Siracusa, la ciudad italiana que no te puedes perder

De colonia griega a ciudad italiana. Siracusa desprende historia por todos los poros de sus edificios y calles. ¿Te vienes a conocerla con nosotros?
Siracusa, la ciudad italiana que no te puedes perder
Cristina Moreno

Escrito y verificado por la historiadora del arte Cristina Moreno.

Última actualización: 15 septiembre, 2019

Siracusa es una bella ciudad italiana situada en la isla de Sicilia, al sur de Italia. Su origen estuvo en la isla de Ortigia, hoy unida por dos puentes a la costa siciliana. Y es allí donde encontramos gran parte del patrimonio histórico más antiguo de la ciudad.

Un poco de historia

La historia de Siracusa se remonta a muchos siglos atrás. Sin embargo, es en época griega cuando comienza a tener verdadera importancia. Será la segunda colonia griega que se asiente en la isla después de Naxos. Como curiosidad, aquí nació y murió el célebre matemático Arquímedes.

Siracusa y la isla de Ortigia
Siracusa y Ortigia

Siracusa toma su nombre de una laguna que en ella existía y que se llamaba Syraco. Será ciudad griega hasta que en el año 212 a.C. los romanos la conquisten. Fue atacada por espartanos, atenienses y cartagineses y gobernada por los famosos tiranos de Siracusa. Por ella han pasado muchas civilizaciones que han dejado sus huellas.

La ciudad de Siracusa es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde el año 2005.

Qué visitar en Siracusa

La ciudad nos brinda la oportunidad de visitar monumentos de épocas muy diferentes. Gracias a ello podemos comprender perfectamente el paso de los distintos pueblos que se asentaron en ella. Vamos a destacar algunos de los sitios que hay que visitar.

El Parque Arqueológico de Neápolis

Teatro griego
Teatro griego

Como decíamos, Siracusa fue una ciudad de origen griego que fue ocupada a lo largo de los siglos, por lo que en ella se encuentran monumentos de distintas culturas. Destacan el teatro griego, el anfiteatro romano y la necrópolis Gotticelli, en la que se puede visitar lo que se cree que es la tumba de Arquímedes.

Además, podemos encontrar otros monumentos como el arco de Augusto o el Altar de Hierón. Y cerca se encuentran las canteras de las que se extraían las piedras utilizadas en la construcción de los edificios importantes. Unas canteras que toman el nombre de latomías y en las que destaca la llamada Oreja de Dionisio.

Un lugar al que se le atribuye una bella leyenda que puso de moda el pintor Caravaggio. Según esta leyenda, este lugar fue el elegido por el tirano Dionisio I para encerrar a los disidentes de su gobierno. Gracias a su especial acústica, podía escuchar todos los planes que tramaban en contra de él.

En Neápolis también podrás visitar la gruta del Ninfeo, un lugar que se cree que estaba consagrada a las musas. Otro de los rincones imprescindibles es la Vía de los Sepulcros, donde se pueden apreciar una serie de hipogeos de época bizantina.

La catedral de Siracusa

Catedral de Siracusa
Catedral de Siracusa

Es el templo principal de la ciudad antigua en Ortigia y se encuentra sobre el templo consagrado a la diosa Atenea, que quedó integrado dentro de la catedral. Así, la catedral de Siracusa es un compendio de varios estilos y épocas. El templo griego, cuyas columnas se encuentran en el interior, es del siglo V a.C., mientras que el templo cristiano es del siglo VII d.C.

Asimismo, la portada es barroca y se debe al arquitecto Andrea Palma y al escultor Ignazio Marabitti. Y en el interior se pueden admirar unos mosaicos que son de época normanda.

Las iglesias de Siracusa

Iglesia de Santa Lucía
Iglesia de Santa Lucía

Siracusa cuenta con una gran cantidad de iglesias de varias épocas. Visitarlas es una manera ideal de hacer un recorrido por los distintos estilos artísticos. Así, encontramos iglesias de estilo bizantino, como la basílica de Santa Lucía extra Moenia. Ubicada en el barrio de Santa Lucía, en su interior se conserva un cuadro de Caravaggio: El entierro de Santa Lucía.

También podrás admirar iglesias góticas, como la de Santa Maria dei Miracoli, después transformada a estilo renacentista y en la que destaca su portada de mármol. Y además, hay joyas barrocas, como la iglesia del Colegio Jesuita, situada en la parte antigua de Siracusa, en Ortigia.

Los palacios

Palacio Migliaccio
Palacio Migliaccio

Siracusa también está llena de palacios de todas las épocas. Los renacentistas y barrocos son los más llamativos. Destacan, entre otros, el Palazzo Beneventano del Bosco y el Palazzo Migliaccio; o la actual sede del Ayuntamiento, el Palazzo Vermexio.

Los museos de Siracusa

No te puedes ir de esta hermosa ciudad sin visitar sus impresionantes museos. Entre ellos, hay que mencionar el Museo Arqueológico Paolo Orsi, el Museo del Papiro y la Galería Regional del Palazzo Bellomo de Siracusa, donde podrás contemplar una amplia colección de obras de arte que van desde Bizancio hasta el siglo XVIII.