Fortalezas en Cuba: recuerdo de su pasado colonial

La isla de Cuba fue uno de los lugares clave del sistema colonial hispano en el territorio americano. El puerto de La Habana se convirtió en el punto de reunión de la Flota de Indias que debía partir, cargada de tesoros, al puerto de Sevilla. La defensa de ese puerto y su ciudad fue fundamental para la Corona.
Fortalezas en Cuba: recuerdo de su pasado colonial
David Díaz

Escrito y verificado por el historiador David Díaz.

Última actualización: 24 noviembre, 2019

El legado histórico y cultural de América Latina está íntimamente vinculado al pasado de la península ibérica. Pero el vínculo con Cuba ha sido mayor, quizá por la importancia estratégica de La Habana en el tráfico de los tesoros americanos hacia la península –de ahí la construcción de importantes fortalezas en Cuba– y por la nostalgia de ser la última posesión colonial de ultramar.

Lo que sí es indiscutible es el valor que se le dio a la isla, en especial a la ciudad de La Habana. Es así porque este punto era el lugar de reunión de las distintas flotas procedentes de la Nueva España y del Virreinato del Perú –a través de Panamá y Portobelo– con destino al puerto de Sevilla.

La concentración de la flota en la isla era un foco de atracción para corsarios y piratas que pretendían asaltar a los navíos. Para evitar cualquier ataque, las autoridades coloniales idearon un sistema defensivo mediante fortalezas. Son edificaciones que todavía siguen en pie y recuerdan a los cubanos y a los visitantes ese pasado colonial. ¡Hablemos un poco de ellas!

Fortalezas coloniales de Cuba y La Habana

Uno de los primeros sistemas defensivos de Cuba fue el de La Habana. Estaba conformado por tres fortalezas: el castillo de la Real Fuerza, el de San Salvador de la Punta y el del Morro. Por ello, estas tres fortificaciones están en el escudo de la ciudad .

1. Castillo de la Real Fuerza de la Habana

Castillo de la Real Fuerza de La Habanal

En la temprana fecha de 1558 se empezó construir una de las fortalezas que fue decisiva durante el ataque por parte de tropas inglesas a la ciudad de La Habana en el año 1762. Aunque su construcción se demoró 19 años, rápidamente destacó entre las fortificaciones hispanas en Cuba y en el Caribe.

A pesar de su papel en la defensa de la ciudad, su posición geográfica no favorecía el cumplimiento de su objetivo defensivo, pues estaba ubicada muy adentro del canal de entrada a la bahía de La Habana. Esa posición dificultaba la tarea de protección y disuasión de los ataques piratas y corsarios.

Esta fortaleza se levantó en el espacio que luego sería el núcleo de la villa. Frente a ella se creó una plaza, hoy en día la plaza de Armas, alrededor de la cual se instalaron importantes vecinos de la ciudad. En la torre de la fortaleza se ubicó la Giraldilla, una veleta de bronce. Esta es la escultura fundida en bronce más antigua de la Cuba y actualmente es símbolo de La Habana.

2. Castillo de San Salvador de la Punta

Castillo de San Salvador de La punta, una de las fortalezas de Cuba

Conocido también como el castillo de la Punta, se levantó en la entrada de la bahía, en sotavento. Su construcción, iniciada en 1589, estuvo marcada por dificultades económicas y políticas que entorpecieron su edificación. Incluso en algunas ocasiones se planeó su desmantelamiento, proyecto que nunca se ejecutó.

A lo largo del siglo XIX sufrió diversas modificaciones y en el siglo XX se utilizó como sede del Estado Mayor de la Marina y la Guerra y como Puesto Naval. Con el triunfo de la Revolución, el castillo se convirtió en Escuela de Milicias y en los 70 se convirtió en Sede del Instituto Cubano de Hidrografía.

En 1982 fue declarado, junto con centro histórico y el resto del sistema defensivo, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. A raíz de esto, se inició una restauración de la fortaleza y desde el año 2002 funciona como museo.

3. Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro

Castillo de El Morro en la Habana

Esta edificación se levantó en la entrada de la bahía del lado de barlovento. Es, quizás, la fortificación más importante de la ciudad por su posición estratégica. Su papel fue determinante durante la toma de La Habana por parte de los ingleses en el año 1762. Este episodio causó muchos daños a la fortaleza que obligaron a su reconstrucción.

A raíz de la reconstrucción, se aumentó su capacidad defensiva añadiendo dos nuevos baluartes, un foso, camino cubierto, aljibes, cuarteles, calabozos y almacenes. En 1764 su torre empezó a funcionar como faro, pero no es el que podemos admirar hoy en día, pues en el año 1844 se demolió la torre para levantar una nueva.

4. Fortaleza de San Carlos de la Cabaña

Fortaleza de San Carlos de la Cabaña

Esta fortaleza no formó parte del primigenio sistema defensivo habanero. Su construcción se planificó en el siglo XVIII, pues tras la toma de La Habana, los ingleses lograron hacerse con el castillo del Morro porque consiguieron ocupar la explanada que ocuparía esta fortaleza. Ese fue un lugar determinante para posicionar su artillería y noquear las fuerzas españolas.

Su edificación finalizó en 1774. Con 700 metros de largo y 240 de ancho, es una de las fortalezas más grandes de Cuba y de todo el imperio hispano en América. Durante la guerra de independencia, la Cabaña albergó las mejores fuerzas del ejército español en la isla y por sus calabozos pasaron muchos de los héroes cubanos de la independencia, entre ellos José Martí.

Con el triunfo de la Revolución cubana, el Che Guevara ocupó militarmente este emplazamiento. Por ello, la fortaleza alberga documentos y testimonios del Che que se pueden visitar.

En el año 1986 se inició su restauración y abrió al público como el Parque Histórico Militar Morro-Cabaña en el año 1991. Desde el año 2014 el castillo alberga el museo Venezuela Libre, un homenaje a la vida, obra y legado del comandante Hugo Chávez.

Otras fortalezas de Cuba

Hay otras fortalezas en la isla de Cuba, pues la Corona debía armar un eficaz sistema defensivo en el Caribe para proteger su sistema de monopolio. Algunas de ellas las podemos encontrar en Santiago de Cuba o en Cienfuegos. A pesar de ello, La Habana fue clave para la economía colonial y, por ello, ese pasado colonial esta más presente en ella.