Guadalajara, la "Perla de Occidente" de México
La capital del estado de Jalisco, en el centro-oeste de México es una de las mayores urbes del país. Cuenta con un gran patrimonio cultural e histórico y tuvo un papel esencial en el proceso de la independencia. Lugar originario de los mariachis y del tequila, vamos descubrir una ciudad única: Guadalajara.
Guadalajara, de villa a metrópoli
La fundación de la villa de Guadalajara tuvo lugar en 1532, aunque la fundación “oficial” data de una década más tarde. El emperador Carlos I de España le otorgó el título de ciudad y escudo de armas en 1542. Poco después, en 1560, se estableció el obispado de Nueva Galicia (había unos 500 residentes españoles para esa época).
En 1792 se fundó la Universidad de Guadalajara y durante la Guerra de Independencia mexicana la ciudad tuvo un importante papel. Aquí el cura Miguel Hidalgo y Costilla declaró la abolición de la esclavitud y los insurgentes fueron vencidos. Tras la batalla pasó a ser la capital de Jalisco.
En el siglo XX la ciudad creció de manera acelerada y se convirtió en una gran metrópolis industrial, siendo la segunda más poblada del país. Las guerras regionales (con los estados de Guanajuato y Michoacán) y el crac del 29 repercutieron en la vida social. Pero la ciudad se recuperó en los años 40.
La calma duraría hasta la década de los 90, cuando ocurrieron trágicos sucesos. Explosiones, crisis económica y el asesinato del cardenal llevaron a Guadalajara casi a la ruina. Afortunadamente, los sectores turísticos y de servicios fueron clave para la reactivación económica local.
Qué ver en Guadalajara
En un recorrido por esta ciudad mexicana podemos hallar un gran patrimonio histórico y cultural. Edificios civiles y religiosos, así como también monumentos que recuerdan hechos importantes de la vida de Guadalajara. Por su belleza ha recibido el sobrenombre de “Perla de Occidente” ¿Qué no te puedes perder de ella?
1. Catedral de Guadalajara
Su nombre completo es Catedral Basílica de la Asunción de María Santísima y fue construida en 1541 (la iglesia original era de paredes de adobe y techos de paja). Fue seriamente dañada por seis seísmos, el último en 2003. La torre norte se inclinó, la cúpula se resintió y el edificio se hundió. Alberga el coro más antiguo de México (funciona desde hace 450 años).
2. Arcos de Gudalajara
Este monumento consta de dos arcos y está ubicado en la Avenida Vallarta (la principal de la ciudad) en su intersección con la calle Arcos. Eran usados como entrada a Guadalajara y en su parte central se puede leer una inscripción que dice: “Guadalajara, capital del Reino de Nueva Galicia, fundada en este lugar el día 14 de febrero de 1542”.
3. Rotonda de los Jaliscienses ilustres
Este monumento está ubicado en la intersección de las avenidas Miguel Hidalgo y Fray Antonio Alcalde y la calles Independencia y Liceo, en pleno centro histórico de la ciudad y al lado de la catedral. Rinde homenaje a los locales que trascendieron en la historia.
4. Panteón de Belén
Es un cementerio antiguo usado también como hospital civil. Funcionó como panteón entre 1848 y 1896 y tuvo que ser cerrado por cuestiones de salubridad. En la actualidad funciona un museo para narrar la historia de Guadalajara y mostrar cerca de 900 nichos de cantera rosa.
5. La Minerva
Este monumento representativo de la ciudad tiene una fuente adornada con una estatua de la diosa Romana Minerva. Las obras para erigir la segunda fuente más grande de Guadalajara terminaron en 1859. Tiene 74 metros de diámetro y contiene los nombres de los 18 hombres que contribuyeron a fundar la capital de Jalisco.
6. Fuente de la Inmolación de Quetzalcóatl
Esta escultura de 5 piezas labradas a mano en bronce. La figura central mide 25 metros de alto y pesa 23 toneladas, siendo una de las más altas del mundo. Las alegorías de los laterales miden 6 metros de ancho.
Representa la inmolación de Quetzalcóatl para elevarse al infinito, encender el sol y dar luz. Las esculturas que lo rodean representan a los cuatro puntos cardinales.
“Todos los viajes tienen destinos secretos de los que el viajero es consciente.”
– Martín Buber –
No puedes irte de la ciudad sin entrar al menos a uno de sus tantos teatros. Entre ellos destacan la Casa Teatro El Caminante, el Estudio Cavaret, los teatros Degollado y Diana, la Casa Suspendida y el Auditorio del Ángel.