Fuentes históricas de Granada: otra forma de ver la ciudad
Las fuentes históricas de Granada muestran la importancia que el agua ha tenido para esta ciudad andaluza a lo largo de los siglos. Te proponemos un pequeño recorrido para conocer algunas de las más representativas. ¿Nos acompañas?
Granada y su culto al agua
El paso de varias civilizaciones por la ciudad siempre estuvo ligado al abastecimiento de agua de la población y de las huertas. Pero desde época islámica es famosa por sus fuentes, ríos y acequias. No en vano, el mejor ejemplo de buen uso del agua lo encontramos en La Alhambra y el Generalife, sus monumentos más conocidos.
Granada cuenta con centenares de acequias históricas, la atraviesan dos ríos y Sierra Nevada surte sus acuíferos. Además, su agua ha sido protagonista de miles de poemas:
Por el agua de Granada, solo reman los suspiros.
-Federico García Lorca-
Así, y como no podía ser de otra manera, Granada se fue llenando desde el Renacimiento de fuentes históricas de una belleza extraordinaria. Son fuentes realizadas con el mejor mármol de la zona, el de Sierra Elvira, y de cuyos caños cae el agua con armonía musical.
Fuentes históricas de Granada: la fuente de las Granadas
Nuestro recorrido empieza en el paseo del Salón, en el punto de inicio de la ciudad histórica. Esta fuente fue un regalo de la empresa Emasagra a la ciudad de Granada en 2007. Destaca por sus dimensiones y por su material, bronce reforzado con acero.
Cuenta con cuatro tazas y 100 surtidores de agua. Su decoración está dedicada Granada y a su agua. Así, las cuatro figuras que la adornan son alegorías de Sierra Nevada, La Vega, el río Darro y el río Genil. Además, impresionan las enormes granadas que se asientan sobre la tercera taza.
Si continuamos por la Carrera de la Virgen, podemos llegar a otras dos fuentes históricas de Granada: la de las Batallas y la de la plaza del Campillo. Esta última está hecha en mármol blanco y con una decoración que no tiene nada que envidiar a la de las fuentes italianas.
La fuente de los Gigantones
En la Plaza Bib-Rambla encontramos la bella fuente de los Gigantones. En su origen, esta fuente se encontraba en el desaparecido convento de San Agustín, hoy mercado central y zona de tapeo.
Se trata de una majestuosa fuente del siglo XVII, que adquiere su nombre debido a los preciosos atlantes que sostienen una de las tazas. Está construida en mármol gris de Sierra Elvira y consta de taza-base y dos tazas superiores.
Sus figuras fabulosas de máscaras, monstruos y seres mitológicos la hacen parada oficial si visitas el centro de Granada. Además, podrás disfrutar de una de las plazas más bonitas de la ciudad y cerca encontrarás la catedral y la Alcaicería.
La Plaza Nueva
Cerca de Bib-Rambla se encuentra Plaza Nueva. Allí, además de disfrutar de un espacio único desde el que contemplar la Alcazaba de la Alhambra, la bonita portada de la iglesia de Santa Ana y el inicio del paseo de los Tristes, podemos ver otra fuente maravillosa.
Esta fuente es de 1868. De ella destacan las conchas de piedra que salen de su primera taza y la forma de concha marina de la segunda. La corona un surtidor en forma de granada.
Pilar del Toro, otra de las fuentes históricas de Granada
Está ubicada casi a los pies de la iglesia de Santa Ana y es una de las fuentes más antiguas de la ciudad, ya que data de mediados del siglo XVI. Su artífice fue Diego de Siloé, arquitecto de la catedral de Granada. En su origen estaba adosada a una casa y servía como abrevadero para los animales y para el suministro de la población.
La fuente está construida en mármol gris de Sierra Elvira y su nombre proviene de una hermosa cabeza de toro tallada en su frontis. Junto a ella, dos mancebos sostienen los caños de bronce por donde brota el agua.
Si nos situamos dándole la espalda, podremos contemplar el magnífico edificio de la Chancillería Real de Granada. Esta construcción alberga hoy el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Pilar de Carlos V
La última de las fuentes históricas de Granada que vamos a ver está situada a los pies de la puerta de la Justicia de la Alhambra. Da la bienvenida al visitante que decide acceder al monumento nazarí caminando desde Plaza Nueva.
Se trata de una hermosa fuente diseñada por Pedro Machuca, el arquitecto del palacio de Carlos V y realizada por el artista Niccolo da Corte en 1545. Consta de una enorme taza rectangular a la que vierten sus aguas 3 caños que salen de los mascarones que la decoran.