La Sierra de Gata en Cáceres, un paraíso casi perdido
Al norte de Extremadura, en la frontera con Portugal y con la provincia de Salamanca, encontramos a la Sierra de Gata. Tranquila y hermosa, su ubicación le otorga una mezcla de influencias que hacen de esta una zona mágica que perdura en el recuerdo. Al visitarla te espera mucha montaña, generosa vegetación y laderas con preciosos pueblecitos.
La Sierra de Gata, un pequeño paraíso
La Sierra de Gata se encuentra al noroeste de la provincia de Cáceres, apenas separada de Portugal por la línea fronteriza. Esta zona es un paraíso que sorprende, pues se trata de un universo natural en el que se percibe un prolongado aislamiento geográfico.
Pueden verse los olivos y castañales tratando de imponer su verde intenso en las montañas y bosques. Las laderas acunan preciosos pueblos de pizarra, barro y granito, con entramados de madera. En ellos todavía se escucha A Fala, lengua que mezcla el galaico-portugués. Este es una de las grandes señas de identidad de esta bella tierra.
Qué no puedes perderte en la Sierra de Gata
1. San Martín de Trevejo
San Martín de Trevejo es un pueblo con una gran belleza paisajística que ha sido declarado Bien de Interés Cultural. Tiene una particularidad, y es que por las callecitas de su casco antiguo corren arroyos. Sus preciosas casas son de madera y adobe, también lo son sus palacios, como el del Comendador y el de Ojesto.
Su Plaza Mayor porticada es otro de sus atractivos, junto con la torre-campanario de la iglesia de San Martín de Tours donde se conservan tres tablas de Morales, del siglo XVII. En la plaza también puede verse el Ayuntamiento.
Aquí se habla A Fala, idioma local que comparten con sus vecinos de Valverde del Fresno y Eljas. Este idioma ha sido declarado Bien de Interés Cultural como peculiaridad lingüística.
2. La Ruta de A Fala
La particular lengua compartida por algunos pueblos de Sierra de Gata ha dado lugar a una ruta de senderismo que recorre los tres pueblos que hablan A Fala con ligeras variantes. Se trata de un sendero de pequeño recorrido conocido como PR-CC-184. Es un circuito sencillo, animado y muy bien señalizado.
Su primer tramo es el más atractivo, de 4,8 kilómetros y dura unas dos horas. Parte desde San Martín al puerto de Santa Clara. Este recorrido sigue la calzada romana que pasa por el castañar de los Ojestos, el mayor de Extremadura.
3. Trevejo
Este pueblecito medieval es otra aldea característica de la Sierra de Gata. Se encuentra a unos 12 kilómetros de San Martín de Trevejo.
Se trata de un pueblo de casas de roca que rodean una cresta granítica, donde se levantan las ruinas de un castillo. Este castillo fue construido por los árabes y fue destruido por las tropas napoleónicas a comienzos del siglo XIX. Vale la pena subir a este lugar y admirar el atardecer.
4. Robledillo de Gata
Este es un lugar imprescindible de Sierra de Gata. Es uno de los pueblos más bonitos, construido totalmente en piedra de pizarra, madera y adobe. Su belleza es aumentada por los riachuelos que descienden bajo las casas y que alimentan la fuente de Encimavilla.
“Un viajero sabio nunca desprecia a su propio país.”
– William Hazlitt –
5. Santibáñez el Alto
Santibáñez el Alto fue construido por la condesa Teudosinda para ser un lugar defensivo. La condesa venía de Francia huyendo de Carlos Marte, aproximadamente hacia el año 812. Fue construido en lo alto de una colina, por lo que sus vistas de la comarca son impresionantes, con panorámicas incluyen el embalse de Borbollón.
Sus calles laberínticas, estrechas y empinadas llevan hasta lo alto, donde se encuentra su fortaleza, dominando un pueblo de vida apacible y con un paisaje sencillamente espectacular.
6. Torre Don Miguel
El pueblo de Torre Don Miguel cuenta con una cuidada arquitectura tradicional serrana. En su calles estrechas, y laberínticas se descubren su bella iglesia, el Ayuntamiento, la Plaza Mayor, la ermita de Cristo de la Misericordia y una sinagoga.
Este pueblo tiene una apariencia que te llevará al pasado. Sus pasadizos, escalones, subidas y bajadas te mostrarán una mezcla de culturas cristianas, árabes y judías. Un lugar mágico y desconocido.
7. Gata
Este pueblo que le da nombre a la sierra, muestra un casco urbano con una arquitectura tradicional muy bien conservada. Destaca el edificio del Ayuntamiento, su Plaza Mayor soportada (donde se celebran mercadillos semanales) y la iglesia de San Pedro.
No te pierdas el embalse de Rivera de Gata, donde existe un coto de pesca y el centenario y robusto cedro que se encuentra en la ermita del Humilladero, así como el singular Jardín Botánico que acoge a una variada y exótica flora.