Teruel en España, la ciudad de los enamorados
Si bien la historia romántica más famosa de la literatura universal es Romeo y Julieta, del célebre William Shakespeare, no podemos olvidar que en la ciudad de Teruel, en España, existe una leyenda que también pide a gritos ser tan famosa como los amantes italianos.
La ciudad de Teruel reclama una y otra vez el interés turístico a veces olvidado de forma inmerecida, tanto para los propios españoles como para el visitante que llegue a España desde cualquier rincón del mundo.
En este sentido, los Amantes de Teruel, la trágica historia de dos personas capaces de todo por amor, no debe ser jamás olvidada, y el propio pueblo les recuerda año tras año conmemorando los profundos sentimientos románticos que la pareja se tenía.
Los amantes de Teruel en España
Teruel, pese a ser considerada como una de las capitales provinciales más olvidadas de España, es una ciudad llena de vida y color que bien merece un profundo paseo por sus calles para conocer los innumerables encantos del lugar.
En este caso, la de los amantes de Teruel es una historia llena de drama que levanta simpatías en todos aquellos que la conocen.
Su romance tuvo lugar durante el siglo XIII, en tiempos de un Teruel en el que los cristianos estaban recién llegados y que formaba frontera con los reinos de taifas musulmanes, que todavía controlaban el levante español.
Los dos protagonistas de la historia fueron Isabel de Segura y Juan Diego Martínez, cuyo romance era imposible en la época por las enormes diferencias económicas y de clase que había entre ambos.
Por un lado, Isabel de Segura era una chica joven perteneciente a una familia muy rica de la zona, mientras que Juan Diego Martínez era de origen humilde, por lo que era prácticamente imposible su casamiento. Juan Diego tomó lo decisión de marchar a la guerra para tratar de encontrar una mejor posición económica que le hiciese merecedor de la mano de Isabel. Para ello tomaría cinco años de su vida para labrar su fortuna.
El triste destino hizo que Juan Manuel volviese al pueblo el mismo día en que Isabel se casaba con un hombre rico de Teruel, pues ella había accedido a la boda aún estando enamorada del joven, ya que este no volvía ni había visos de que lo hiciese.
Juan Manuel trepó por la pared del nuevo hogar de los recién casados para pedir un beso a Isabel. Ante la negación de la chica, el dolor hizo que el muchacho muriera en el mismo instante.
“Si las gentes saben que aquí ha muerto, dirán que yo lo he matado y seré puesto en gran apuro”
–Pedro de Azagra, esposo de Isabel de Segura, tras la muerte de Juan Diego Martínez–
Durante el funeral, ella se acercó a besar el cadáver de su amor, cayendo muerta ante él también por el dolor. Ante esta situación, el pueblo, conocedor de la noticia, decidió enterrarlos juntos y fueron conocidos como los amantes de Teruel.
Qué ver en Teruel
La ciudad de Teruel ha dedicado un gran esfuerzo para popularizar la historia de sus amantes más célebres. Por tanto, visitar el lugar siguiendo los pasos de Juan Diego e Isabel es una idea excelente.
Si te acercas hasta la iglesia de San Pedro, podrás observar un mausoleo dedicado a esta desdichada pareja en el que también se puede vislumbrar una estatua dedicada a ambos jóvenes obra de Juan de Ávalos, junto con pinturas y artes inspiradas en esta legendaria historia que tan importante es para el pueblo de Teruel.
La devoción de las gentes de Teruel por los célebres y legendarios amantes les ha llevado a celebrar en fechas del 19 al 22 de febrero las “Bodas de Isabel de Segura”, que tienen lugar desde el año 1997 y en las que se escenifica el enlace de esta con Pedro de Azagra así como la muerte de Juan Diego con una representación que recrea los hechos acaecidos. Besos, comida, feria medieval y fiesta te están esperando si eres tan atrevido como para ir.
Además, podrás conocer los rincones con más encanto de Teruel, como la catedral, la famosa Plaza del Torico, la antigua muralla o sus torreones e iglesias con elementos mudéjares, tan característicos de esta bella ciudad.