Un paseo inolvidable por el río Loira y sus tesoros
El valle del río Loira es conocido como “el jardín de Francia”, debido a sus verdes extensiones de tierra que albergan hermosos castillos como los de Amboise o Cheverny. En este artículo vamos a dar un paseo por una región conocida por sus bellos edificios de estilo renacentista, pero también por sus bodegas. ¡Acompáñanos en esta aventura!
La belleza del río Loira
La región del valle del Loira es un lugar donde en pocos kilómetros se puede viajar en el tiempo y aprender mucho de arquitectura e historia. En la Edad Media, el valle del río Loira fue elegido por la alta sociedad para construir sus palacios y castillos de descanso veraniego.
El Loira es el río más largo de Francia, con algo más de mil kilómetros entre Ardéche y su desembocadura en el océano Atlántico. Para muchos viajeros el mejor tramo es el de la ribera entre Loiret y Anjou. El recorrido tiene 280 kilómetros y está “salpicado” por 130 jardines y unos 100 castillos o palacios. Sin duda, un viaje a la historia más lujosa de Francia.
“Para viajar, dame una buena brújula, que ya me encargaré yo de ponerle el imán”.
–Carlos Olmo-
Qué lugares visitar a orillas del río Loira
El valle del río Loira es una zona de gran belleza biológica, histórica y cultural. Puede realizarse en varios días, deteniéndose en las ciudades, pueblos y castillos principales. Hay muchos, pero nosotros hemos seleccionado algunas paradas más que interesantes.
1. Orleans
Es la primera ciudad que podemos recorrer en nuestro itinerario yendo de norte a sur. La capital de la región del Centro-Valle del Loira fue fundada por los celtas y librada por Juana de Arco del asedio inglés durante la Guerra de los Cien Años.
Se pueden seguir los pasos de la “doncella de Orleans” por la ciudad, visitando el museo en su recuerdo o la casa en la que la alojó el conde de Orleans. También hay otros rincones imperdibles como la Place du Martroi, la catedral o el edificio del ayuntamiento.
2. Blois
Con su castillo, construido por el rey Luis XII, y el Bosque de Russy, Blois es uno de los lugares más visitados del Loira. La construcción, de estilo medieval, tiene tres alas: Luis XII de ladrillo y piedra con elementos renacentistas; Francisco I con arquitectura y ornamentación italianas y Gastón de Orleans al fondo del patio con una antesala con tres órdenes (dórico, jónico y corintio).
3. Tours
Fue nombrada “Ciudad de arte e historia” y, además, es conocida por la calidad de sus vinos. Entre sus atractivos cabe destacar la catedral de San Gaciano. Tampoco hay que perderse el castillo, el Palacio de Justicia, los Museos de Bellas Artes y de Historia Natural, así como el Hotel Gouin.
4. Amboise
Con sus calles estrechas y sus casas con entramado de madera, es una de las más visitadas de todo el valle del río Loira por diversos motivos. Por un lado, porque alberga la Mansión de Clos Lucé, donde vivió y murió Leonardo da Vinci. Por el otro, porque su castillo (donde se sepultó al pintor) está a 500 metros del río y domina toda la localidad.
El castillo de Amboise data del siglo XIII y tiene rincones tan maravillosos como la capilla de Saint Hubert, las alas de Carlos VIII y Luis XII, la terraza y las dos grandes torres circulares.
5. Saumur
Esta ciudad vio nacer nada menos que a Coco Chanel, la famosa diseñadora de alta costura. El principal atractivo turístico de Saumur es su castillo, construido en el siglo X para el conde de Blois como baluarte defensivo contra los ataques de los Normandos. Fue reconstruido a fines del siglo XII en estilo gótico por Enrique II de Inglaterra.
6. Cheverny
A falta de uno, esta ciudad del Loira tiene dos castillos. El primero, que se llama como la localidad, es renacentista y cuenta con un parque con orangerie y dos jardines (uno inglés y otro francés), un museo y 100 hectáreas de parque (privadas). Dentro de la construcción destacan el comedor, la escalera de honor, los apartamentos privados y la sala de armas.
El otro castillo es el de Troussay, que comenzó a erigirse en el año 1450 y, si bien ha cambiado muchas veces de dueño, mantuvo su estilo con el paso de los años. Entre sus rincones principales están los parques, las habitaciones y los salones (como el de música y el de rezar).