Torun, una ciudad maravillosa en Polonia

Torun, una ciudad maravillosa en Polonia

Escrito por Adrián Pérez

Última actualización: 04 marzo, 2020

Vamos a viajar a una ciudad al norte de Polonia, a orillas del río Vístula. ¿Por qué Torun? Porque tiene más de 300 monumentos destacados, porque toda la ciudad es Patrimonio de la Humanidad y porque aquí nació nada más y nada menos que Nicolás Copérnico. ¡Por todo esto y mucho más te recomendamos dar un paseo por esta hermosa localidad histórica!

Torun, más de 7 siglos de historia

Si no eran suficientes las razones por las que elegimos Torun para una escapada de unos días, tienes que saber que la composición de la plaza mayor y sus calles adyacentes… ¡Es la misma que hace 700 años!

Pero por supuesto, la historia de esta ciudad no comienza en esa época sino varios siglos antes (se encontraron vestigios de presencia humana en el 1100 a.C., sin embargo ya desde la Edad Media el asentamiento fue creciendo y creciendo.

Plaza de Torun
Plaza de Torun – Boris Stroujko

En 1230 los Caballeros Teutónicos llegaron a la zona y construyeron un castillo, símbolo de pertenencia y también de protección (está en ruinas y se puede visitar). Unos años más tarde, Thorn adquiere derechos de ciudad y a partir de 1263 diferentes órdenes religiosas se establecieron en el territorio (primero los franciscanos y luego los domínicos).

En 1454 se une a su vecina “Thoner Neustadt” y en el siglo XIV a la Liga Hanseática donde comienzan las luchas y levantamientos en armas. Torun perteneció a Alemania durante la Segunda Guerra Mundial y a partir de ese momento la población se duplicó. Sin duda, uno de los hitos más destacados de la posguerra fue la fundación de la Universidad Nicolás Copérnico en 1945.

“En medio de todo está el Sol. Pues, ¿quién en este bellísimo templo pondría esta lámpara en otro lugar mejor, desde el que se pudiera alumbrar todo?.”

-Nicolás Copérnico-

Paseando por Torun

Ahora que ya sabes un poco de la historia de esta ciudad gótica típica del noreste de Europa te recomendamos que pasees por sus hermosas e históricas calles. Encontrarás a cada paso una buena cantidad de monumentos con marcada influencia báltica.

Uno de los más destacados si dudas es el que honra a su “hijo pródigo”, Nicolás Copérnico. La estatua está emplazada en la Plaza del Mercado en pleno centro de la ciudad. La figura del astrónomo sin dudas es un símbolo de Torún.

Estatua deNicolás Copérnico en Torun
Estatua de Nicolás Copérnico – cargol

De espaldas a ella tienes otro de los imperdibles de la ciudad: el Ayuntamiento. Se trata de un edificio construido con ladrillos en el siglo XIII y que en el pasado fue la casa consistorial y el centro del mercado local. Sube hasta lo más alto de su torre (de 40 metros) y disfruta de las espectaculares vistas de la ciudad vieja con las torres medievales y el rojo del ladrillo de las casas.

Cerca de la plaza está la catedral de San Juan, una de las tres de estilo gótico ubicadas en la ciudad. En la pila bautismal hay un epitafio de Copérnico (verás todo tipo de alusiones a este personaje a lo largo de Torun).

Catedral de San Juan en Torun
Catedral de San Juan – Artur Bogacki

Otro de los edificios destacados es la iglesia de San Jacobo, también gótica, con impresionantes frescos en los muros. La última exponente de este estilo es la iglesia de Santa María, donde descansan los restos de otro personaje importante de la ciudad y de Polonia: la princesa Ana Wazowna.

El paseo sigue tras los pasos de Copérnico, como no podía ser de otra manera. El hogar donde nació y vivió el astrónomo es una típica construcción medieval. No es la original, sino una réplica, pero vale la pena conocerla, ya que es un museo que repasa la vida y las obras de este científico.

Casco viejo de Torun
Casco viejo de Torun – krivinis

Si te gusta la cultura contemporánea te recomendamos que asistas a cualquiera de los teatros de la ciudad o que la visites durante el Festival Internacional del Teatro durante el mes de mayo. El más destacado es el Baj Pomorski, al sureste del casco viejo, antiguo pero reestructurado.

Para terminar la jornada y como “obligatorio” en tu estancia por Torun, no dejes de probar los pastelitos de especias y miel llamados “Piernik”, típicos de la zona.