Visitar el mar Muerto, esto es todo lo que tienes que saber
Seguro que alguna vez has oído hablar del mar Muerto, y quizá te gustaría saber cómo es. Pues bien, queremos contarte todo lo que tienes que saber antes de visitar el mar Muerto, este lugar tan especial para Israel y con tantas cosas que contarte. ¡Prepárate para un viaje distinto y para admirar un paisaje de ensueño!
Se trata de un lago salado situado entre Israel, Palestina y Jordania. Mide 80 kilómetros de largo y tiene una superficie de 810 km². Se encuentra en la oquedad de dos placas tectónicas y es considerado como el punto más bajo de la Tierra. En concreto, está a 413 metros por debajo del nivel del mar.
¿Por qué es tan especial el mar Muerto?
Lo que hace tan especial al mar Muerto es la elevada concentración de sales que hay en el agua. Está por encima claramente del resto de mares que podamos imaginar. La razón es que, al encontrarse tan en el interior y no tener salidas, los diversos minerales que llegan a las aguas no encuentran camino y se quedan allí estancados.
En concreto, el mar Muerto recibe los minerales del río Jordán, también los propios que se encuentran en la superficie. Los ríos finalizan allí su recorrido, pero no surgen otros que lo hagan continuar. Al ser una región seca, la situación se agrava. Por eso la concentración de sales es tan elevada y por eso el mar Muerto es un lugar tan especial.
Características de sus aguas
La elevada concentración de sales minerales en el agua hace que su densidad sea más elevada que en el resto de mares. El resultado es que si nos bañamos en el mar Muerto somos capaces de flotar sin esfuerzo. Algo similar es lo que ocurre con los cadáveres: son capaces de flotar en el agua. Quizás esta sea una respuesta de por qué se llama así.
Sus aguas son ricas en calcio, magnesio, potasio y bromo. Al contrario que ocurre con el agua del mar, tiene poco sodio, sulfatos y carbonatos, por lo que es totalmente diferente a esta. La concentración de sales del mar muerto es de 238 kg por m³, algo que destaca mucho si lo comparamos con el agua de mar.
Al existir una salinidad tan elevada, en él apenas habitan especies vegetales y animales. Por eso llama realmente la atención visitar el mar Muerto: porque apenas hay vida a su alrededor, lo que también puede dar respuesta al origen de su nombre.
A pesar de estos datos tan llamativos, el mar Muerto no es el más salado de la tierra. Existe el lago Assal de Yibuti y algunos lagos en la Antártida con concentraciones todavía superiores.
La temperatura del mar Muerto es elevada, de unos 25ºC, una temperatura agradable. En verano, por la influencia del sol, llega a alcanzar temperaturas de 34-35ºC.
Visitar el mar Muerto
Si te decides a visitar el mar Muerto, déjanos decirte que bañarse en sus aguas tiene muchos beneficios para enfermedades de la piel. También para la artritis, la fatiga, el estrés, alergias, reuma o males musculares. Esto es debido, precisamente, a esa concentración de minerales que hay en sus aguas.
Además, la atmósfera es favorable debido a que se filtra muy bien la radiación ultravioleta, por lo que el sol no es tan perjudicial. Tomar el sol a la hora de visitar el mar Muerto es, por tanto, una actividad que puede resultar incluso beneficiosa para nuestra salud.
La conciencia de los beneficios del mar Muerto ha hecho que existan muchos hoteles cerca del lago, por lo que no tendrás problemas a la hora de alojarte allí.
Para llegar, eso sí, tendrás que superar un largo camino lleno de curvas hasta alcanzar el punto más bajo de la Tierra. Pero no temas, el camino merecerá la pena. Solo con ver el mar Muerto y su color peculiar, rodeado de la nada, te encantará.
Sin embargo, su riqueza mineral hace las actividades para su extracción impliquen tareas de evaporación artificial de las aguas, lo que ha influido en su nivel. No obstante, se está trabajando para proteger este lugar natural tan especial. ¿Y tú? ¿Te animas a conocerlo?