Un recorrido por el palacio de Viana de Córdoba

Entre patios de estilo cordobés y salas nobles se desarrolla uno de los palacios más bonitos de Córdoba. ¿Nos acompañas a visitarlo?
Un recorrido por el palacio de Viana de Córdoba
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 29 mayo, 2019

El palacio de Viana es uno de los monumentos más visitados de Córdoba. No es de extrañar, pues la belleza arquitectónica y artística está presente en todos sus rincones. Se trata de un palacio con más de cinco siglos que forma parte de la historia y del urbanismo de esta maravillosa ciudad andaluza. Te mostramos un breve recorrido para que disfrutes de él al máximo.

Breve introducción histórica del palacio

Patio de Columnas
Patio de Columnas

El palacio de Viana de Córdoba comenzó a construirse en el siglo XV. Su origen tiene lugar con el señorío y marquesado de Villaseca. Una familia que, a través de la IX marquesa de Villaseca, quedó emparentada por matrimonio con Teobaldo Saavedra, al que el Alfonso XII concedió en 1875 el título de marqués de Viana. De ahí el nombre del palacio.

Así, formará parte del patrimonio de los marqueses de Viana hasta que su última heredera, la III marquesa de Viana, viuda y sin descendencia, decide vender la casa a una entidad bancaria. Actualmente, pertenece a la Fundación CajaSur, que lo ha rehabilitado y abierto al público.

El conjunto se conforma por una casa-palacio, 12 patios y un jardín. Se ubica en el barrio histórico de Santa Marina y está declarado Bien de Interés Cultural desde 1981.

El palacio de Viana

Interior del palacio de Viana de córdoba
Salón del palacio – Bobo Boom / Wikimedia Commons

Este es un ejemplo de palacio aristocrático. Todo él es símbolo de poder de sus propietarios. Ya desde su entrada se puede percibir lo grandiosa que es la construcción.

Así, su portada de estilo manierista nos invita a entrar al llamado Salón el Mosaico. Aquí podemos contemplar un mosaico romano del siglo IV que el II marqués de Viana ordenó traer al palacio en 1923. En este espacio podemos admirar un cuadro sobre cuero que representa a Cleopatra y Marco Antonio, realizado en el siglo XVII.

Y en la Sala de las Vitrinas se puede disfrutar de parte de una vajilla de la Compañía de Indias, del siglo XVIII. Esta fue un regalo que el rey Alfonso XIII al II marqués de Viana, que ostentaba, entre otros, el cargo de sumiller de Corps de la Real Casa.

En la planta baja destacan también el Salón de Tobías, con sus paredes repletas de frescos; la Galería de los Saavedra, en la que se encuentran seis cuadros de esta familia de la nobleza; y la capilla, con su Cristo de la Humildad.

La parte alta del palacio

Cocina del palacio
Cocina del palacio

A la planta alta se accede por una impresionante escalera renacentista con baranda de mármol tallado y cubierta por una bóveda mudéjar de lazo. En esta planta se encuentran los dormitorios entre los que destacan el dormitorio negro y el dormitorio francés, ambos decorados con muebles de estilo francés.

Asimismo, aquí encontramos los salones privados. Entre ellos, no hay que perderse el Salón del Artesonado, con sus tapices flamencos y el Salón Portugués, que toma este nombre por los muebles portugueses del siglo XVIII que lo decoran.

Mientras tanto, en la parte destinada al servicio, la cocina es lo más llamativo. Aquí se conserva una maravillosa colección de cerámica española y de porcelana.

Los patios del palacio de Viana de Córdoba

Pero las zonas que más llaman la atención del palacio son sus doce patios. Son todos diferentes y encantadores, reflejo de la progresiva ampliación de todo el palacio y de la larga tradición de patios que existe en Córdoba.

Patio del palacio de Viana de Córdoba
Patio del palacio

Así, nos encontramos con el patio vecinos documentado más antiguo de Córdoba, el de los Gatos. Este patio es de origen medieval. Fue adquirido por el I señor de Villaseca en el siglo XVI, pero hasta el siglo XVIII no tendrá comunicación real con el resto del palacio.

De estilo renacentista son el Patio de Recibo, situado en el acceso principal del palacio y el Patio de las Rejas, que se abre a la calle por medio de ventanas enrejadas. Mientras que el Barroco se representa en el Patio del Archivo, en el cual tiene su sede el Archivo Histórico de Viana.

Otros patios que componen el conjunto son el Patio de la Madama y el Jardín de Viana, ambos de estilo romántico. También hay que mencionar el Patio de los Jardineros, el de la Alberca, el de la Cancela o el de los Naranjos, entre otros. Pasear por ellos y descubrir sus encantos es la mejor forma de culminar la visita a este maravilloso palacio.