a ti, a tu personalidad y a tus necesidades para que tu viaje no comience con muy mal humor.